CRÓNICA. Tarde grande, la del viernes día 15, en la calle Circo, los tendidos a rebosar, con toreros que tuvieron ganas y una corrida de toros para enmarcar de bonita y colaboradora en general, sin estridencia, como le gustan a los toreros, con exceso de nobleza y justa de fuerza. No se puede pedir más para un triunfo que se torció con el manejo de las espadas. Manzanares ha cambiado las distancias y no termina de encontrarle el sitio. A seguir buscando maestro. Un problema que se está generalizando es el uso de la copla para acompañar cualquier momento de la lidia, venga o no al caso. Una costumbre que ya cansa.
Salida templada del primer bombón de el Grullo al que Padilla saludó por delantales y quite variado al capote. Banderillas marca de la casa con dos dentro a fuera cuarteando de mucha comodidad. El comienzo de faena fue de hinojos, en los medios, con una serie de derechazos rubricada por alto. Otra serie de zapatillas atornilladas fue lo mejor del trasteo. Estocada y oreja.
Tres largas de prologo, un saludo que ya apuntaba a la puerta grande por la predisposición de jerezano. No bajó el nivel en banderillas, cerrado con uno al violín, para construir faena basada en la mano derecha cerrando de rodillas para caldear más el ambiente. Estocada y las dos.
Morante no tuvo su tarde de capote, con el que apenas hizo un atisbo de los que puede llegar a ser en cuatro verónicas. Habrá que esperar otro momento. Un toro con poca trasmisión, y comienzo del de la Puebla sin repetición, que se viene un tanto arriba a mitad de la misma y que vuelve por sus fueros hasta disiparse. Todo quedó en nada. Dos doblones por bajo y dos por alto lo mejor. Pinchazo hondo y descabello. Silencio.
En su quinto no existió el toreo de capa. Y es qué cuando sopla algo de viento… Comienzo de toreo caro con de ayudados por alto de las tablas al tercio. Las series se dibujaron en la arena con un temple que se perdía en el fin de los tiempos. Tras un pequeño atasco a mitad de faena volvió a remontar con un gusto de quien lo tiene por más en una serie iniciada con un farol y de derechazo de mano por los suelos. Aviso, pinchazo hondo y siete descabellos. Ovación.
A Manzanares le vimos mucho más comprometido que en Sevilla, como si supiera lo que aquí tenía delante y en Sevilla no se llegara a enterar. Aún así, basado principalmente en la estética de su torero, se lo vio excesivamente fácil en este tercero donde los cambios de manos destacaban sobre el resto. Pinchazo hondo y oreja.
Cerró un gran toro Sardo al que le faltó humillar un poco más. Bien el de Alicante a la verónica y susto de de la Rosa que al saltar la barrera resbala empotrándolo el toro contra las tablas afortunadamente sin consecuencias. Gran toro que trasmitía y repetía en la muleta de series largas y limpias siempre bien rematadas. Así por los dos pitones. Quiso matar recibiendo a larga distancia dejando media que necesito tres descabellos dejándolo en tierra, y no en volandas de los capitalistas. Ovación. DIARIO Bahía de Cádiz
FICHA DEL FESTEJO:
Corrida de Toros. 2ª de la Feria del Caballo. Casi lleno. Tarde agradable.
Toros de Núñez del Cuvillo, justos de presentación y de fuerzas, colaboradores y manejables en general destacando el sexto sin llegar a humillar.
Juan José Padilla (grana y oro) oreja y dos orejas.
Morante de la Puebla (corinto y oro) silencio y ovación.
José María Manzanares (catasfalco y negro) oreja y ovación.
Presidió Rafael Carreo y se desmonteraron Luis Blázquez, Rafael de la Rosa y Curro Javier. El tercer toro arranca una tabla de un burladero que manda a la grada sin consecuencias.
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