El periodo de escolarización en Andalucía se abre a lo largo del mes de marzo, como cada curso escolar. Pero a pesar de no haber comenzado aún este nuevo periodo de cara al curso 2021/2022, la delegación territorial de Educación de la Junta de Andalucía está notificando ya a centros educativos públicos gaditanos supresiones de unidades.
Para CCOO, “es evidente la intencionalidad de la consejería de Educación, al notificar por adelantado la supresión de las unidades públicas cuando aún no se ha abierto el periodo de escolarización: reducir la oferta pública dentro de la planificación educativa que está realizando”.
En este sentido, el sindicato mayoritario de la educación andaluza señala como “enormemente grave” estas notificaciones a pesar de la situación que se está viviendo en las aulas andaluzas ante la actual pandemia del coronavirus e insta a la consejería en manos del discutido Javier Imbroda “no sólo a no suprimir unidades sino a aumentar las unidades de partida para que la ratio sea de un máximo de 20 por aula para poder cumplir las medidas de distancia social”.
En un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, el secretario general del Sindicato de Enseñanza de CCOO de Cádiz, Sebastián Alcón, recuerda que “en las aulas se están viviendo situaciones realmente complejas pues, a pesar del incremento de 7.000 puestos docentes –en toda la comunidad autónoma-, gracias al acuerdo de CCOO, no está garantizada la distancia física de metro y medio entre escolares en todas las aulas o cuando no hay garantías del uso correcto de las mascarillas de los escolares”.
“El profesorado está denotando una gran responsabilidad social y profesional, pero suprimir unidades escolares públicas en este contexto es de una gran irresponsabilidad por parte de la consejería y supone, además, adelgazar, un año más, la educación pública”, alerta este sindicato.
Además, Comisiones denuncia la “falta de transparencia” de la Junta de PP y Cs “por no informar, más allá de a los propios centros en aquellas unidades que les afectan, de las supresiones que quiere a llevar cabo”. Al respecto, se exige a la consejería “paralizar, de inmediato, la supresión de unidades escolares públicas para el próximo curso escolar”.
LOS “RECORTES” PLANTEADOS EN JEREZ
A su vez, desde Ustea sindicato mayoritario en enseñanza en la provincia gaditana, se denuncia el pretendido recorte en el caso concreto de Jerez en unidades de acceso de Infantil de 3 años en los colegios públicos Elio Antonio de Nebrija, Alfonso X y El Montealegre (una unidad en cada centro): “un año más, la Junta prosigue una sangría en la educación pública que beneficiará a la educación concertada”.
“Se trata de lo que desde Ustea Cádiz llamamos recortes ‘a priori’. Antes del inicio del periodo de escolarización los centros tienen que hacer públicas en sus tablones las plazas que les asigna la delegación territorial. La administración aprovecha este momento para hacer un ofrecimiento ‘a la baja’: sin conocer la demanda, asignan una oferta de unidades a los centros públicos siempre menor a las unidades que tienen, y se excusan diciendo que si hay más solicitudes se plantearán una ampliación de la oferta, algo que después hay que pelear mucho, y que acaba siempre en pérdida de líneas”, se denuncia.
Al respecto, este sindicato ya avanza que acudirá a la comisión provincial de garantías de escolarización: “nos opondremos a los recortes de líneas en la pública y exigiremos las oportunas explicaciones sobre los criterios que se han seguido para elegir estos centros, todos ellos referentes de su zona”.
Así, por ejemplo, el centro bilingüe Alfonso X tiene para este curso el programa STEAM (robótica y programación), Profundiza, Proa +, Impulsa o CONRed. Todos ellos programas que el colegio ha pedido mediante la elaboración de proyectos de cara a poder dar una educación plena y de calidad a su alumnado. Además, como los otros dos centros jerezanos, tuvieron una demanda de solicitudes amplia el curso pasado. Como botón de muestra, el Montealegre tuvo 63 solicitudes “y este año van a salir con sólo 50 plazas”.
“Creemos que era el curso adecuado, con el problema del coronavirus, para bajar las ratios, y eso pasa por mantener las unidades para mejorar la calidad de la enseñanza, para mejorar la presencialidad segura y para mantener los puestos de trabajo en un ERTE publico encubierto, curso tras curso”, se añade.