En el momento en que estamos escribiendo este artículo el kilovatio está a 0,45 euros, una barbaridad que hace que enseguida nos pongamos a mirar cómo ahorrar en la factura de la luz. Es cierto que para pagar menos se dan muchos trucos, pero pocos funcionan porque al final hay actividades que no podemos hacer a horas intempestivas en las que la luz tampoco es barata.
Los enchufes inteligentes son una de las mejores soluciones
Hay electrodomésticos que tienen un gasto de luz muy elevado como el termo eléctrico o la lavadora y cuyo funcionamiento nos permite programarlos para que se pongan en marcha solo en las horas en las que la luz es más “barata”.
Estos enchufes inteligentes valen muy poco dinero y su instalación es muy sencilla. Con ellos podemos poner el termo a funcionar una hora antes de ducharnos, apagándolo durante el resto del día o dejando que se encienda solamente un rato para tener siempre agua caliente disponible.
Cambiarnos de tarifa
La tarifa conocida como “de último recurso” ha sido la más ventajosa hasta ahora, sin embargo, lo cierto es que ya no es así. De esta forma, podemos mirar en yoigo luz o tarifas que nos dan el kilovatio a un precio fijo muy alejado de la barbaridad a la que está ahora mismo.
El cambio es muy sencillo y la compañía a la que nos vayamos se encarga de todo siempre que le proporcionemos un número que viene en la factura conocido como ‘CUPS’. Con ese número, en unos días hacen todos los trámites.
Como resultado, obtendremos un importe fijo que nos permitirá pagar bastante menos mientras duren estos precios de locura, que los expertos creen que se extenderán durante un año más.
Comprar electrodomésticos eficientes cuando haya que cambiarlos
Un electrodoméstico eficiente gasta mucha menos energía y eso se nota en los de gran consumo, como las lavadoras, los hornos, las secadoras, etc.
Por eso, cambiar uno viejo por uno nuevo y con la mejor clasificación energética es algo que vamos a notar de inmediato en la factura, aunque el ahorro se produce cuando compramos un electrodoméstico nuevo y eficiente porque el anterior se ha roto.
Esa es la manera en la que se amortiza la adquisición, pues lo cierto es que los electrodomésticos de máxima eficiencia no son nada económicos.
Poner placas solares sin baterías
Si hay un momento para invertir en una instalación fotovoltaica es este, pues con los precios de la electricidad que tenemos ahora la amortización se hace en muy poco tiempo.
Siempre que haya sol podemos consumir energía que será “gratis” y sin el temor a que nos llegue una factura enorme como ocurre ahora, cuando nos da miedo encender un radiador o que el calentador eléctrico se active.
Los precios de la luz son tan altos que ya no nos queda otra que hacer lo posible para ahorrar algo de dinero. Hay muchas soluciones y tendremos que buscar la que mejor se amolde a nuestra forma de vida y a nuestras costumbres, aunque al parecer habrá que cambiarlas si no queremos tener problemas para pagar las facturas.