Los hechos ocurrieron en septiembre de 2020, cuando el denunciado entró en el ambulatorio sin mascarilla y fumando, y fue recriminado. La Junta recuerda que la agresión física o intimidación grave contra el personal sanitario en el ejercicio de su función pública es considerada judicialmente como delito de atentado. Así ha ocurrido en este caso.
En la jornada del pasado 8 de septiembre de 2020, un hombre entró en el centro de salud de Las Delicias, de Jerez, fumando y sin la mascarilla de empleo obligatorio (en estos tiempos de pandemia del Covid-19); y cuando un profesional del ambulatorio le reprochó su actitud, le arrojó un vaso de café ardiendo que portaba, al tiempo que le profería amenazas. Ahora, el Juzgado de lo Penal número 2 de la ciudad le ha condenado por un delito de atentado y un delito leve de lesiones.
Por el delito de atentado le corresponde al acusado la pena de prisión de ocho meses, inhabilitación especial del derecho de sufragio pasivo durante este tiempo y prohibición de aproximarse a menos de 200 metros del trabajador, tanto en su domicilio, su trabajo como en cualquier otro lugar que frecuente, así como de comunicarse con él por cualquier medio durante dos años y seis meses. Esta última prohibición también es aplicable en el caso del delito leve de lesiones, el cual, además, implica una pena de un mes de multa con cuota diaria de seis euros y al pago de las costas del procedimiento.
Tanto el Área de Gestión Sanitaria de Jerez, Costa Noroeste y Sierra como la delegación territorial de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía, que por si acaso vuelven a condenar este tipo de episodios violentos, subrayan en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz que, como pone de manifiesto este juzgado jerezano, “la agresión física o intimidación grave contra profesionales sanitarios en el ejercicio de su función pública asistencial viene siendo considerada como delito de atentado por los tribunales de justicia, y así se han dictado sentencias en estos casos”.
RENOVADO PLAN DE PREVENCIÓN Y ATENCIÓN DE AGRESIONES
Los profesionales del sistema sanitario público andaluz cuentan desde 2020, tras un acuerdo unánime de la Mesa Sectorial de Sanidad, con un renovado Plan de Prevención y Atención de Agresiones para encontrar puntos de mejora que redunden en una disminución del total de estos ataques verbales o físicos.
Este plan de agresiones incorporó como novedad un programa especial de acompañamiento al personal agredido y un profesional con formación específica que ejerce como guía en la prevención de agresiones y actuación ante las mismas; esta figura del ‘profesional guía’ tiene el objetivo de acompañar, asesorar en los trámites y dar apoyo al trabajador que sufre una agresión.
También habilita en la teoría canales ágiles y rápidos para que la persona víctima de una agresión ya sea verbal o física, no esté sola momentos después de sufrirla; además, se facilita atención psicológica durante el tiempo que sea necesario. Igualmente, el plan mejora la coordinación entre los interlocutores policiales territoriales sanitarios, los interlocutores sanitarios, los directivos de los centros y las asesorías jurídicas.