El presidente de la SEPI, durante su comparecencia ante la Comisión de Presupuestos del Congreso, ha manifestado que “confía” en que en el año 2015 Navantia tendrá “tres grandes realidades”, como son la construcción de un flotel para Pemex, ya en marcha en Ferrol; de dos BAM para la Armada española ya confirmados –uno de ellos se hará en los astilleros de San Fernando-; y del llamado quinto gasero para Gas Natural, que de concretarse al fin, se ejecutaría en Matagorda. Y espera que “alguna de las 80 actuaciones comerciales en el mercado militar o de las 33 en el mercado civil puedan surtir efecto”.
El presidente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Ramón Aguirre, durante su comparecencia este jueves 2 de octubre ante la Comisión de Presupuestos del Congreso de los Diputados, ha manifestado que “confía” en que el año que viene Navantia tendrá “tres grandes realidades”, como son la construcción de un flotel para la petrolera Pemex, ya en marcha en Ferrol, de dos Buques de Acción Marítima (BAM) para la Armada española ya confirmados –uno de ellos se hará en los astilleros de San Fernando-, y la finalización de negociaciones sobre el llamado quinto gasero para Gas Natural, del que a estas alturas no se sabe mucho más y que de concretarse al fin, se ejecutaría en Matagorda.
Del mismo modo ha señalado que espera que en 2015 “alguna de las 80 actuaciones comerciales en el mercado militar o de las 33 en el mercado civil puedan surtir efecto y podamos hablar de acuerdos para dos buques auxiliares para Australia, dos fragatas para Filipinas, cuatro corbetas para la Marina de Qatar y un buque oceanográfico para la Marina de Perú”.
Además, Aguirre ha destacado que “el grado de satisfacción con los talleres de reparación” de Navantia es “tan importante” que en el próximo ejercicio las reparaciones estarán ocupadas al 95% de su capacidad. La planta de la capital gaditana se dedica a ello.
Por otro lado, y ante las críticas de los trabajadores del astillero de Ferrol y del PP gallego, entre otros, ha defendido la decisión de esta empresa pública de trasladar la fabricación una mínima parte del contrato de Pemex a la planta puertorrealeña, que lleva meses sin apenas faena.
Ante las preguntas realizadas por los grupos parlamentarios relativas a este asunto, según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, Aguirre ha recordado que este programa es considerado como “estratégico” por Navantia ya que representa su vuelta al mercado civil, por lo que es una condición indispensable cumplir con el contrato. “A día de hoy el proyecto acumula un retraso, no imputable a Navantia, por lo que su situación no se corresponde con el avance requerido para alcanzar los hitos contractuales acordados con el armador”, ha apostillado.
De este modo, “ante la necesidad de optimizar el uso de los recursos propios de la compañía en todos sus centros sin actividad en este momento –ha explicado-, Navantia decidió trasladar la fabricación de estos ocho ocho bloques al astillero de Puerto Real, ya que puede realizar construcción civil en 2014 y ejecutaría la obra en su mayoría con personal propio. De esta manera, conseguiremos un mayor despliegue de trabajos en unas fechas críticas para recuperar los avances que la planificación requiere”.
Del mismo modo ha querido resaltar que la construcción de estos ocho bloques “sólo supone 25.000 horas de trabajo sobre un total de 1.100.000 horas para la producción del buque, lo que supone sólo un 2,3% del total, mientras que la facturación será de 1,1 millones de euros, lo que representa sólo un 0,7% de la facturación total del contrato”.
OTROS ASUNTOS
Por otro lado, Ramón Aguirre ha recordado que el nuevo modelo de supervisión de Navantia por parte de Defensa responde a una mera asignación de tutela. Según el presidente de SEPI, “este acuerdo no supone una nueva organización ni ningún cambio organizativo, tampoco cambia el porcentaje de participación pública en las empresas ni el titular de las acciones, ni por supuesto la configuración de la representación en los Consejos de Administración”.
A preguntas de los grupos parlamentarios, Ramón Aguirre ha aclarado que “el acuerdo del Consejo de Ministros tiene como objeto poner bajo la tutela del Ministerio de Defensa, en colaboración con los ministerios de Hacienda, Economía e Industria, la protección y potenciación de un sector estratégico crítico para la seguridad nacional como es la industria de defensa”.
Finalmente, y en relación al fin del veto a la construcción civil, el presidente se ha remitido a la respuesta de la Comisión Europea hecha pública recientemente en la que confirmaban que el 1 de enero de 2015 expiran los compromisos de España relativos a la limitación de la construcción naval civil de Navantia. En cualquier caso, Aguirre ha pedido prudencia “hasta que el nuevo Comisario de la Competencia ratifique el fin del veto a la construcción civil”.