A través de siglos, las personas han deseado conocer qué les depara el futuro, o simplemente ser guiados gracias a las vivencias del pasado y el presente para tomar decisiones que influyan en su vida. Sea un don o un arte, la videncia se está haciendo cada día más popular gracias a la tecnología.
Necesitar de un vidente es común, se trata de un recurso para conocer un futuro económico, laboral, familiar o de pareja. Es importante reconocer en la actitud del vidente su profesionalismo, sin embargo la persona que consulta debe a su vez saber comportarse al momento de la consulta.
Consultar a un vidente online, suele deberse al pudor que algunos sienten cuando los visitan en persona, o simplemente obedece a un hecho práctico y moderno al hacer uso de la tecnología desde la comodidad que brinda de una consulta privada y en exclusiva.
Cualidades de un vidente profesional
Todo lo que sucede aunque no lo parezca es para bien. En el universo todo acontecimiento está organizado para que a mediano o largo plazo traiga consecuencias de provecho, positivas para las personas.
Por ello un vidente profesional ayuda a comprender que por muy dolorosa o incómoda que sea una situación, esta es una enseñanza, es una conveniente circunstancia que a la larga mostrará el bien que le acompaña.
Los videntes profesionales aportan pautas, herramientas o consejos basados en hechos pasados y presentes para que quien les consulta tome las decisiones de su futuro. Un buen vidente desde el comienzo de la consulta aporta información más que solicitarla.
Un vidente profesional informa más y pregunta menos, de esta manera muestra sus capacidades y gana la confianza y credibilidad de la persona que consulta. Un vidente no asusta, no alarma pero tampoco es complaciente, no dice lo que se quiere escuchar.
Un buen vidente insiste en manejar la información a favor de la toma de decisiones en base al aprendizaje. Una fotografía, el nombre, la fecha de nacimiento es suficiente para comenzar la sección online.
La actitud idónea de quien consulta
Bajo estados de negatividad o de desesperación, no es bueno consultar a un vidente, pues estas actitudes no ayudarán en nada la consulta a los astros, por el contrario obstaculizan la fluidez del trabajo del vidente.
La consulta debe ser vista como una ayuda, una guía para tomar decisiones, más no como la solución milagrosa a algún conflicto, por ello está demás recurrir a un vidente con desespero, cuando realmente se debe asumir como la necesidad de herramientas o datos para ser usados a favor de decisiones que acertadamente llevarán a cambio de provecho.
La ventaja de una videncia en línea
Una consulta online debe mostrar un trato semejante al trato personal, donde la distancia no debe influir en la calidad de la información que aporte el vidente.
Sin embargo, estas consultas brindan mayor comodidad a la persona que consulta, pues al contrario que las visitas personales, en la videncia online, los consultantes no se sienten cohibidos en plantear preguntas que en persona pueden causar vergüenza o pudor. DIARIO Bahía de Cádiz