La presidenta de la Junta ha visitado los tres astilleros públicos de la Bahía de Cádiz, y se ha hecho esas fotos “oportunistas” que tanto han irritado al PP, al tiempo que ha comprometido la “colaboración y la complicidad” del Gobierno regional para que estas plantas de Navantia “tengan presente pero, sobre todo, futuro”. La socialista ha compartido con la dirección y trabajadores las nuevas perspectivas que se abren para la empresa y la industria auxiliar, al ir confirmándose en las últimas semanas ansiada carga de trabajo; y ha tenido su mano para que astilleros deje de usarse en “el frentismo político”.
Pese al enojo del PP y sobre todo de su líder provincial, Antonio Sanz, la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha visitado en la jornada del lunes los tres astilleros públicos de la Bahía de Cádiz, y se ha hecho esas fotos “oportunistas” que tanto han irritado a la derecha –algunas de ellas, curiosamente, junto a la popular alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez-, al tiempo que ha comprometido la “colaboración y la complicidad” del Gobierno regional para que estas plantas de Navantia “tengan presente pero, sobre todo, futuro”.
La socialista Díaz ha pasado por las factorías de Navantia en Puerto Real, Cádiz y San Fernando –y por este orden-, unas instalaciones que, ha dicho, “son fundamentales en el desarrollo de la Bahía de Cádiz y sobre todo en el nuevo desarrollo económico que queremos para Andalucía”. En el inicio del recorrido, a las puertas de Matagorda, no ha faltado un grupo de exDelphi, que ha sido ignorado por la comitiva, pese a los abucheos. Posteriormente, la presidenta señalaba sobre este conflicto que “todos los parados andaluces son iguales” para ella y que “no puede haber unos parados que tengan más oportunidades que otros porque griten más o porque piensen que tienen más derechos que otros”.
Durante el recorrido inicial por el astillero de Puerto Real –con la presencia de la alcaldesa de la Villa, Maribel Peinado-, Susana Díaz se ha reunido además con la dirección de Navantia y sus accionistas y con los tres comités de empresa en la Bahía.
Según recoge DIARIO Bahía de Cádiz de fuentes de la Junta, la presidenta ha reafirmado en estos encuentros el compromiso del Gobierno andaluz de conceder un incentivo de 3 millones de euros para la modernización y competitividad de los astilleros gaditanos tan pronto como se concrete la nueva carga de trabajo anunciada por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), accionista mayoritaria de Navantia, y el PP, de forma llamativa, durante la pasada campaña de las elecciones europeas: o sea, un BAM para la Armada española que se ejecutaría en San Fernando –que ya ha empezado su tramitación- y el llamado quinto gasero para Gas Natural, que sigue negociándose, y que de confirmarse, sería un importante balón de oxígeno para sacar de la subactividad al astillero puertorrealeño.
Susana Díaz ha considerado “muy importante” la apuesta de “todos los gobiernos” por las factorías de Navantia y, por ello, ha “tendido la mano para sacar a los astilleros del debate, colaborar todas las administraciones y no usarlos en el frentismo político”, para cooperar en el objetivo de que estas instalaciones “tengan presente y que tengan futuro”. “Es un momento importante para garantizar no solo el presente, sino también el futuro y todas las apuestas, todas las líneas de inversión de los gobiernos tienen que dirigirse a hacer sostenible la actividad de nuestros astilleros en el presente y en el futuro”, ha insistido la presidenta andaluza.
DIVERSIFICACIÓN
Dentro de esa “apuesta de futuro” por los astilleros se incluye también el anuncio de Iberdrola –hecho recientemente ante la misma Díaz, lo que ha disgustado un poco más al PP- de designar a Navantia Puerto Real como su “proveedor preferente” para una subestación eólica marina en Alemania, “un encargo que, de tener éxito, podría trasladarse también a Reino Unido y otros países”. La presidenta ha valorado la “diversificación” que va a suponer este encargo y ha hecho hincapié en la necesidad de que los astilleros sean “competitivos en un mercado cada día más globalizado, donde nuestros productos tienen que ser punteros, de alta calidad y competitivos en precio”.
