Más de diez años ejerciendo la abogacía, y con experiencia política local tanto en la oposición como en el gobierno con Ernesto Marín de alcalde (e incluso durante escasos meses como diputado en el Congreso). Son las credenciales de quien también es presidente del PP chiclanero y dice tener un proyecto “para mejorar y transformar Chiclana”. Repite y repite que el PSOE y Román son uno de los males de la localidad: “no merece seguir en manos de quien la tiene sometida a base de mentiras y engaños”. Deportista, lector y escritor, cinéfilo, y mucho flamenco en su banda sonora: lleva “con orgullo” el ser gitano.
Conocemos un poco más al alcaldable popular a partir de seis preguntas, seis cuestiones, las mismas que hemos trasladado en esta campaña del 26-M a todos los aspirantes a alcalde/alcaldesa en la Bahía de Cádiz.
EN TITULARES
“en Chiclana sufrimos las consecuencias de prometer megaproyectos para ganar elecciones y luego mirar hacia otro lado”
“me presento para liderar el cambio que Chiclana merece y necesita, porque creo en Chiclana. Es una cuestión que va más allá de la política, me presento por mi ciudad”
“aunque pueda sonar a tópico, salimos a ganar con mayoría absoluta. Puede parecer una idea descabellada, sobre todo con los resultados de las últimas elecciones”
— ¿Cómo está, y cómo ve, hoy día Chiclana?
Chiclana vive en el siglo pasado. No puede ser que aproximadamente la mitad de la población, lo que supone unas 15.000 viviendas más o menos estén sin regularizar. Hablamos de que hay unas 40.000 personas sin servicios básicos como agua potable y saneamientos. Esto es consecuencia de errores del pasado y de la política sin proyecto, obsoleta y del tira pa’lante continuo que practican José María Román y el PSOE.
En Chiclana sufrimos las consecuencias de prometer megaproyectos para ganar elecciones y luego mirar hacia otro lado. Mentiras y mentiras que se han repetido una y otra vez, para luego culpar al resto de la dejadez y volver a prometer lo mismo. Román promete desde hace años la presa contra avenidas y otros proyectos que nunca llegan, porque todo lo que toca se convierte en un problema para Chiclana. Ahí está el centro de salud de Los Gallos, del que colocó la primera piedra y hemos tenido que esperar más de una década para que abriera por su nefasta gestión.
Tenemos un extrarradio sin regularizar porque el PSOE simplemente ha dejado que corrieran los años para llegar a otras elecciones municipales como las de ahora y volver a prometer la regularización. En 2012 dijo que con el Decreto 2/2012 de la Junta de Andalucía, también gobernada por el PSOE, la mayor parte de las viviendas fuera de planeamiento tendrían servicios básicos. A día de hoy ninguna vivienda lo ha conseguido por esa vía.
Además, en estos cuatro años hemos sufrido la subida de todos los impuestos posibles: el IBI, el agua, la basura… ¿Y qué se ha hecho con esa mayor recaudación? Pues nada productivo para la ciudad. Lo primero que hizo Román al llegar a la Alcaldía fue gastarse 10.000 euros en iluminar y comprar sillas de lujo para su despacho. Luego contrató a amigos en empresas municipales y para dar cursos a precio de oro.
Es una pena decir esto, pero mientras la gente clama por un trabajo, desde el gobierno local, en lugar de poner el ayuntamiento a funcionar para favorecer el empleo, lo que se ha hecho es subir la partida de Fiestas en 100.000 euros, y la de Fomento, la que ha de trabajar por la formación y el empleo, en 100 euros.
Chiclana vive gracias al sector privado, porque el ayuntamiento en lugar de ser un apoyo es un enemigo. Y no decimos que tenga que crear empleo. Pero sí que la realidad demuestra que hay gente que quiere abrir negocios y que no recibe las licencias durante meses y meses, a la que se ha pasado el cobro la tasa de una terraza cuando aún no habían recibido ni la licencia de apertura solicitada mucho tiempo antes…
Vivimos en una ciudad maravillosa, pero donde se depende exclusivamente del turismo, con la temporalidad actual que tiene. Pero es que hay que señalar que la mayor parte del empleo que genera el turismo no emplea a los chiclaneros. Llevamos años reclamando un plan formativo continuo y adaptado a las necesidades del mercado para que la ciudadanía de Chiclana pueda competir en igualdad de condiciones a la hora de optar a un puesto de trabajo.
No tenemos industria, en parte porque el gobierno de Román no ha trabajado para facilitar la llegada de inversiones. Como tampoco ha peleado para que tengamos una subestación eléctrica. En este sentido, es alarmante que todos los veranos suframos apagones porque no se dispone de la electricidad suficiente. Esto hace que muchas empresas industriales acaben eligiendo otros municipios, porque no se dispone de energía suficiente.
