Minutos después de que el PP en el Ayuntamiento de Jerez mostrara públicamente su gran indignación por el anunciado cierre del Museo Taurino en la calle Pozo del Olivar, denunciando que “el PSOE de Mamen Sánchez está liquidando el legado y el patrimonio de la ciudad y los jerezanos”, la concejala de Economía y Hacienda, Laura Álvarez, no ha dudado en lamentar “la desmemoria y la falta de vergüenza” del principal partido de la oposición “por mentir de forma tan insultante”.
En este sentido, la edil socialista defiende la actuación municipal “en defensa del interés general para recuperar un inmueble que hasta ahora acogía un negocio privado, que reportaba beneficios económicos a una empresa privada, desarrollando entre otras una actividad de restauración gastronómica además de cobrar entradas por exhibir un conjunto de piezas vinculadas al arte de la tauromaquia”.
“El Ayuntamiento tiene que cumplir la ley, no hay motivo alguno que permita anteponer ningún tipo de interés al cumplimiento de las leyes y a la defensa del interés general”, incide Álvarez, que concreta que el local municipal donde se ubica este museo privado tenía un contrato de arrendamiento, que tras una licitación pública se adjudicó a la empresa Cafeterías Alfonso en diciembre de 1997, iniciándose de facto el 1 de enero de 1998, por 15 años. “Por tanto el contrato finalizaba el 1 de enero de 2013. Se trata de un contrato de arrendamiento que no posibilitaba ningún tipo de prórroga”, subraya.
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, esta concejala añade que el Gobierno local con el PP al frente, en junio de 2014, “fue quien hizo el primer requerimiento para el desalojo del local a los gestores del Museo Taurino, un museo de naturaleza privada, sin que esta empresa hiciese caso”.
A partir de ahí, el Ayuntamiento le ha hecho sucesivos requerimientos para que abandonasen las instalaciones, “porque está obligado legalmente a defender sus bienes patrimoniales, que son de la ciudadanía de Jerez y que todo el mundo que esté interesado pueda optar, por lo que nunca puede quedarse con los brazos cruzados ante un aprovechamiento de una instalación municipal para una explotación económica sin contrato que lo ampare”, detalla Laura Álvarez.
En paralelo a esos sucesivos requerimientos, se sacó a licitación la venta del local, “que los propios representantes de Cafetería Alfonso manifestaron estaban interesados en comprar, aunque una vez sacada la licitación no se presentaron”. Tampoco se presentó ninguna otra empresa, quedando desierto “por cuanto se antoja difícil acudir a una licitación estando el local ocupado por alguien”.
Así, subraya la concejala de Economía, “ante la negativa de Cafeterías Alfonso a abandonar el local, al Ayuntamiento no le quedó otra que acudir al juzgado para defender el interés general y recuperar este inmueble”. “Confiamos en que se haga cumplir la ley y que el juzgado dictamine a nuestro favor, dado el perjuicio que esta situación estaba generando a las arcas municipales y entendemos que lo conveniente, en este caso, es que el promotor busque un emplazamiento alternativo para seguir desarrollando su actividad cumpliendo con sus obligaciones”, sentencia.
EL PUERTO ‘QUIERE’ EL MUSEO
“Cerrar un museo es absolutamente incompatible con querer ser capital de la cultura; es una mezcla de incapacidad y sectarismo del PSOE local hacia todo lo que tenga que ver con la tauromaquia en una de las ciudades más taurinas de España”, han llegado a manifestar desde el PP jerezano.
Y entre tanto, el Ayuntamiento de El Puerto de Santa María se ha mostrado interesado en que se traslade este museo ya cerrado a su plaza de toros. El concejal responsable, Álvaro González, ha propuesto al empresario Alfonso Rodríguez Álvarez que el coso taurino portuense “acogería con máximo orgullo y con todos los honores la colección de su propiedad”.
“Nuestra plaza, con 140 años de historia, pondría en valor en un lugar privilegiado su colección taurina, una de las mayores y más ricas patrimonialmente de España, para la que tiene espacio de sobra en el edificio monumental”, subraya este edil conservador.