El aeropuerto de Jerez ha realizado en la mañana del martes día 14 un simulacro de accidente aéreo, con el objeto de evaluar los procedimientos establecidos en su Plan de Autoprotección, así como de poner a prueba la capacidad de respuesta de los diferentes colectivos que participarían en la resolución de una emergencia de este tipo. El ejercicio, con la participación de 150 personas, ha girado en torno a un avión que impacta contra el suelo al aterrizar y se incendia.
El aeropuerto de Jerez ha realizado en la mañana del martes día 14 un simulacro de accidente aéreo, con el objeto de evaluar los procedimientos establecidos en su Plan de Autoprotección, así como de poner a prueba la capacidad de respuesta de los diferentes colectivos que participarían en la resolución de una emergencia de este tipo.
Todos los aeropuertos que componen la red de Aena disponen de un Plan de Autoprotección, destinado a minimizar las consecuencias que tendrían un accidente aéreo o cualquier incidente que se produjera en edificios e instalaciones aeroportuarias, garantizando el cuidado de las vidas humanas y la continuidad de la operatividad.
Dicho plan se mantiene actualizado mediante la celebración, cada dos años, de simulacros generales de emergencia aérea, pero también de simulacros periódicos parciales. El ejercicio de este martes se enmarcaría en el primero de los dos grupos, aunque todos persiguen el mismo fin: analizar los tiempos de reacción de los colectivos (internos y externos) implicados y optimizar la coordinación entre ellos.
El ejercicio se ha desarrollado coincidiendo con un momento de baja actividad, por lo que no ha afectado a la operativa y el funcionamiento habituales del aeródromo.
Con este simulacro, el aeropuerto gaditano cumple con la normativa de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) en materia de planificación de emergencias en aeropuertos, pero también atiende a la legislación que en ese ámbito aplican la administración central, autonómica y local. Esta práctica obedece, además, al compromiso de Aena con un servicio seguro y de calidad.
UN AVIÓN IMPACTA CONTRA EL SUELO Y SE INCENDIA…
El guión del simulacro, relatan desde Aena en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, ha girado en torno a un avión que impacta contra el suelo al aterrizar y se incendia. Entre el pasaje, compuesto por 44 personas (cuatro de ellas, miembros de la tripulación), se registran cuatro heridos muy graves, cinco graves, 12 leves y 23 ilesos.
Nada más presenciar el suceso, la torre de control alerta al Servicio de Extinción de Incendios (SEI) del aeropuerto, y el Centro de Coordinación Aeroportuaria (Ceops) activa el Plan de Autoprotección, declarando la alarma general y llamando al 112 para solicitar su colaboración.
En el momento en que reciben el aviso, los bomberos se dirigen al lugar del accidente, con el objeto de controlar el incendio en el área crítica, acceder a la cabina del avión, extinguir las llamas en su interior, ventilarla y rescatar a aquellos ocupantes que no pudieran salir por su propio pie.
Paralelamente, se ha constituido un área de cuidados médicos y clasificación, a la que han sido trasladados en camilla los heridos. Una vez allí, los servicios sanitarios han determinado la gravedad de cada uno de ellos, a fin de establecer prioridades en su tratamiento, estabilizarlos y programar su evacuación a hospitales cercanos.
COLECTIVOS PARTICIPANTES
En la realización de este simulacro han participado 150 personas de diferentes colectivos, tanto de Aena como de organismos externos. En cuanto a los medios internos, han participado los bomberos del SEI, la torre de control, Ceops, señaleros y otros empleados de Aena, junto con vigilantes, servicio de atención a personas con movilidad reducida, compañías aéreas y de handling y Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado presentes en el aeropuerto.
Respecto a los medios externos, han intervenido Guardia Civil, Policía Nacional, Policía Local, Protección Civil (112), Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPES-061), Cruz Roja y el Consorcio de Bomberos de la provincia de Cádiz.
Destacada ha sido también la colaboración del centro Eurocollege (especializado en la formación de tripulantes de cabina) y la escuela de actores y presentadores María Espejo, que han contribuido con 35 figurantes para el accidente simulado.