Asimismo, cualquier persona, y así nos lo hacen llegar los propios comerciantes y hosteleros, puede comprobar que falta vida en el centro de la ciudad. Es necesario recuperar el alma de nuestro centro, para generar vida, actividad económica y empleo, porque el gobierno local ha dado la espalda a esta y otras muchas zonas.
— ¿Qué propone su partido?
Hay un proyecto a nivel local del PP trabajando desde el primer día, que no está improvisado ni enfocado sólo a una campaña electoral. Llevamos cuatro años trabajando puerta a puerta, visitando a vecinos y comercios, preocupándonos por los problemas reales de los chiclaneros. Esto nos ha dado una estructura de partido más real y próxima a la ciudadanía, para ser conscientes de los problemas diarios de los ciudadanos.
En estos cuatro años, en el PP hemos sido capaces de elaborar un proyecto identificable, con ideas claras, sin ningún tipo de complejos. Un proyecto que tiene cuatro pilares: poner la ciudadanía en el centro de la acción política, conseguir que Chiclana sea una ciudad cómoda, con buenos servicios; enfocar toda acción del gobierno local a la generación de empleo y hacer una política basada en la sinceridad y la honestidad.
Somos una de las ciudades de España con mayor tasa de desempleo y pobreza, por lo que hay que apostar por una bajada de impuestos, por un desarrollo industrial para diversificar la economía local y por la creación de la delegación de Empresa y Comercio, una herramienta específica al servicio de quien quiera emprender y crear puestos de trabajo.
Nosotros defendemos una política basada en la sinceridad y la honestidad. No vamos a prometer nada que no vayamos a cumplir. Nuestro programa electoral se elevará a notario para que todo el mundo sepa lo que decimos que vamos a hacer. Y lo garantizamos porque tenemos experiencia de gobierno, sabemos cómo funciona la Administración y que lo que decimos es posible. Asimismo, garantizo que no estaré más de ocho años en el cargo de alcalde, porque reitero que creo en la renovación.
Para potenciar el centro urbano vamos a convertirlo en un auténtico centro comercial. Para ello vamos a devolverle el alma a esta zona de la ciudad, mejorando su estética y señalización y facilitando que la gente acuda al mismo. Para conseguirlo, vamos a eliminar la zona azul por la tarde. Y la Alameda del Río pasará a ser un nuevo parque urbano, más verde y habitable.
Por supuesto, bajaremos los impuestos, fundamentalmente el IBI, para que los chiclaneros tengan más dinero en sus bolsillos y puedan contribuir a un mayor desarrollo. También quitaremos la tasa de las terrazas.
El mantenimiento de la ciudad es fundamental. Para conseguirlo, segmentaremos Chiclana en áreas, para realizar un mantenimiento urbano más justo y equitativo y programado.
Y pondremos en marcha la regularización de viviendas. Pero un proceso real, con un periodo de pago más amplio y asumible, con la devolución de las cuotas pagadas por mucha gente en 1998. Vamos a pelear por cambiar la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA), porque hasta ahora, el PSOE desde la Junta había hechos leyes de espalda a Chiclana, sin tener en cuenta su realidad. De hecho, si no conseguimos estos cambios en la LOUA, a los cuatro años me marcharé, presento mi renuncia como alcalde.
— ¿Por qué hay que votarle el domingo 26?
Para que entre todos podamos cambiar Chiclana y llevarla al siglo XXI. Tenemos una ciudad con una materia prima fantástica, pero el gobierno que hemos sufrido durante los últimos cuatro años ha puesto cortapisas al desarrollo de la ciudad simplemente por capricho.
El actual alcalde, José María Román, lleva en la política local desde la década de los 90 del siglo pasado y hoy aplica políticas del pasado, de otro siglo. Chiclana en la actualidad huele a humedad, por las políticas rancias de Román y del PSOE. El personalismo y las políticas impuestos por caprichos personales e intereses partidistas no pueden consentirse.
Hay que colocar a las personas en el centro de la política, escucharlas y decirles siempre la verdad, aunque no guste o pueda restar votos. Creemos que Chiclana no merece seguir en manos de quien la tiene sometida a base de mentiras y engaños.
Nosotros proponemos un gobierno coherente, donde prime el interés general. Un gobierno que permitirá que construyamos la Chiclana del siglo XXI entre todos.
Yo siempre digo que me presento para liderar el cambio que Chiclana merece y necesita, porque creo en Chiclana. Es una cuestión que va más allá de la política, me presento por mi ciudad, porque quiero que tengamos una ciudad donde sea agradable vivir y donde haya posibilidad de trabajar todo el año.
— Antes de las elecciones todos quieren ganar y nadie habla de pactos (pero, es un hecho, cada vez es más complicado alcanzar una mayoría suficiente). Así, la pregunta es obligada: si se diera el caso, ¿con qué partidos hablaría para gobernar (o dejar gobernar) y con cuáles nunca?
