El colectivo de ingenieros en Cádiz ha lanzado un manifiesto y llaman a todos “sin distinción alguna” a suscribirlo, secundarlo y “constituir un frente común que sólo vele por el interés general de la provincia, que es el interés de todos los gaditanos”.
En este sentido, el Colegio Oficial de Graduados en Ingeniería por la rama Industrial y de Ingenieros Técnicos Industriales de la provincia lamenta el “nuevo mazazo” que para Cádiz, especialmente la Bahía, tendrá el posible cierre de la planta de Airbus en Puerto Real, a lo que se une la marcha sorpresiva de la empresa LTK, compañía logística que trabaja para Alestis –con sede en la Zona Franca de la capital-; así como del pretendido cerrojazo de la cementera Holcim en Jerez.
“Lejos de lanzar mensajes inculpatorios a uno u otro lado”, este colegio profesional asegura en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz que opta por plantear “soluciones” a través de una serie de propuestas con las que luchar contra la insistente desindustrialización de la provincia.
El decano del Colegio de Ingenieros de Cádiz, Domingo Villero, alerta de la “importante pérdida de empleos” que se va a producir “con un agravante extra, la marcha de talento”: “los trabajadores de base irán al paro, pero los ingenieros y el personal de alta cualificación, los que aportan el ‘know-how’, se marcharán a otro lugar. Volvemos a lo de siempre, la pescadilla que se muerde la cola y una espiral decadente. Y esta pérdida de empleo dejará su huella en el sector servicios, pronto habrá menos gente consumiendo en el comercio o en los establecimientos hosteleros”.
“PASAR A LA ACCIÓN”
En nombre de la junta de gobierno del Colegio, quien es también concejal no adscrito en el Ayuntamiento de la capital propone “pasar a la acción y hacerlo más allá de quejarse amargamente o solicitar apoyos a la administración pública de turno, visto ejemplos anteriores”.
“Hay que plantear una alternativa para reconvertir una planta de aviones en una fábrica de tecnologías verdes, impulsar una planta de gestión de CO2 u otros proyectos con futuro. Lo fácil es dejar morir y lo difícil es ingeniar una solución que sea viable económicamente y socialmente. Una vez que se cierra una empresa y se pierden a los profesionales, será muy difícil volver a abrir otra del mismo nivel, como ya ha sucedido anteriormente en la zona”, reflexiona Villero.
“Tenemos uno de los mayores yacimientos de arena silícea en Arcos en explotación de una empresa belga, y en Olvera otro yacimiento pero sin explotación. El silicio es la materia prima fundamental para hacer cualquier tecnología, como los móviles, los ordenadores o las placas fotovoltaicas. Transportar el mineral de Arcos es costoso, debería transportarse el silicio procesado como materiales tecnológicos. Esto aportaría empleo de calidad, i+d, etc.”, añade.
Por tanto, la propuesta de los ingenieros gaditanos pasa también por “reivindicar las industrias que permanecen, funcionan y dan trabajo, resaltar su fortaleza en los momentos difíciles, agradecer su apuesta continuada por una provincia que tiene unos extraordinarios profesionales, solicitar su reconocimiento por toda la sociedad y apoyarlo desde la administración”.
CINCO DEMANDAS
En este sentido, se demanda a la administración pública hasta cinco puntos. Por un lado, “dejar trabajar a las empresas y facilitar al máximo su acceso a licencias, trámites y gestiones. Que la administración no suponga un lastre a su competitividad, esto es: autorizaciones administrativas rápidas”.
Por otro lado, que se apoye la industria “más allá de declaraciones vacías y grandilocuentes, y promesas que no se cumplen”. O sea, ese apoyo “debe venir desde la culminación de las infraestructuras necesarias para favorecer la logística que facilite la exportación, como el corredor ferroviario Algeciras-Bobadilla, o convertir el aeropuerto de Jerez en base logística para el trasporte aéreo transatlántico Europa-América, creando un puente marítimo preferente con África que permita la exportación de productos de valor añadido a todo un continente en vías de desarrollo”.
Igualmente se plantea que se apueste por la creación de polos industriales alrededor de la industria tractora actual en la provincia “que ayude a la explotación de la industria derivada de la química o de la naval, coordinando a los grupos de investigación de las distintas universidades y facilitando la localización de proyectos innovadores internacionales relacionados con la industria derivada de la economía azul”.
También se reclama “atraer la inversión en talento y no inversión que busque mano de obra barata para proyectos de poco valor añadido”; acuerdos de colaboración internacional “para la implantación de proyectos internacionales relacionados con la economía azul”; o concursos internacionales con dotación de ayudas y suelo para el desarrollo de los mismos con los planes urbanísticos renovados con criterios de demanda en toda la provincia.
Finalmente, este Colegio aboga por la creación de un “movimiento industrial civil” que determine las prioridades en las materias anteriores, “sin sesgo político ni sindical, que represente un clamor popular en la provincia, siempre con argumentos como nuestra posición geoestratégica, talento, calidad de vida y cultura industrial de la provincia, bajo un nombre que bien podría ser ‘Cádiz provincia industrial’”.
Ante todo lo expuesto, se ha lanzado un manifiesto y se insta a los gaditanos a secundarlo (AQUÍ). No hay que olvidar que el sector industrial en “es el gran generador de empleo masivo”. “Confiamos en que nuestras propuestas sean respaldadas por la sociedad civil y las instituciones y entre todos comencemos a trabajar ya, antes de que nuestra provincia se muera del todo”, subraya Domingo Villero.