El Consorcio de Transportes Bahía de Cádiz ha rebasado los 4 millones de viajeros en los primeros nueve meses del año, lo que supone un crecimiento del 2,3% respecto al mismo periodo de 2018, de enero a septiembre.
Como es lógico, los autobuses interurbanos siguen representando la mayoría de desplazamientos, con 3,4 millones y cerca del 85%, mientras que el servicio marítimo de catamaranes (entra la capital y El Puerto y Rota) mantiene las cifras en positivo, con cerca de 500.000 usuarios y una subida del 4,3%.
El Consorcio contabiliza en estos nueve meses de 2019 un total de 4.095.148 viajeros, lo que equivale a 92.843 más que en el mismo periodo del pasado ejercicio. Los autobuses interurbanos han mantenido la tendencia al alza, con 3.475.357 usuarios (casi un 2,2% más) frente a las cancelaciones en autobuses urbanos, que mantienen prácticamente las mismas cifras, con 151.298 viajeros (apenas 753 de diferencia).
Además, el servicio marítimo ha crecido en lo que va de año más de un 4,2% en sus dos líneas metropolitanas, que conectan por barco Cádiz con El Puerto de Santa María y Rota. De esta manera, se han alcanzado los 468.493 desplazamientos, es decir, 19.201 más que entre enero y septiembre de 2018.
Por otro lado, según resaltan desde la Junta de Andalucía en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, el número de tarjetas operativas del Consorcio (conllevan descuentos respecto al billete simple) en este ámbito también va en aumento hasta alcanzar las 182.028. Sólo desde el pasado junio se han expedido 7.195 nuevas tarjetas en Cádiz. Por su parte, la interoperatividad, es decir, los viajes con tarjeta única fuera del área metropolitana, han alcanzado los 75.327, con lo que se sitúa en el segundo consorcio andaluz con mayor volumen en este tipo de operaciones por detrás únicamente del área de Sevilla.
Al Consorcio de Transportes Bahía de Cádiz pertenecen siete localidades de pleno derecho que firmaron en 2002 el convenio de constitución para su creación: Cádiz, Jerez, San Fernando, El Puerto, Chiclana, Puerto Real y Rota. Es un ente participado por la Junta de Andalucía (principalmente), la Diputación y estos municipios. A los ayuntamientos integrantes a la vez de la Mancomunidad de la Bahía se han unido en los últimos años mediante convenios de actuación preferente en entorno no metropolitano Medina Sidonia, Arcos, Sanlúcar, Conil y Chipiona, con lo que este Consorcio incluye en su ámbito hoy día a 12 municipios.
CONTINÚAN LAS DENUNCIAS POR LA FALTA DE TRANSPORTE ADAPTADO
En paralelo, y como se vienen poniendo en evidencia en las últimas semanas (a mediados de octubre la Asociación Gaditana de Personas con Discapacidad Física, Agadi, convocaba una protesta en la capital), la organización juvenil Abrir Brecha ha denunciado también, mediante un vídeo, la falta de accesibilidad en el transporte público metropolitano: una estudiante con movilidad reducida explica en el mismo el “calvario” que puede llegar a ser ir de casa a la facultad.
Este colectivo señala como principales responsables al Consorcio de Transportes y a la empresa Comes (que hace nada se enorgullecía por la incorporación a su flota de cinco nuevos vehículos adaptados). Sin embargo, entiende que es una “responsabilidad compartida” entre los diferentes actores que conforman este ente público, entre los que se cuentan diversos ayuntamientos, la Diputación y la Junta, que soporta la mayor participación. Igualmente, se apunta que la propia Universidad de Cádiz “también ha tenido parte de responsabilidad en este problema durante los últimos años” como representante de los estudiantes dentro de la comisión de participación del Consorcio.
“Esto se suma a diferentes problemas ya existentes: horarios imposibles, insuficiencia de líneas, así como los precios”, remarcan desde Abrir Brecha incidiendo en que unos de los colectivos que más sufren el transporte público en la Bahía son los universitarios.
De este modo, este colectivo juvenil exige que todos los autobuses metropolitanos cuenten, “sin excepción”, con adaptación PMR (personas con movilidad reducida) y el mantenimiento necesario y periódico para que no dejen de funcionar. Además de esto, solicitan que la empresa Comes desarrolle un protocolo interno para que sus trabajadores habiliten la rampa de acceso siempre que una persona lo solicite.