Aunque pueda sonar a tópico, salimos a ganar con mayoría absoluta. Puede parecer una idea descabellada, sobre todo con los resultados de las últimas elecciones, pero es que, sinceramente, no hay otro proyecto de gobierno como el nuestro.
Contamos con un equipo muy preparado, con mucha experiencia tanto en la Administración con el sector privado. Un equipo formado por personas que incluso han dado un paso al frente, a pesar de tener una vida tranquila y un buen empleo, porque creen en otra forma de hacer las cosas y en Chiclana.
Por otro lado, la ciudadanía ha de ser consciente que en Chiclana únicamente hay dos opciones para gobernar: PSOE o PP. Así, si la gente quiere seguir teniendo un alcalde como José María Román, entonces tiene que votar al PSOE. Pero ha de saber que Román volverá a subir los impuestos, que volverá a elaborar presupuestos municipales donde destina más dinero a fiestas que a fomentar políticas de empleo y que volverá a despilfarrar dinero público en caprichos personales y en ayudar a sus amigos mientras Chiclana está abandonada.
Por eso, la mejor opción es votar a nuestro proyecto, al PP. Por eso pedimos a la gente que se olvide a las siglas. Llevamos cuatro años recorriendo calle a calle, comercio a comercio, escuchando a todas las personas que nos lo han pedido. Nosotros presentamos un programa de gobierno realista, sin prometer nada que no podamos cumplir, y basado en muchas propuestas ciudadanas.
Basamos nuestra propuesta en la sinceridad y en la coherencia. De hecho, la hemeroteca puede mostrar que lo que digo ahora es lo mismo que decía cuando formaba parte del gobierno. Esa misma hemeroteca demuestra que Román es un político que basa su política en la mentira, en la venta de humo, en el continuo engaño político.
De hecho, tenemos tan claro que vamos a cumplir que si, por ejemplo, no conseguimos que se adapte la legislación urbanística andaluza (LOUA) para hacer viable la regularización en los próximos cuatro años, yo dimito. Nadie tendrá que decírmelo. Yo me presento para resolver los problemas de la ciudad. Estamos dispuestos a pelear con quien haga falta, sin mirar las siglas, porque Chiclana es lo primero.
No hay otra vía, porque optar por otras opciones es hacer experimentos que acabarán con Román y en el PSOE de nuevo en la Alcaldía, como han demostrado las elecciones generales con Pedro Sánchez. Si el voto se divide, Chiclana saldrá perdiendo y Román seguirá sometiendo nuestra ciudad a prácticas del pasado. Hay que apostar por el voto útil, que en este caso es votar el PP.
— ¿Qué hacemos con la Mancomunidad de la Bahía? La gente ‘hace’ Bahía casi sin ser consciente (trabaja, reside, se divierte… en una u otra localidad del área metropolitana) ¿Cuándo se darán cuenta los políticos de esta realidad?
Si en lugar de tanta disputa política se mirara más por el ciudadano, que es la clave de nuestro proyecto, se podría conseguir.
— Y la última, una personal: recomiéndenos un libro, disco (grupo o canción), película, serie, videojuego, lugar para perderse en Chiclana…
Desde años practico Muay Thai, deporte de contacto en el que he competido y fui campeón regional hace unos años. La edad, las lesiones y el poco tiempo hacen que cada vez lo haya ido dejando más. Lejos de ser un deporte violento, como pueda creerse para quien lo vea desde fuera, no he visto deporte donde se fomente más la humildad, el compañerismo hasta el punto de que sin tus compañeros no eres absolutamente nada, el respeto y el reto por superarse. El deporte es parte de mí y de una forma u otra, ya sea en gimnasio, en mi casa, o en la calle, siempre saco tiempo para hacer deporte.
Siempre tengo uno o dos libros entre manos, si bien entre el trabajo y la política leo menos de lo que me gustaría. Aunque leo de todo, desde publicidad y marketing a historia, me decanto más por la novela de ficción. Bukowski, García Márquez, Herman Hesse, Oscar Wilde… De los españoles, Ray Loriga es uno de mis favoritos. También me gusta escribir. Así fue como nació ‘Hormigas en los zapatos’, un libro que he publicado hace unos meses y que reúne algunos relatos a los que he ido dando forma en los últimos años.
En cuanto a gustos musicales, el flamenco, sin duda, me acompaña siempre, llevo con orgullo el ser gitano aunque escucho casi de todo.
Tengo muchas películas favoritas, soy un gran aficionado al cine. Quizá la que en conjunto me guste más sea ‘El Padrino’, pero hay otras muchas que son muy especiales por uno u otro motivo, ‘Los goonies’, ‘La LaLand’, ‘Promesas del Este’, ‘El club de los poetas muertos’ o ‘León. El profesional’.
¿Un lugar para perderse por Chiclana? hay muchos, pero creo que un paseo por la playa a primera hora de la mañana, cuando casi no hay nadie, es un privilegio que hay que vivir y disfrutar. DIARIO Bahía de Cádiz Dany Rodway