La Feria del Caballo, de Jerez, también se suspende por la crisis del coronavirus; fijada inicialmente en el calendario entre el 9 y el 16 de mayo, el Ayuntamiento ha decidido trasladar este evento de interés turístico internacional a octubre. Una nueva fecha “condicionada siempre al desarrollo de los acontecimientos”.
Así, si no hay nuevas incidencias, se celebraría del 10 al 17 de octubre, de sábado a sábado, y pudiéndose alargar el primer fin de semana con la celebración del lunes 12 de octubre, que es fiesta a nivel nacional.
Desde el origen de la crisis sanitaria, el Consistorio asegura ha venido trabajando en la reorganización de actividades y eventos programados que afectan a todas las áreas municipales, y que ha determinado el aplazamiento de citas deportivas y culturales previstas para estas fechas.
Ya entonces se fijó la atención sobre la posibilidad de un cambio de fecha en la Feria, y durante todo este tiempo se han mantenido contactos con el sector turístico y hostelero, así como con empresas de servicios y suministros vinculadas a la organización de este evento. También se han mantenido conversaciones con Dorna (que tiene los derechos del mundial de Motos), para acompasar las fechas y evitar coincidencias de las citas más destacadas en la ciudad.
Según recoge DIARIO Bahía de Cádiz de fuentes municipales, esta semana, la alcaldesa, Mamen Sánchez, mantuvo un encuentro con Antonio Mariscal, representante del Clúster de empresas turísticas, y con Antonio de María, de la patronal Horeca, para analizar conjuntamente el escenario y las opciones existentes, y ellos a su vez han compartido con el resto de sus socios esta reflexión sobre el aplazamiento de la Feria del Caballo.
En este análisis, se han tenido en cuenta asuntos como el vencimiento de determinados contratos, la suspensión de trámites, la realidad de muchas empresas que en este momento se encuentran en proceso de ERTE, el cierre de hoteles y las previsiones de reservas y de desplazamientos que recomendaban, sin duda, una nueva fecha para dicho evento festivo.
En este sentido, se ha trabajado en la búsqueda de un momento idóneo, teniendo en cuenta muy diferentes variables, principalmente distanciar al máximo la celebración respecto al momento actual de crisis sanitaria, que esa fecha no la hiciera competir con otros eventos, como el Gran Premio, u otras ferias del entorno, por ejemplo; y también se ha tenido en cuenta que la nueva fecha tuviera relación con algún acontecimiento destacado para la ciudadanía.
En este caso, “nos encontraríamos en el mes del patrón, que se celebra el 1 de octubre”. También se buscó la mejor opción para poder tener un festivo nacional en ese rango de fechas, “con el objetivo de atraer al máximo posible de visitantes nacionales”. De este modo, la Feria de Jerez de 2020 se celebraría del 10 al 17 de octubre, “y se podrá alargar el primer fin de semana con la celebración del lunes 12 de octubre”.
“BRINDAR UNA VEZ QUE DEJEMOS ATRÁS ESTA SITUACIÓN EXCEPCIONAL”
La primera edil socialista avanza que, “en paralelo, se trabaja en reforzar la promoción turística y la programación cultural para verano y otoño con el objetivo de aminorar el impacto de esta crisis sanitaria y el confinamiento de los ciudadanos en empresas del sector”.
“La Feria y este conjunto de actividades tienen que servirnos para reactivar al sector turístico y la hostelería, y vamos a seguir trabajando de forma coordinada para tomar decisiones de forma consensuada y avanzando en la reordenación del calendario festivo y en una programación de actividades turísticas y culturales muy importante de cara al verano y al otoño”, recalca Sánchez.
En relación al ciclo festivo, subraya que “vamos a aprovechar todo el potencial de nuestra zambomba y de los distintos festivales. Hemos perdido las procesiones Semana Santa, pero ya nos hemos ofrecido a las autoridades eclesiásticas y a las hermandades para valorar iniciativas y para apoyar una posible procesión de la patrona que tenga una envergadura especial. Estamos dispuestos a colaborar, ya sea en alguna procesión magna u otra conmemoración que nos permita nutrir de contenido cultural los próximos meses”.
“Es evidente que el virus está cambiando nuestra forma de relacionarnos, las costumbres, pero también nuestras fiestas –sentencia la alcaldesa. Llegar hasta allí no va a ser fácil, tendremos que ir adaptándonos al desarrollo de los acontecimientos y en este camino debemos a seguir juntos porque esto nos va a hacer más fuertes. Estamos marcando metas que nos ilusionan para buscar esos espacios de encuentros y brindar una vez que dejemos atrás esta situación excepcional”.