La Sala de Exposiciones Unicaja de Jerez, en la calle Larga 50, acoge hasta final de año una muestra monográfica del artista Ilan Itach (Jerusalén, 1975), compuesta por 12 obras en las que ofrece, a través de una completa serie temática, “problemáticas y formas de enfrentarse al ‘éxodo’ desde múltiples puntos de vista” tamizados por “su óptica personal cargada de expresividad y lirismo”.
Las obras pictóricas de Itach recopiladas en esta exposición de la Fundación Unicaja reflejan las diferentes etapas del ‘éxodo’, los motivos, la partida, las vicisitudes del camino, la ruptura resultante, el encuentro, la confrontación entre la realidad y lo deseado. Así, a través de obras como ‘Nacimiento en el barco Éxodo – Albert Camus’ se escenifican de forma explícita los acontecimientos e imprevistos del viajero en tierras extrañas y la exigencia histórica de una anhelada y, en apariencia, lejana justicia; mientras que otras creaciones como ‘Refugiados en fuga’, recrean la aparición de una pareja, a modo de ensoñación o fantasía, en ese transitar de los viajeros en su huida.
‘Adán y Eva – El primer éxodo – Pintor en riesgo’ y ‘La familia del pintor emigra de España, Béjar -Salamanca- a Marruecos, 1492’ son obras que continúan esta línea y que también forman parte de esta excepcional muestra abierta hasta el próximo 31 de diciembre, en horario de 17 a 20 horas.
Al reciente acto de inauguración de la muestra acudía el propio artista Ilan Itach, la responsable de la unidad de Artes Plásticas y Espacios Museísticos de la Fundación Unicaja, Emilia Garrido, y el director de área de Jerez de Unicaja Banco, Santiago Cárdenas, según se ha trasladado a DIARIO Bahía de Cádiz.
Itach es un artista autodidacta, que nació en Jerusalén en 1975, ciudad en la que reside y trabaja actualmente. Su primer estudio estaba enclavado en la cima de la colina que domina la pintoresca Ciudad Vieja de Jerusalén, cuyas antiguas murallas aparecen en muchas de sus primeras recreaciones pictóricas. Es discípulo del gran artista israelí, Ivan Schwebel, de quien aprendió una gran variedad de técnicas artísticas. Ha dedicado considerables períodos de su carrera profesional a pintar en el extranjero, particularmente en Toledo y Sevilla, donde se sumergió en la rica y colorida cultura española de la música y la danza.