Esa diversificación se ha concretado, en el caso del acuerdo suscrito con Iberdrola, en un probable contrato de casi 70 millones de euros para fabricar y montar la subestación eléctrica del parque eólico marino Wikinger en Alemania. Dicha fabricación precisará de 600.000 horas de trabajo directo en la planta de Navantia, lo que se traduce en una ocupación media de 250 personas, con periodos en los que llegará a los 500 empleados.
Durante esta visita, el presidente de SEPI, Ramón Aguirre, ha recordado que este encargo supone la culminación de un contrato cuyas primeras conversaciones datan del otoño de 2012: “todo aquel que conoce el mundo del naval sabe que la maduración de un contrato está en el intervalo de entre dos y tres años. Hoy, casi dos años después del comienzo de las negociaciones, podemos decir que Navantia va a ser protagonista del proyecto Wikinger”, ha apostillado.
Ramón Aguirre ha destacado la importancia que supone este contrato para Navantia, al generar una nueva línea de negocio sin precedentes en su catálogo de productos. En este sentido, ha subrayado que “si Navantia acredita su capacidad para abordar este proyecto, aprovechará una enorme oportunidad para acrecentar y fortalecer su reputación en la apertura de nuevos mercados internacionales”.
El presidente de este holding público empresarial ha anotado que el proyecto tiene un tamaño de 160 millones de euros y “aún con un limitado margen de beneficio económico, representa un volumen lo suficientemente elevado para superar las capacidades de una comunidad autónoma”.
Finalmente, Susana Díaz ha valorado que los directivos de Navantia le hayan trasladado “el horizonte de buenas noticias que se espera de cara a nuestros astilleros” –el PP gaditano dejó caer hace unos días que hay negociaciones con Qatar, Turquía, Perú y Colombia, entre otras- y “el momento en que se encuentra la carga de trabajo prevista para los próximos meses”.
EL AYUNTAMIENTO DE PUERTO REAL VUELVE A OFRECER SU COLABORACIÓN
La alcaldesa de Puerto Real, Maribel Peinado, ha valorado de forma positiva que la presidenta de la Junta haya conocido de primera mano las potencialidades de los astilleros. “Espero que con esta invitación que Navantia ha realizado a la presidenta ella tome buena nota de la capacidad que tiene el astillero de Puerto Real. Se trata de una planta muy productiva en materia tecnológica, con un potencial industrial de primera magnitud, competitiva, con un personal que atesora mucha experiencia y tiene un alto nivel de cualificación… muchos conceptos que hacen de la actividad de Navantia una actividad de futuro”, entiende la andalucista.
Por otro lado, Peinado ha agregado que la presencia entre la comitiva que ha seguido a Díaz del delegado del Gobierno andaluz y del delegado territorial de Empleo en Cádiz “debe significar una apuesta real por el empleo, ya que además de la plantilla, la industria auxiliar de los astilleros es fundamental para el tejido productivo de la provincia”.
Finalmente, la primera edil de la Villa ha insistido en que su Ayuntamiento colaborará en todo lo que sea necesario para fomentar el beneficio del empleo y la actividad en Navantia: “ya mostramos nuestra disposición a colaborar en cuantas materias formativas fuesen necesarias de cara a la preparación específica de las nuevas actividades que pueden desarrollarse en la planta”.
EL PP CRITICA QUE VENGA “CUANDO LOS PROBLEMAS ESTÁN YA RESUELTOS”
Y mientras se desarrollaba esta visita, la portavoz del PP de Cádiz, Ana Mestre, repetía el argumentario de su partido con respecto a la misma, criticándola y asegurando “se podía haber producido antes, no cuando ya se han producido los logros después de meses muy complicados donde el PP ha estado solo en la consecución de los contratos”.
A su juicio, que Díaz venga “cuando los problemas están ya resueltos” es “cuanto menos curioso, salvo porque la única política que la presidenta de la Junta conoce es la de los flashes y las fotos”. Y ha considerado que la derecha lleva “mucho tiempo trabajando incansablemente” en un proceso que “ha sido largo y costoso pero que, finalmente, está dando sus frutos”. Exactamente más de dos años de promesas y anuncios en vano hasta ahora, que se han celebrado elecciones.
Mestre, en la reproducción de las palabras de su líder, Antonio Sanz, en los últimos días, ha exigido a la presidenta de la Junta “menos fotos y que trabaje para que el comisario socialista, Joaquín Almunia, antes de irse, levante el veto a la construcción civil y de estabilidad a los astilleros gaditanos”.
