Cumplir 40 años de edad puede parecer un punto de inflexión importante, ese momento en el que puedes echar la vista atrás a las últimas cuatro décadas de tu vida y también fijarte nuevos objetivos.
En cierto modo, este puede ser uno de los mejores momentos de la vida para experimentar y ver qué hay más allá de lo que has hecho hasta ahora. No todo el mundo reflexiona sobre este tema, pero si lo haces podrás mantenerte despierto y darle mucho más color a tu día a día.
¿No sabes por dónde empezar? Repasamos algunas ideas de cosas con las que puedes experimentar en esta nueva década.
Despierta la pasión con experiencias novedosas
Normalmente, a los 40 años, casi todo lo que hacemos tiene un sentido, está planificado de antemano, y con buen motivo. Pero mantener la rutina a menudo puede llegar a hacer que todo deje de ser asombroso o que incluso caigamos en hacer siempre lo mismo.
La cura a este problema es introducir cosas nuevas en tu vida: hacerlo puede ayudarte a reavivar la pasión y aumentar la curiosidad por lo que el mundo tiene que ofrecer. A continuación te dejamos algunos ámbitos en los que puedes empezar a experimentar.
Anima tu vida íntima
Una de las áreas en las que más puede pesar la rutina es el sexo. Por eso, si quieres darle algo de color a tu día a día, este puede ser un gran momento para replantearte tu forma de relacionarte con otras personas, o como una oportunidad para aportar nuevas dimensiones a tu vida sexual.
Cada persona tendrá que explorar sus límites: para algunos bastará con probar nuevas posturas o incorporar máquinas sexuales a sus relaciones de pareja, y para otros, quizás haya que realizar cambios más profundos.
En este sentido, explorar nuevas posturas sexuales e incluso hablar de fantasías y de juguetes como los de Hismith con tu pareja es una forma estupenda de conectar y dar sabor a las cosas. Os animará a conseguir que vuestra chispa amorosa se mantenga viva, haciendo que el vínculo sea más fuerte que nunca con el paso del tiempo.
Descubre el mundo de nuevo con un viaje inesperado
En esta etapa de la vida, puede ser el mejor momento para hacer ese gran viaje con el que siempre has soñado. Viajar te permite experimentar nuevas culturas y puntos de vista, ampliando tu mente y proporcionándote una perspectiva diferente de la vida.
Y es que el viaje en sí puede ser rejuvenecedor: la planificación de un viaje y todo lo que conlleva su recorrido (y su destino) crean una atmósfera de emoción que se transmitirá al resto de tu vida cotidiana.
Y por supuesto, las experiencias de viaje son también una inversión en recuerdos para toda la vida. Las historias que coleccionas, la gente que conoces y los lugares que ves mientras vives aventuras se filtran en tu propio y único tapiz de la vida para proporcionarte una colección interminable de historias que contar durante años.
Prueba nuevas aficiones e intereses
Nunca es tarde para atreverte con un nuevo hobby. Aficiones como la pintura, la escritura o la jardinería pueden ser una gran idea para darle una salida a tu creatividad y autoexpresión.
Los hobbies pueden ser perfectos para combatir el estrés, para escapar de las obligaciones diarias, o simplemente para ponerte un nuevo reto. Y es que, cuando empiezas a dominarlos, te dan una inmensa sensación de logro y significado.
En realidad, los 40 no son un momento negativo, sino una gran oportunidad para seguir disfrutando del viaje. Cuanto más experimentes, más agradable será tu vida y más historias tendrás para contar. Hazlo, da el salto y deja que tus 40 sean los años más emocionantes de tu vida.