El Museo del Flamenco de Andalucía (y el Centro Andaluz de Documentación del Flamenco) en Jerez, planteado en el entorno de la plaza de Belén entre los señeros barrios de San Miguel y Santiago, que se viene prometiendo desde 2017, comenzó a levantarse al fin en enero de 2022 con un plazo de ejecución de casi dos años, por lo que debería haber estado rematado entre finales de 2023 y principios de 2024 (recurriendo inicialmente a fondos europeos de la ITI de Cádiz, hasta 6,8 millones de euros).
Sin embargo, desde el pasado enero se venía detectando “una ralentización de las obras, así como una bajada en el ritmo de las certificaciones periódicas, llegando a un estado de paralización total de las mismas en abril”, cuando la obra alcanza un 80% de ejecución.
En junio la consejería de Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía, promotora de la actuación, confirmaba el inicio del procedimiento de la rescisión del contrato con la primera adjudicataria, Díaz Cubero. Además, en paralelo, se anunciaba el siguiente paso: la redacción de un proyecto de terminación de la obra.
Y han tenido que pasar cinco meses para que salga a licitación por casi 253.000 euros y un plazo de cuatro meses esos trabajos de redacción del proyecto básico y de ejecución de cara a acabar el museo algún año. Y todavía quedará por delante, posteriormente, la licitación de esas últimas obras.
En la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz se señala que se propone en concreto la redacción de un proyecto de terminación de las partes parcialmente ejecutadas siguiendo el proyecto básico y de ejecución de agosto de 2020 sobre cuatro fincas ubicadas en pleno centro jerezano (en las inmediaciones de la plaza de Belén, concretamente en las fincas número 8 de la Plaza Peones, número 6 y 8 de la calle Barranco y números 3 y 4 de la calle Doctor Lillo, con acceso para el público desde la calle Barranco).
“PARA CONSERVAR Y DIFUNDIR EL ARTE ‘JONDO’ EN TODAS SUS DIMENSIONES”
Con más de 3.000 metros cuadrados, el Museo del Flamenco de Andalucía contará con salas destinadas a la exposición permanente, zonas administrativas, almacén y talleres, además de cafetería, auditorio para un centenar de personas, salas de consulta, laboratorio, almacén de fondos y cabinas de ensayo. De igual modo, el antiguo Zoco de Artesanía se dedicará para el Centro Andaluz de Documentación del Flamenco, que actualmente se encuentra en el Palacio de Pemartín.
La misma Junta lo vendió en su momento como “un museo del siglo XXI para un arte que no tiene tiempo pero que tendrá su lugar en Jerez, uno de los territorios fundamentales para el nacimiento y el desarrollo del flamenco”.
En la teoría, está concebido como un nuevo centro cultural de gestión y titularidad autonómica dedicado a conservar y difundir el arte ‘jondo’ en todas sus dimensiones: musical, artística, cultural, estética, sociológica, antropológica, económica y, por supuesto, educativa.