La Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía (AVRA) ha sacado a concurso, por unos 626.000 euros (todo el dinero se sacará de fondos europeos) la terminación de la obra de rehabilitación de una casa palacio en el centro histórico de Jerez, actuación que permitirán disponer de 22 viviendas protegidas totalmente remodeladas que se adjudicarán en régimen de alquiler. La finca se ubica en la calle Ramón de Cala número 17, esquina con calle Cazón, 20.
Esta actuación fue incluida en el convenio firmado para el Área de Regeneración y Renovación Urbana (ARRU) del entorno de San Mateo y San Miguel. Tras su inicio en mayo de 2017, los trabajos quedaron parados por abandono de la empresa adjudicataria en junio de 2019, quedando inconclusas las obras, lo que motivó la resolución del contrato.
Durante este tiempo, y mientras se han realizado los trámites y procedimientos para la resolución del contrato y la preparación de la nueva licitación, se han producido además desperfectos en el inmueble, deterioro de instalaciones, carpintería, cerrajería y equipamiento. También se han originado daños a consecuencia de la entrada de agua de lluvia y por la falta de acometida de saneamiento. Todo ello requiere una puesta a punto del edificio y la finalización de los trabajos que quedaron pendientes por la renuncia de la anterior empresa.
Para ello, se detalla en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, se hace necesario ejecutar partidas que no se terminaron en el anterior contrato, afrontar trabajos realizados de forma deficiente o incompleta, reponer los elementos sustraídos, reparar aquellos deteriorados e incluir acometer actuaciones no incluidas en el contrato anterior, que son imprescindibles para una terminación adecuada de la obra.
De este modo, este proyecto de finalización de la rehabilitación de la casa palacio de Ramón de Cala contempla, entre otros trabajos, el acabado y protección de forjados de madera, el pintado de determinados espacios interiores y elementos exteriores, acometidas de abastecimiento y saneamiento, la restauración de los elementos de madera (puerta principal de acceso por la calle Ramón de Cala y barandilla de la escalera principal), el revestimiento de la medianera norte y la dotación de instalaciones de telecomunicaciones.
También hay que reparar o reponer elementos deteriorados por el paso del tiempo en las instalaciones eléctrica, de energía solar y de fontanería, así como del ascensor, y actuar sobre la carpintería exterior de aluminio y en la cerrajería (rejas exteriores, barandillas…), equipar el centro de transformación e instalar la carpintería interior (puertas de paso y de entrada de las viviendas). Asimismo, hay que reparar daños en revestimientos y tabiquería.
Por otra parte, en el período transcurrido desde que la contrata abandonó la obra hasta la actual licitación, se han generado humedades en algunas paredes y techos a consecuencia de la entrada de agua de lluvia por la parte superior de las chimeneas de ventilación, y filtraciones como consecuencia de la falta de acometida de saneamiento por la calle Cazón.
VESTIGIO DE LA ARQUITECTURA CIVIL DEL SIGLO XVII
Esta finca data del año 1646 y constituye el único vestigio de la arquitectura civil del siglo XVII en el casco histórico jerezano. Ocupa una parcela de 1.543 metros cuadrados y conserva elementos arquitectónicos de gran interés, como los dos patios con pórticos a base de arcos sobre columnas, la portada interior, la fachada con escudo nobiliario o las escaleras del inmueble de la calle Ramón de Cala.
La intervención incluye el edificio anexo, en la calle Cazón, que completa el conjunto y tiene también algunos elementos de valor arquitectónico, destacando los arcos de medio punto que se han conservado en la intervención de rehabilitación.
En el proyecto se han diseñado 22 viviendas que se adjudicarán en régimen de alquiler. De ellas, cinco tienen un dormitorio, 14 son de dos y las tres restantes tienen tres dormitorios. La mayor de las viviendas cuenta con una superficie de 82 y 41 metros cuadrados, la menor.
Siete familias que estaban alojadas en la finca antes de la rehabilitación volverán a la misma tras haber permanecido en situación de realojo desde que se vació el inmueble para prepararlo para la actuación. Las adjudicatarias de las otras 15 viviendas serán propuestas por el Registro Municipal de Demandantes, en función de los perfiles y de las características de las viviendas resultantes de la intervención.