CSIF ha alertado sobre la falta de vacunas de la gripe en centros de salud de la provincia, al menos en el distrito sanitario Bahía de Cádiz, aunque también se sabe que el problema está afectando a otras comarcas y provincias andaluzas como Granada y Huelva.
“Esta situación, más allá del obvio perjuicio que ocasiona a la ciudadanía por el retraso en la administración de dicha vacuna, obliga al personal de los centros de salud a anular y posponer citas, a reorganizar y reajustar citas ya establecidas”, se apunta en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz.
Al respecto, este sindicato ha podido saber, tras el aviso de los propios trabajadores, que hay centros de salud en la Bahía, como el Ribera del Muelle en Puerto Real o el Cayetano Roldán en San Fernando, que llevan varias semanas llamando a personas que tenían cita en estos días para comunicarles que, debido al desabastecimiento actual, no podrían administrarles la vacuna frente a la gripe.
Pese a que la consejería de Salud de la Junta de Andalucía ha negado tal desabastecimiento, CSIF denuncia que “la desorganización y la falta de previsión” es “palpable” en los centros de atención primaria, “porque si es verdad que no faltan vacunas, a los centros sanitarios no están llegando desde hace días”.
Así, se reclama a la administración sanitaria (en manos del PP) que “ponga orden” en su labor logística para que los viales lleguen cuanto antes a los centros. “Pedimos celeridad en la solución de este problema, pues más allá de los perjuicios a la ciudadanía, se están distorsionando las agendas y la propia organización de los profesionales, que ven cómo se acumula el trabajo innecesariamente, cuando siempre falta personal”, se remarca.
La campaña de vacunación frente a la gripe en Andalucía se activaba a mediados de octubre de forma progresiva, comenzando por usuarios y trabajadores en residencias de mayores y en centros de discapacidad. En total, para la campaña 2021/2022 en la comunidad autónoma se han adquirido algo más de 1,6 millones de dosis de vacunas. Una cantidad muy inferior a la que se manejó hace un año, cuando se contó con hasta 2,3 millones (entre las adquiridas por el Servicio Andaluz de Salud y las aportadas por el Ministerio de Sanidad), suponiendo entonces una cifra histórica, en el contexto de la pandemia del Covid-19.