También llamadas cabañas o cobertizos, las casetas de jardín son unos pequeños edificios que un propietario puede construir en su jardín.
Es independiente de la residencia principal y se utiliza generalmente como zona de almacenamiento para las herramientas de jardinería y otros objetos. De hecho, a veces incluso se usan como taller, salón de juegos, sala de reuniones, garaje, etc.
Algunas personas son reacias a instalar un cobertizo en el jardín porque no quieren hacer gastos innecesarios. Sin embargo, este tipo de estructuras no requiere necesariamente un presupuesto enorme. Además, las casetas de madera presentan numerosas ventajas, entre las cuales destacamos cuatro principales.
Imprescindible para los aficionados del bricolaje y de la jardinería
Si tienes un interés especial por el cuidado de tus plantas y tu jardín en general, probablemente utilices muchas herramientas o productos: semillas, bolsas de abono, macetas, cortacésped, palas, etc. Por eso, definitivamente necesitas un espacio de almacenamiento y, de ahí, la necesidad de una caseta de jardín a un precio inmejorable. De este modo, tendrás a mano todo lo que necesitas para disfrutar del bricolaje y de la jardinería.
Espacio adicional para el almacenamiento
Otra ventaja de tener un cobertizo de jardín es el espacio extra que ofrece. Es muy práctico, sobre todo en invierno, cuando hay que guardar los juguetes de exterior de los niños, los muebles de jardín y otros objetos.
Casetas personalizables y fáciles de decorar
Personalizar una caseta de jardín es un juego de niños. No hace falta mucho para decorarla. Basta con repintar la fachada, añadir algunos elementos decorativos o una pequeña terraza justo delante de la puerta para que la caseta cambie totalmente.
Un techo verde sobre la caseta de jardín
Las casetas de jardin permiten la posibilidad de crear un techo verde. Se trata de un realizar tareas de jardinería sobre el tejado de la caseta. Esta opción abre todo un abanico de decoraciones verdes para el jardín.
Un rincón para relajarse
La madera es un material que tiene el poder de transportarnos en el espacio y el tiempo. Gracias a su aislamiento natural térmico y acústico, la temperatura se mantiene estable en el interior (por lo que en invierno mantiene el calor y en verano ofrece un ambiente más fresco) y elimina los ruidos exteriores, consiguiendo así una evasión total del día a día.
Así, estas estructuras de madera se convierten en un lugar ideal para la relajación, donde podemos hacer yoga, meditar o incluso instalar un spa.
Estructura resistente, duradera y ecológica
Otra característica importante de la madera es su resistencia tanto a los impactos como a las inclemencias meteorológicas. De hecho, con un mantenimiento adecuado, este tipo de casetas puede darnos muchos años de felicidad.
Y, evidentemente, esa felicidad por su durabilidad se ve complementada por el aspecto ecológico. La madera es un material natural que apenas consume energía para la fabricación de las casetas. Además, como es el caso de Pineca, muchos fabricantes consiguen su madera en bosques gestionados de manera sostenible, lo que aporta un punto extra a su favor en cuento al respeto de la naturaleza y del medio ambiente.