El Ayuntamiento jerezano ha presentado las claves de su plan integral de regeneración urbana del centro histórico ‘Más vida al centro’, un documento integrador que recoge “de forma ordenada y concisa” las medidas ya ejecutadas, en desarrollo actualmente o en previsión para hacer de esta zona de la ciudad “un lugar más atractivo para vivir y visitar”, y que suman una inversión de 18 millones de euros.
Con este plan “tratamos de diseñar nuevos objetivos estratégicos que tiendan, no sólo a consolidar el camino recorrido desde el pasado mandato, sino que incorporen oportunidades nuevas de revitalización del centro histórico desde un punto de vista multidisciplinar”, ha subrayado la alcaldesa, Mamen Sánchez.
La propuesta pasa, por tanto, por generar “efectos catalizadores, tanto económicos como sociales, que consoliden el turismo, el sector cultural, el patrimonial y turístico y generen un espacio agradable y atractivo para vivir, trabajar y disfrutar”, ha resumido.
El documento, concebido como un “plan de planes”, contempla “una hoja de ruta clara y definida” dividida en siete apartados temáticos, cada uno de los cuales, incluye una serie de medidas concretas destinadas a: impulsar la recuperación del uso y la capacidad residencial del ámbito, por un lado, y por otro, la conservación y la recuperación del patrimonio histórico; medidas para la mejora medioambiental; y de la accesibilidad, la movilidad y el transporte público; también para el fomento de la igualdad e integración social en el área; y para impulsar el desarrollo económico y empleo.
“Nace de la unión del Plan de Patrimonio que presentamos el pasado mandato, de la recomendaciones del Plan de Suelo y Vivienda, del Plan de Turismo y del Estudio sobre Comercio. No se plantea por tanto como un plan urbanístico al uso, ya que el municipio cuenta con un plan en vigor, con contenido de protección, por lo que no es necesario un plan especial para la ordenación del conjunto histórico artístico”, ha insistido la alcaldesa; resaltando que es un plan “adaptado a los tiempos de estrechez económica, con propuestas sencillas, realizables, costo asumible o alcanzable, pero huyendo de megalomanías y proyectos estrellas”.
Según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, el borrador (elaborado por personal del Departamento de Planeamiento de Urbanismo) será sometido ahora a la participación: será publicado en la web municipal desde el 1 al 20 de diciembre para su consulta.
OBJETIVOS DEL PLAN
En líneas generales, con este plan se pretende facilitar, “a través de una serie de medidas novedosas la inversión privada para impulsar la construcción de viviendas en el centro histórico”. En relación a ello, desde el Gobierno local se repasa que en lo que va de 2020 se han concedido 19 licencias de obra mayor de nueva planta y rehabilitación para un total de 102 viviendas; y en 2019 fueron 16 licencias. Contrasta por ejemplo con 2014, cuando se otorgaron sólo cinco.
Igualmente, las medidas incluidas en este borrador van destinadas a aumentar la dotación de espacios públicos, como pueden ser jardines, parques, pistas polideportivas, así como seguir potenciando los espacios culturales y turísticos.
También se pretende dinamizar la actividad turística estimulando la creación de nuevas plazas hoteleras. En este sentido, este año se ha dado licencia ya para 10 hoteles y para un total de 124 apartamentos turísticos, mientras que el año pasado fueron tres los hoteles autorizados y se contabilizaron 31 apartamentos turísticos.
Otro objetivo importante sería la captación de nuevos comercios localizados en el centro de la ciudad, así como la creación de nuevas bolsas de aparcamiento.
“En definitiva, se trata de que en el centro puedan confluir durante el máximo de horas al día el máximo número de personas en la actividad comercial, la cultural, la gastronómica, la turística, la laboral y la vecinal”, ha apostillado Sánchez.
ANTECEDENTES HISTÓRICOS
Durante su intervención, el director del Servicio de Gestión del Proceso Urbanístico, Benito García, ha explicado el proceso de elaboración del documento, que incluye un primer apartado donde se resumen los antecedentes históricos y de planeamiento urbanístico de la ciudad, así como los distintos instrumentos utilizados desde la democracia por las distintas corporaciones municipales para la recuperación del centro histórico.
Así, ha recordado que decadencia del centro jerezano “comenzaba a ser evidente desde mitad del siglo XX”, aportando algunos datos demográficos, como que en 1940 la ciudad histórica contaba con 80.000 habitantes, concentrados en un espacio de aproximadamente 200 hectáreas. En el año 2013 en ese mismo espacio se contabilizaban 27.500 habitantes, y actualmente, la población asciende a 19.770.
Igualmente, ha apuntado que en el periodo comprendido entre 1995 y 2009, fecha de vigencia del anterior Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), se ejecutaron en el centro histórico 1.500 viviendas, siendo el total de la ciudad de 32.750, “lo que supone un 4,5% del total”.
A partir de datos como los aportados, Benito García ha aseverado que “hemos concluido que a pesar de los esfuerzos realizados son necesarias más inversiones y nuevas líneas de trabajo, y de ahí este nuevo documento”.
ALGUNAS MEDIDAS
Por su parte, el edil de Urbanismo, José Antonio Díaz. ha detallado algunas de las medidas contenidas en el documento, que se desarrolla en los tres campos de acción que conforman la realidad urbana: lo construido, público o privado; el medio urbano público (lo no construido); y la trama social que ocupa y da sentido a los otros dos aspectos.
De los 18 millones de inversión pública que contempla este plan, 13 millones ya se han ejecutado o están actualmente en desarrollo y otros 5 corresponden a proyectos que están en redacción, como pueden ser los del eje de las calles Larga-Honda, la reurbanización de las calles Barranco y Doctor Lillo; o de las plazas del Carmen y Luis Braille y calle Limones, o la segunda fase de reurbanización del entorno de San Juan de los Caballeros, entre otros.
Entre las medidas para la recuperación del uso y la capacidad residencial, Díaz ha citado algunas que actualmente están en marcha, como es el caso de la aplicación firme del Registro Municipal de Solares y posterior venta forzosa; el incremento del control sobre los vacíos urbanos existentes, o la adquisición de edificios o solares, mediante acuerdos de compra-venta o inclusión en el Registro de Solares, entre otras.
En cuanto a la conservación y la recuperación del patrimonio histórico, figuran, entre otras medidas, la elaboración de un Plan Director de Patrimonio o la revisión integral del catálogo de fincas protegidas del PGOU, cuyos trabajos fueron presentados también recientemente.
En materia medioambiental, se propone identificar los elementos con especial incidencia paisajística, lo cual permitirá intervenir sobre ellos para garantizar su protección, así como un plan especial de mejora paisajística y contra la contaminación visual, para impulsar el atractivo del conjunto histórico y hacerlo más habitable.
También se incluyen medidas para mejorar la accesibilidad la movilidad, y para ello, desde 2017 está en marcha el plan de movilidad del centro histórico que persigue limitar la presencia del vehículo y dar prioridad al peatón. En el apartado de medidas sociales, figuran proyectos destinados a la eliminación de barreras arquitectónicas, entre otras iniciativas. Y en materia de desarrollo económico y empleo, se apunta a “la importancia de la colaboración pública y privada para dinamizar la rehabilitación de inmuebles y generar actividad económica y empleo”, así como proyectos clave como el Museo del Flamenco de Andalucía proyectado con fondos europeos.