Jerez ha tenido que lamentar en las últimas horas nuevas agresiones a profesionales de la sanidad pública, contra una enfermera del Hospital, y contra un enfermero del centro de salud La Serrana. La Junta de Andalucía ya ha condenado públicamente ambos episodios, y en el segundo caso, la Policía Nacional ha intervenido deteniendo al paciente violento.
Dicha detención se llevaba a cabo durante la mañana del miércoles 17. Sobre las nueve de la mañana el 091 recibía varias llamadas de usuarios que alertaban de la presencia de un varón muy agresivo en el interior de una consulta de enfermería de este ambulatorio en el distrito oeste de la ciudad.
Así, se presentaron en el centro de salud cuatro agentes y encontraron al presunto agresor retenido por el profesional de seguridad privada que prestaba servicio en ese momento en La Serrana. Los policías tomaron testimonio a los testigos y al propio sanitario afectado, quien presentaba lesiones por golpes en su cabeza.
Según el relato policial en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, el hombre había accedido minutos antes al centro de salud y “de forma agresiva” había exigido que le fueran prescritos varios fármacos “sin seguir los cauces médicos establecidos”. Cuando los profesionales de enfermería le explicaron que debía pasar por la valoración médica previa y por los canales establecidos, el varón respondía “de forma violenta, insultando y amenazando de gravedad a los presentes” y llegando a soltar varios puñetazos en la cabeza a uno de los enfermeros.
En base a los hechos, la Policía detenía a esta persona de 48 años de edad y con antecedentes previos por la comisión de otros delitos, como presunto autor de un delito de atentado contra funcionario público.
Pero además, unas horas antes, el martes 16 por la tarde, la acompañante de un paciente “atacó” a una técnica en cuidados auxiliares de Enfermería (TCAE) en el Servicio de Medicina Interna del Hospital Universitario de Jerez, produciéndole arañazos en la muñeca y amenazándola de muerte. La víctima fue asistida por una de las ‘profesionales guía’ con las que cuenta el centro.
“FALTA DE CIVISMO Y EDUCACIÓN”
La delegada territorial de Salud de la Junta de Andalucía, Eva Pajares, ha calificado ambos hechos de “lamentables”, atribuyéndolos a una “falta de civismo y educación”. Así, ha hecho un llamamiento a “respetar y cuidar de los profesionales, que tanto hacen por nosotros”. En paralelo, el Área de Gestión Sanitaria de Jerez, Costa Noroeste y Sierra ha activado el Plan de Prevención y Atención a las Agresiones.
Por enésima vez, esta política del PP ha recordado que la agresión física o intimidación grave contra personal sanitario en el ejercicio de su función pública asistencial viene siendo considerada como delito de atentado por los tribunales de justicia, y así se han dictado sentencias en estos casos, castigándose con penas de uno a tres años de prisión.
En paralelo, el Sindicato de Técnico de Enfermería (SAE) ha convocado una concentración este viernes en la puerta principal del Hospital en señal de protesta y solidaridad con la compañera que ha sufrido la agresión durante el desempeño de sus funciones a un paciente del servicio de medicina interna. A este acto se unirán la gerencia, la dirección y otras organizaciones sindicales.
“La violencia es una lacra social y en los hospitales y centros de salud la situación es insostenible. Estar expuesto a una agresión, física o verbal, no forma parte de ninguno de los riesgos que ningún profesional de la sanidad debe considerar asumible. Infecciones, cortes, estrés… podríamos llegar pensar que estamos expuestos a ello. Pero nunca a una bofetada, empujón o insulto”, subraya Cristian Braza, vocal de organización y comunicación de SAE en Andalucía.