El Consejo de Ministros acaba de autorizar al Ministerio de Industria la suscripción de un convenio con Navantia relativo a la prefinanciación del programa de construcción de dos BAM para la Armada española. Barcos que se vienen vendiendo, curiosamente, desde la antesala de las elecciones europeas, en mayo; y que se confirman a unos días de entrar 2015, año de municipales y generales; aunque estaban comprometidos desde la salida del anterior Gobierno de Zapatero en 2011… Finalmente, sólo uno de los buques se hará en astilleros gaditanos. El PP provincial se pone medallas y habla de que comienza una “nueva etapa de gran prosperidad para nuestra industria naval”. El PSOE lamenta los tres años de retraso respecto al momento en que Rajoy pudo haber tomado ya esta decisión.
El Consejo de Ministros autorizaba el 5 de diciembre al Ministerio de Industria, Energía y Turismo la suscripción de un convenio de colaboración con Navantia relativo a la prefinanciación del programa de construcción de dos buques de acción marítima (BAM) para la Armada española. Dos barcos que se vienen vendiendo, curiosamente, desde la antesala de las elecciones europeas, en mayo; y estaban comprometidos desde la salida del anterior Gobierno central del PSOE, en 2011, aunque entonces la idea era contratar cuatro BAM que se construirían en la Bahía de Cádiz. Finalmente, sólo uno de los buques se hará en astilleros gaditanos. Supone 2,2 millones de horas de trabajo tanto para la plantilla propia como para la industria auxiliar, entre San Fernando y Ferrol.
Este programa se enmarca en el acuerdo suscrito en 1996 por el Ministerio de Industria y el Ministerio de Defensa para los programas especiales de armamento. Industria financia de este modo a la empresa pública Navantia la construcción de los dos BAM mediante anticipos reembolsables a interés cero. El importe total de la financiación asciende a más de 333 millones, repartidos en diferentes cantidades hasta el año 2019. Esta cifra coincide con la cantidad autorizada por el Consejo de Ministros al Ministerio de Defensa para la adquisición de estos dos barcos de guerra.
Y el mismo viernes día 5, Navantia comenzaba formalmente los trabajos del programa con el corte del primer acero, simultáneamente en los astilleros de San Fernando y de la Ría de Ferrol. Este encargo se inició cuando el Consejo de Ministros autorizó en agosto la partida presupuestaria para ambos barcos, posteriormente se actualizó el convenio entre Navantia y Defensa, y por último ahora se ha firmado la orden de ejecución y se han iniciado los trabajos, según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz. En concreto, los trabajos iniciados en ambos barcos, consisten en el corte del primer acero del bloque 3011, correspondiente a la quilla y con un peso de 67 toneladas.
Esta orden de ejecución supone la vuelta a la construcción militar con la Armada española, tras más de ocho años, ya que la anterior ocurrió en julio de 2006, relativa a la Fragata F-105 y a la primera serie de los BAM (cuatro buques construidos en la Bahía).
El objetivo del programa BAM es constituir una Fuerza de Acción Marítima Oceánica para la Armada “mediante buques diseñados a partir de una plataforma fiable, de bajo coste de sostenimiento, plantilla reducida y gran capacidad de permanencia en el mar”. La nueva fase del programa que ahora se inicia, se afirma, “presenta un elevado interés e impacto industrial y que justifica su financiación por parte del Ministerio de Industria”.
“SE REAFIRMA EL COMIENZO DE UNA NUEVA ETAPA DE GRAN PROSPERIDAD”
El PP gaditano ha calificado de “magnífica noticia” para la provincia la firma de la orden de ejecución del nuevo BAM que se desarrollará en los astilleros gaditanos, así como el inicio del corte de chapa.
“La Bahía de Cádiz está de enhorabuena porque se reafirma el comienzo de una nueva etapa de gran prosperidad para nuestra industria naval”, afirman al unísono el presidente del PP de Cádiz, Antonio Sanz, la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, y el presidente de la Diputación y alcalde de San Fernando, José Loaiza; a lo que agregan su agradecimiento al Gobierno de Rajoy “por su compromiso con los astilleros gaditanos y por considerar nuestra industria naval una prioridad, pese a las zancadillas del PSOE”, partido al que reprochan su actitud “destructiva y de confrontación”.
