Las relaciones entre Izquierda Unida y el PSOE en el Ayuntamiento de Jerez “en aras de la estabilidad y gobernabilidad de la ciudad”, se rompen, una vez que el Gobierno socialista en el Consistorio matriz ha decidido “dar a dedo” la gestión del agua de la entidad local autónoma (ELA) de Torrecera a Aqualia, pese a la oposición de la mayoría de concejales de la Corporación.
“No podemos mirar hacia otro lado y seguir como si nada después de lo que han hecho. Estamos ante un posible delito cometido por el Gobierno local, y si finalmente así se confirma, sería gravísimo”, expone el secretario local del PCE y miembro de la dirección local de IU, Domingo Pedro García.
En el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, esta formación (que se presentó a las últimas elecciones en confluencia con Podemos bajo la marca Adelante Jerez) denuncia que “le han dado por la cara el agua de Torrecera a Aqualia, de una forma presuntamente fraudulenta y obviando la decisión del pleno. Si no denunciamos esto y defendemos lo público, como corresponde, de quienes se dejan corromper por el interés de las grandes empresas privadas, seremos como ellos. Y no lo somos. Somos Izquierda Unida. Tenemos principios…, y morimos por ellos. Y, por supuesto, no somos rehenes de nada, ni de nadie”.
“Aunque pueda peligrar la continuidad de todas las iniciativas que hemos puesto en marcha en estos años, como los festivales Intramuros o Navirap, la gestión directa del servicio de Ayuda a Domicilio o la creación de la oficina contra la pobreza energética, entre otras muchas, ninguna de ellas justificaría que renunciemos a uno solo de nuestros principios”, apostilla Pedro García.
“SE ACENTÚAN LAS SOSPECHAS ENTRE EL GOBIERNO JEREZANO, EL PSOE Y AQUALIA”
En este sentido, IU lamenta que el Gobierno jerezano liderado por Mamen Sánchez haya decidido “ningunear” la soberanía del pleno, aprobando unilateralmente “lo que ya denegó éste debido a la dudosa legalidad de la encomienda de gestión del servicio de abastecimiento de agua que solicitaba el alcalde de Torrecera, Francisco Arcila”.
A pesar de que la mayoría de los concejales votaron en contra de aceptar la solicitud de Arcila (del PSOE), Sánchez y los concejales socialistas han decidido entregar directamente la gestión del servicio del agua de Torrecera a Aqualia (que ya explota el servicio en Jerez, desde que el PP le vendiera años atrás la empresa municipal) mediante acuerdo adoptado en el seno de la Junta de Gobierno Local.
La formación izquierdista reitera que si el pleno decidió votar mayoritariamente en contra de dicha encomienda de gestión del servicio, “no lo hizo por capricho, sino porque existían serias dudas de la legalidad de la aceptación de la misma”. Y no por el hecho de la encomienda en sí misma, ya que es una figura completamente legal, “sino porque en el caso de Torrecera, al haber asumido la propia ELA la gestión directa del agua desde febrero de 2018, aceptar la encomienda por parte del Ayuntamiento de Jerez hubiera supuesto entregar la concesión del servicio directamente a Aqualia, a dedo, sin que existiese ningún tipo de licitación pública, lo que sería una clara vulneración de la legislación en materia de contratación pública”. Algo que, se añade, “obvian los juristas del Ayuntamiento en la justificación que aparece en el expediente del acuerdo adoptado por la Junta de Gobierno local”.
“Este salto al vacío del Gobierno de Mamen no hace sino acentuar más las sospechas que desde 2015 venimos denunciando públicamente, y es la connivencia existente entre el Gobierno jerezano, el PSOE de Torrecera y la multinacional Aqualia. Lo que se ha venido denominando como la trama del agua en Jerez”, anotan desde IU, añadiendo que “no solo se trata de que el PSOE traicione los años de lucha que han mantenido los vecinos de Torrecera por mantener su agua pública, sino que, además, puede que estén también vulnerando la Ley de Contratación del Sector Público, y por ende, el derecho de otras empresas a poder optar a la concesión del servicio”.
