El presidente del PP de Cádiz, Antonio Sanz, ha anunciado este sábado en el Hotel Atlántico de la capital, aprovechando una reunión de coordinación con portavoces locales del partido en la provincia, su renuncia al cargo orgánico y la apertura de una nueva etapa “en la que se siga impulsando un partido fuerte y unido, con un proyecto luchador y ambicioso al servicio de los gaditanos”.
“Ha sido un honor ser vuestro presidente y compartir la acción política con vosotros siempre con lealtad, servicio y sacrificio”, ha apuntado a los suyos este jerezano de 50 años de edad.
“Me voy libremente y sin que nadie me lo haya pedido, exigido o recordado, considero que es la decisión correcta. Porque cuando alguien da todo de sí, nadie me puede pedir más. Hago lo que debo y cumplo con lo que dije”, ha declarado a los periodistas.
Sanz, que en las últimas primarias nacionales de los conservadores se decantó por Soraya Sáez de Santamaría, frente a Pablo Casado (el ganador, finalmente), es presidente de los populares gaditanos (en tres etapas discontinuas) desde 1996. Además, entre julio de 2006 y julio de 2012 asumió la secretaría general del PP andaluz, como número dos de Javier Arenas.
En su faceta institucional, desde finales de enero de este año es viceconsejero de la Presidencia, Administración Pública e Interior de la Junta de Andalucía con Gobierno de PP y Cs, con el apoyo de Vox. O lo que es lo mismo, número dos de esta consejería, que tiene al frente al malagueño Elías Bendodo. Desde que fue designado viceconsejero, trascendió que dejaría sus funciones dentro del partido en la provincia para dedicarse “en cuerpo y alma” a la Junta. Pero, como “no era el momento”, ha esperado a que pasaran los diferentes procesos electorales en el calendario (generales en abril, municipales y europeas en mayo), antes de dejar la silla libre en Cánovas del Castillo.
Anteriormente, Antonio Sanz estaba ‘colocado’ por su partido como delegado del Gobierno de España en Andalucía (entre febrero de 2015 y junio de 2018), y una vez que Mariano Rajoy perdió el ‘poder’ por la moción de censura del PSOE a raíz de la sentencia de la trama Gürtel, se le buscó hueco como senador. También ha sido parlamentario andaluz durante varias etapas, desde 1999 a 2006.
“ESTOY EN DEUDA ETERNA CON EL PP DE CÁDIZ”
“Hoy cierro una etapa apasionante de 13 años de presidencia en la que siempre he trabajado con lealtad al proyecto y a las personas Estoy en deuda eterna con el PP de Cádiz y siempre voy a estar aquí. Ha sido un orgullo y satisfacción ser vuestro presidente; gracias a todos los que habéis sido parte de esta gran familia durante estos años de trabajo y servicio a la provincia. Hoy más que nunca estoy orgulloso de todo lo que hemos construido juntos. Abrimos una nueva etapa en la que tendréis todo mi apoyo y lealtad”, ha anotado durante su ‘despedida’.
Se va de su “segunda familia” dejando claro que “no me voy, nunca he abandonado el barco en política y ahora mucho menos”; pidiendo perdón “si he cometido errores”; poniendo el acento en su “sacrificio” y el “dejarme la piel, lo he hecho siempre”; y rebatiendo a los que critican a quienes llevan más de 30 años “de servicio público”: “los buenos políticos no se miden por su edad, se miden por su capacidad, por su entrega y por su ética”.
Además de su renuncia pública al cargo orgánico, Sanz ha propuesto para esta presidencia del partido provincial a otra compañera jerezana, Ana Mestre, que actualmente está colocada por el PP como delegada del Gobierno andaluz en Cádiz. Una Junta Directiva Provincial a principios de semana deberá ratificar esta decisión, sin primarias que valga.
UN PP ‘LASTRADO’ POR CS Y VOX
El PP gaditano que deja Antonio Sanz no vive sus mejores momentos por “la división del voto del centro derecha”, según se ha quejado el partido en numerosas ocasiones. En las últimas elecciones generales de abril fue cuarta fuerza en la provincia, por detrás de PSOE, Ciudadanos y Unidas Podemos. Obtuvo un único diputado en el Congreso con el 14,9% de los votos (se dejó en el camino unas 100.000 papeletas con respecto al resultado de hace tres años); curiosamente, Vox logró el 13,1% de apoyos y casi 90.000 votos.
En cuanto a las elecciones municipales de mayo, en la suma de votos de las 45 localidades gaditanas, este partido de derechas sí llegó a ser segunda fuerza provincial tras el PSOE (con el 21,53% de sufragios, unos 32.000 votantes menos que en los mismos comicios de 2015): ha pasado de 180 concejales a 145 y apenas seis alcaldías.