La alcaldable de derechas, María José García Pelayo, ha vuelto a presentar su estrategia de ciudad de cara al 28-M, “un documento sin siglas” pues su futurible gobierno será “de todos y para todos”. Sus más de 400 promesas priorizan “la limpieza, la seguridad, el empleo, la vivienda y hacer las cosas con calidad”.
El PP de Jerez ha vuelto a presentar su programa de gobierno de cara a las elecciones municipales del 28-M; son 410 medidas distribuidas en 15 áreas bajo el lema de ‘Plan Jerez’, que se vende como una “estudiada estrategia de ciudad para hacer las cosas de forma muy distinta a como se están haciendo en los últimos años”.
A decir de la exalcaldesa de derechas y de nuevo alcaldable, María José García Pelayo, se trata de “un documento sin siglas”, pues su futurible gobierno será “de todos y para todos”. Sentencia que repiten estos días todos los candidatos del PP, como si siguieran el mismo argumentario.
Como ya apuntara meses atrás, este compendio de promesas electorales busca “huir de peleas e insultos” y “centrarse en la limpieza, la seguridad, el empleo, la vivienda y en hacer las cosas con calidad”. Y es que esta política, que durante su última etapa en la Alcaldía entre 2011 y 2015 despidió a más de 200 funcionarios municipales y privatizó el agua, afirma que “Jerez espera gestión y no política”, ya que, recurriendo de nuevo al argumentario, “somos la única alternativa a las políticas sanchistas en España y en Jerez”.
REPASANDO PROMESAS
Este documento, según se recoge en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, está compuesto por un “plan de calidad democrática”, unido a medidas dirigidas a mejorar la economía, el empleo y la digitalización, la seguridad, la igualdad, inclusión, dependencia y atención a las familias, el centro histórico, la cultura y el patrimonio, la movilidad, el urbanismo y la vivienda, el turismo y las fiestas, las políticas sostenibles y medioambientales, la educación, la participación ciudadana, las políticas de juventud, de deportes y la atención al Jerez rural.
Del conjunto de medidas, García Pelayo sobresale el protagonismo que si llega a gobernar daría a “la mesa de diálogo social” y a realizar “una gestión económica eficiente, trabajando con otras administraciones para que la deuda no suponga problemas a los jerezanos ni recorte de ningún servicio ni derecho”. Asimismo, se ha comprometido a “la digitalización de la ciudad”, a cerrar el convenio laboral con los trabajadores del Ayuntamiento, a incrementar la plantilla de la Policía Local, y a trabajar de forma coordinada “para acabar con las okupaciones ilegales, la prostitución y los botellones incontrolados”.
Por otro lado, promete crear una delegación específica para Dependencia, al tiempo que ha confirmado su compromiso de cerrar el convenio con las trabajadoras del servicio municipalizado de ayuda a domicilio y a subir la aportación al mismo, así como la elaboración de los planes de igualdad, violencia de género, dependencia, familias, accesibilidad, salud y adicciones.
También promete la derecha jerezana en su plan una concejalía centrada en el centro histórico que coordine todas las medidas de vivienda, limpieza, seguridad, equipamientos, rehabilitación o zonas verdes.
Pero hay más: el PP subraya su “irrenunciable compromiso” a la compra de autobuses nuevos (aunque en su anterior etapa en el gobierno jerezano acabó adquiriendo autobuses de segunda mano que ya no quería el Ayuntamiento de Madrid…). Además, se dice hacer una “apuesta seria” por el servicio de limpieza, y se promete volver a construir vivienda pública, arreglar las viviendas municipales existentes, rehabilitar barrios “y legalizar, junto a la Junta, las 1.200 viviendas pendientes de regularización mediante la aplicación de la LISTA”.
El arreglo y atención a los polígonos industriales, nuevos palacio y centro de congresos, mejora de la oferta de formación profesional dual, que Jerez sea pionera en que la Ley del Flamenco llegue a los centros educativos o que sea sede permanente de una Universidad de Verano y sede de nuevos grados universitarios en el Palacio de Villapanés, todo eso y más, también cabe en este programa de gobierno popular.
Este llamado Plan Jerez también contempla un tiempo máximo de respuesta a las peticiones, sugerencias o quejas de los ciudadanos, el protagonismo del Consejo Social “como concejal 28”, un “compromiso serio” con el Jerez rural y con la mejora de las instalaciones deportivas municipales, así como la conmemoración del 40 aniversario del circuito de velocidad.
Y sorprendentemente, pese a que este partido ha estado ridiculizando durante mucho tiempo la ambición del PSOE de que Jerez aspire a ser Capital Europea de la Cultura en 2031, ahora se suma al carro y manifiesta su “compromiso real” por la candidatura “con una gestión cultural seria y planificada que convierta a Jerez en potencia cultural”.