Para Pedro García son “muchos los ejemplos” que “hacen pensar en la posible existencia de dicha trama”. Desde las trabas que el Ayuntamiento matriz puso al de Torrecera para poder remunicipalizar el servicio del agua, “retrasando más de dos años lo que debió hacerse en dos meses, y que así fue corroborado por sentencia judicial”; la contratación sin procedimiento por parte de la empresa municipal Comujesa de la hija de una vecina de Torrecera afín al PSOE que puso una denuncia al exalcalde de la ELA, Manuel Bertolet (de IU), “denuncia que fue archivada por el juzgado correspondiente”; la negativa por parte de la concejalía de Medio Ambiente a facilitar documentación a la empresa que, a instancias de IU, contrató el propio Ayuntamiento para auditar a la concesionaria; “o el mirar para otro lado de Mamen Sánchez ante la documentación presentada por dicha empresa y que parece que demuestra que Aqualia está cobrando de más a los jerezanos”.
LA COORDINADORA DEL AGUA HABLA DE “ACTO DELICTIVO”
Por su lado, la Coordinadora del Agua de Jerez (en la que participa también IU) denuncia que el actual equipo de Gobierno “está sobrepasando todas las líneas morales y legales, con tal de beneficiar descaradamente a la multinacional que se hizo con el servicio de aguas en 2013; actúan con nocturnidad y alevosía, despreciando las vías democráticas legales, que rigen las actuaciones dentro del marco de las administraciones públicas y grava impunemente los intereses de los ciudadanos”.
“A punto de cumplir diez años de la gestación de la venta de este servicio, y ocho de su alumbramiento, hemos sido testigo de las malas prácticas de esta trama. A sabiendas de que para que estas personas, políticos y técnicos, actúen de esta manera tan descaradamente en favor de una empresa privada, aun sabiendo del perjuicio de sus vecinos; tiene que haber un móvil o motivación perniciosa y delictiva. Desgraciadamente, ayudados y escudados tras el muro que supone poseer todos los recursos del mundo para inhabilitarnos e imposibilitar nuestro trabajo de fiscalización, no podemos demostrar con pruebas fehacientes para un juzgado dicha actuación contra los intereses de la ciudad; pero somos sabedores de que detrás de todo este montante, hay más que dudas o sospechas razonables de actuaciones presuntamente delictivas”, aseveran desde la Coordinadora.
Y se señala que “entre los más sospechosos de esta actuación ruin”, cabe citar “a todos los concejales que levantaron las manos para que FCC se colara en nuestros grifos; al equipo de Gobierno actual, que tras sus dos mandatos, habiéndose comprometido en luchar por la recuperación del servicio, ha cedido y se comporta justamente de modo contrario, defendiendo los intereses de la multinacional; a la alcaldesa de Guadalcacín, que juró y perjuró su compromiso por el agua pública y ahora se inclina a los engaños de la trama y pretende todo lo contrario; y al alcalde de Estella, que trabaja su doble moral, vendiendo su voluntad por lo mejor para su pueblo, cuando lo que hace es desheredar a su gente y meterles al lobo en su corral”.
Pero esta asociación sobresale “el descaro, la desfachatez y la bajeza” del concejal de Medio Ambiente, José Antonio Díaz, por “su permanente defensa de los intereses de Aqualia”. “Actitud solo igualada si cabe, por el actual alcalde de Torrecera, Francisco Arcilla”.
La Coordinadora del Agua de Jerez (que además de IU la conforman Ganemos Jerez, Anticapitalistas, Podemos, UGT, CCOO, CGT, Ecologistas en Acción, Facua y otros grupos sociales) avanza que pondrá en manos de la justicia estos acontecimientos “y no descansará hasta que esta trama presuntamente delictiva caiga y deje de hacer daño a nuestra sociedad”.