En las inmediaciones del yacimiento arqueológico del Cabo de Trafalgar de Los Caños, en Barbate, ha sido hallada una segunda necrópolis (lugar destinado a enterramientos) megalítica de hace 4.000 años.
Consiste en una nueva estructura funeraria que viene a confirmar la existencia de toda una necrópolis megalítica en el tómbolo de Trafalgar. Esta nueva actuación forma parte de los trabajos de delimitación del yacimiento que la Junta de Andalucía, a través de la delegación territorial de Cultura, encargó a la Universidad de Cádiz, concretamente al Grupo de Investigación HUM-440 y que se encuentra en fase de desarrollo. Ahora se procederá a cerrar la actividad arqueológica para la protección del yacimiento hasta que se reinicien las excavaciones después del verano.
La delegada del Gobierno andaluz en Cádiz y delegada territorial de Cultura, Mercedes Colombo, se ha asomado este martes al yacimiento acompañada por el delegado territorial de Desarrollo Sostenible, Daniel Sánchez; el director del Parque Natural de La Breña y Marismas de Barbate, Rafael Martín; el secretario general de la delegación territorial de Cultura, Diego Herrera; y por varios de los investigadores que están realizando los trabajos.
Las actuaciones arqueológicas, autorizadas por la consejería de Cultura, se han llevado a cabo en el marco de desarrollo del proyecto de investigación Arqueostra, denominado ‘Arqueología de la ostricultura romana. Técnicas interdisciplinares para la determinación de los orígenes de la acuicultura en Andalucía y Marruecos’ y que se nutre de fondos europeos (en el marco de la convocatoria de Ayudas a Proyectos de I+D+i de la consejería de Universidades), codirigido por los profesores Darío Bernal y José Juan Díaz del área de Arqueología de la UCA.
“GRAN INTERÉS DESDE EL PUNTO DE VISTA CONSTRUCTIVO”
Investigadores del grupo HUM-440 de la UCA, coordinados por los profesores del área de Prehistoria Eduardo Vijande y Juan Jesús Cantillo, han presentado en las proximidades del Faro Trafalgar esta nueva estructura funeraria “que viene a confirmar la existencia de toda una necrópolis megalítica en el tómbolo de Trafalgar”, se subraya en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
Con la localización de esta segunda tumba se baraja la existencia de una necrópolis que cronológicamente se puede situar, de manera amplia, entre finales del III y principios del II milenio a.C., según afirma el profesor Vijande. La posible existencia de una necrópolis prehistórica en el tómbolo de Trafalgar ya se planteó en 1998, cuando las prospecciones superficiales efectuadas en el término municipal de Barbate en el marco de un proyecto dirigido por José Ramos, catedrático del área de Prehistoria, permitieron la documentación de una posible estructura funeraria prehistórica. Dicha estructura se pudo confirmar el pasado año tras las labores de excavación realizadas por los investigadores de la Universidad gaditana.
Ahora se ha localizado y excavado una nueva tumba megalítica con un gran interés desde el punto de vista constructivo. La primera tumba era de construcción mixta, formada por un pequeño corredor que desembocaba en una pequeña cámara de planta circular excavada en la roca a modo de cueva artificial. Esta segunda estructura presenta una tipología completamente distinta y más compleja. Los estudios arqueológicos han permitido “documentar una tumba megalítica tipo tholos, que se caracteriza por presentar un pequeño corredor formado por varios ortostatos (lajas verticales) y una cámara funeraria de tipo circular conformada por grandes ortostatos de piedra”, precisa Vijande.
La cámara funeraria se encuentra compartimentada, siendo esto algo “poco habitual y que puede responder a una reforma posterior de la estructura. Para esta compartimentación han erigido una especie de pilar utilizando hasta tres grandes ortostatos verticales que permiten la creación de varios espacios dentro de la cámara”, añade el profesor Cantillo.
A nivel constructivo también destaca la presencia de un osario (con un número mínimo de cinco individuos) sobre un pavimento de piedras localizado en el sector noreste de la cámara. Por otro lado, en la zona del corredor, se localizaron los restos de un solo individuo “con una cierta conexión anatómica”, asevera Juan Jesús Cantillo, otro de los investigadores.
Varios individuos de la tumba 1 ya se han datado mediante la técnica del Carbono 14 ofreciendo una cronología de entre 1800-1600 a.C. Los restos óseos recuperados en esta segunda tumba se analizarán con objeto de obtener el máximo de información posible de estas sociedades que habitaron la costa atlántica gaditana hace 4.000 años (cronología, tipo de dieta, sexo, edad, patologías, procedencia de los ajuares, etc.).
En los trabajos arqueológicos han participado los investigadores del HUM-440 Diego Fernández, Leticia Gómez, Serafín Becerra, José Luis Ramírez, Alejandro Muñoz, Jesús Corrales, el antropólogo físico y profesor de Prehistoria de la Universidad de Almería Adolfo Moreno (HUM-145) y estudiantes del Máster de Patrimonio, Arqueología e Historia Marítima de la UCA.
Los trabajos arqueológicos han recibido el apoyo financiero de las consejerías de Cultura y la de Universidades (recurriendo a fondos UE). Y las diversas analíticas realizadas (y en proceso) han contado con la implicación del CEI.Mar.