La concejala de IU en el Ayuntamiento de Jerez, Ana Fernández de Cosa, por “coherencia y salud”, según un escrito interno, ha decidido renunciar a su acta y a todos los cargos orgánicos en la coalición de izquierdas, decepcionada, “al comprobar que el funcionamiento interno de la organización local ha dejado de ser lo democrático, justo e igualitario que debería”.
Izquierda Unida, en la oposición aunque apoyó la investidura del PSOE en el Gobierno municipal junto a Ganemos, tiene en el presente mandato dos representantes en el Consistorio jerezano, ella y el que fuera alcaldable y portavoz, Raúl Ruiz-Berdejo.
La coordinadora local de IU (máximo órgano de dirección política de la formación en el ámbito local) ha respondido ya a la propia Ana Fernández con un comunicado público en el que “como no puede ser de otra manera”, subraya que “respeta la decisión adoptada por nuestra compañera”, si bien no está de acuerdo ni comparte los motivos que expone en su escrito como causantes de la toma de dicha decisión.
En este escrito de réplica, remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, se subraya que “Izquierda Unida es un partido radicalmente democrático y asambleario en el que las decisiones se adoptan por acuerdos de la mayoría, y por tanto entendemos que los motivos alegados por Fernández son interpretaciones personales que no compartimos el resto de integrantes de esta coordinadora. En este sentido, y como parte de ese ADN asambleario, democrático y colaborativo que define a nuestra formación, hemos de decir que el proyecto político de IU es un proyecto colectivo y no de voluntades individuales”.
Con todo, se muestra públicamente el agradecimiento a la persona de Ana Fernández de Cosa “por los servicios prestados y por su labor como representante de Izquierda Unida en el pleno del Ayuntamiento de Jerez”, así como se le desea “todo lo mejor en sus nuevos retos personales y profesionales”.
“Nuestra organización –se agrega- dispone de muchas personas cualificadas y formadas para desempeñar con total garantía el puesto de concejal y seguir dando continuidad a nuestro proyecto político, por lo que, en función de la disponibilidad actual, procederemos a cubrir la vacante con la persona que corresponda de acuerdo a la candidatura presentada en las pasadas elecciones municipales de 2015”.
Esta representante izquierdista, que ahora deja su acta de concejal, fue noticia al principio del presente mandato, después de que familiares de José María Pemán le presentaran una querella por un presunto delito de injurias y calumnias. Fernández tuvo que declarar en enero de 2016 por su intervención en el pleno de meses atrás en relación al pasado franquista del poeta gaditano, al que llamó “fascista, misógino y asesino”. Un pleno en el que se aprobó retirar, con polémica, el busto de Pemán colocado por el PP en el Teatro Villamarta, en cumplimiento de la conocida como Ley de Memoria Histórica. El Juzgado de Instrucción número 2 de Jerez sobreseyó la causa por una “carencia de legitimación activa de los querellantes”.