Sanz, que parece olvidar que los trabajadores de los astilleros gaditanos llevan casi tres años de movilizaciones reclamando carga de trabajo, que parecen fructificar ahora, que se acercan elecciones municipales y generales, llega a decir que “hoy comienza un nuevo futuro para los astilleros gaditanos”. Interpreta que la construcción de este BAM supondrá más de dos años de trabajo y generará 500 empleos, “a lo que se sumará los nuevos trabajos para la subestación eléctrica de Iberdrola y el quinto gasero”. Este último contrato, tras perderse los cuatro gaseros anteriores, sigue sin confirmarse.
“El Gobierno del PP vuelve a demostrar su compromiso y apuesta clara por las capacidades de la industria naval gaditana garantizando carga de trabajo por un plazo de cuatro años como mínimo, picos de empleo de hasta 10.000 empleos y beneficios para 250 empresas del sector auxiliar”, subraya.
“EL BAM MÁS DESEADO Y DURANTE MÁS TIEMPO”
Por su parte, la secretaria general del PSOE de Cádiz, Irene García, ha felicitado al conjunto de trabajadores del sector naval de la Bahía gaditana, y muy especialmente a la plantilla de Navantia, al confirmarse la firma de la orden de ejecución del nuevo Buque de Acción Marítima. “Aunque sea con tres años de retraso respecto al momento en que el Gobierno del PP pudo haber tomado ya esa decisión, por fin uno de los cinco BAM comprometidos por el anterior Ejecutivo socialista se va a convertir en una realidad. De hecho, este es el BAM más deseado y el que ha sido anhelado durante más tiempo por los trabajadores de Navantia y por todo el sector naval de la Bahía”, manifiesta.
“Sin duda, se trata de una magnífica noticia para despejar la inquietud sobre nuestro sector naval y para garantizar los empleos dependientes tanto de los astilleros públicos como de las empresas privadas que son clave en el desarrollo de sus pedidos”, ha asegurado. En este sentido, ha destacado el “papel esencial” de los trabajadores del sector naval a la hora de conseguir que los diques recuperasen la actividad tras años de intranquilidad creciente. “Los trabajadores de Navantia y de sus empresas auxiliares llevan años dando una auténtica lección de responsabilidad en la defensa de un patrimonio esencial para la Bahía de Cádiz y para esta provincia, como son sus astilleros. De ahí que su implicación para lograr carga de trabajo haya conseguido por fin sus frutos pese a las reiteradas decisiones en contra y la cerrazón del propio PP, incluyendo a sus dirigentes provinciales”, considera García.
En este sentido, ha lamentado que la llegada de carga de trabajo en forma de este nuevo BAM se haya producido después de sucesivas negativas de la derecha en las Cortes Generales a impulsar la segunda fase de este convenio con el Ministerio de Defensa. Así, ha recordado que “antes de que abandonáramos el Gobierno tras las Elecciones Generales de 2011, el Consejo de Ministros presidido por José Luis Rodríguez Zapatero dejó aprobado el desarrollo de la segunda fase de los BAM”. Y ha añadido que “por mucho que ahora la propaganda del PP quiera convencernos de lo contrario, Mariano Rajoy ha mantenido el proyecto guardado en un cajón durante tres años, con la complicidad de Antonio Sanz, Teófila Martínez y José Loaiza, entre otros dirigentes del PP que ahora se desharán en elogios hacia su Gobierno y que tratarán de ocultar que los recortes también han llegado a ese proyecto”.
Más allá de ese contrato de carácter militar que beneficia ahora a la antigua Bazán en La Isla, los socialistas han anunciado “que vamos a estar vigilantes para que Navantia y la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) aprovechen las posibilidades de consecución de carga de trabajo tras la inminente finalización del veto a la construcción civil en los astilleros públicos, fijada para el próximo 1 de enero, que ha lastrado durante una década al sector como consecuencia de la nefasta gestión de los astilleros durante la infausta etapa de Gobierno de José María Aznar”.