El servicio de autobuses urbanos de Jerez se ha visto obligado a aparcar sus diferentes vehículos de gas natural comprimido, adquiridos en los últimos años para renovar y mejorar la flota, por una avería en la estación de GNL / GNC de El Mojo Gallardo, ubicada en la A-381.
El pasado fin de semana, dicha estación de servicio de Repsol, única de la provincia de Cádiz en la que los autobuses urbanos jerezanos (servicio gestionado desde la empresa municipal Comejusa) pueden repostar gas, comunicó una incidencia derivada de un fallo técnico en los depósitos por una fuga que debía reparar.
Esta planta dice estar está haciendo “todo lo posible” para solventar el problema “a la mayor brevedad posible”; la pieza necesaria para resolverlo, proveniente de Italia, “llegará muy pronto” y con ello se espera que quede operativo el surtidor “este miércoles o, como mucho, jueves”.
Desde el Ayuntamiento se reconoce en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz que este problema ajeno ha provocado que sus autobuses de gas no hayan podido repostar desde el fin de semana “por lo que algunos han empezado a no poder circular por esta incidencia”.
De este modo, el personal del servicio de autobuses urbanos está gestionando la incidencia “de la mejor manera posible”, buscando que afecte lo menos posible a la normalidad del servicio, “reduciendo en dos coches las líneas 8 y 9 y con un vehículo menos por la mañana en las líneas 3, 13 y 10, estando todos los servicios de tarde operativos”. Ello está provocando que existan algunos retrasos con respecto a los horarios habituales “siempre encontrándose el servicio de autobús urbano en activo”.
Comujesa lamenta los problemas que hayan podido sufrir algunos usuarios del servicio esperando que se solvente lo antes posible y afecte lo más mínimo a los ciudadanos.
EL PP ECHA LAS CULPAS AL PSOE
Y entre tanto, el nuevo equipo de Gobierno del PP avanza que está estudiando vías alternativas para que los jerezanos “no tengan que sufrir las consecuencias de la gestión del anterior gobierno del PSOE que adquirió unos autobuses que no tienen garantizado el repostaje a la más mínima avería del único surtidor de la provincia”.
Olvida la derecha que su gestión de este servicio (entonces privatizado y con problemas con la concesionaria) en anteriores mandatos, también con María José García-Pelayo como alcaldesa, fue comprar autobuses viejos de segunda mano al Ayuntamiento de Madrid que en los años posteriores han sufrido innumerables averías.