El socialista Pedro Sánchez ha obtenido este martes en segunda votación, a lo justo, la confianza del Congreso de los Diputados y, en consecuencia, ha sido investido presidente del Gobierno de España, tras la investidura celebrada desde el pasado fin de semana. Deja de estar en funciones.
Ha contado con 167 votos a favor (PSOE, Unidas Podemos, PNV, BNG, Nueva Canarias, Más País, Compromís y Teruel Existe), 165 en contra (PP, Vox, Cs, JxCat, Coalición Canaria, PRC, CUP, Navarra Suma y Foro Asturias) y 18 abstenciones (las de Esquerra y Bildu).
En lo que resta de semana se conocerá la estructura y ministros de este histórico gobierno de coalición, en minoría, que conformarán socialistas y morados (y sus confluencias).
“TRAE ESPERANZA A LA PROVINCIA DE CÁDIZ”
Desde la provincia de Cádiz (que aporta nueve diputados en Madrid: tres del PSOE, dos del PP, dos de Vox, uno de Unidas Podemos y uno de Ciudadanos, tras las elecciones de noviembre), las primeras reacciones han sido las de los socialistas: su secretaria general, Irene García, ha valorado esta investidura de Sánchez como presidente de “un gobierno de izquierdas que se abre paso tras el bloqueo institucional que ha vivido el país durante los últimos meses”. “Estamos convencidos de que avanzaremos en la resolución de todos los déficits que aún tiene esta provincia empezando por el paro al que combatiremos con un plan especial de empleo”, tiene claro.
Cree que “da comienzo una nueva etapa política de esperanza para la provincia” y en este sentido, señala que “vamos a poder seguir avanzando en esa agenda social que el Gobierno socialista había iniciado” y que, interpreta, ha supuesto para Cádiz, entre otras cuestiones, la devolución de la dignidad para los desempleados de más de 52 años que no tenían cobertura social o para las mujeres trabajadoras en el sector de la dependencia que han vuelto a cotizar.
“Un Gobierno de ilusión que ha cumplido con uno de los mayores anhelos de esta provincia como era el fin del peaje en la autopista, o que ha generado certidumbre en el sector naval, ejecutando el plan de reindustrialización, un Gobierno que tiene a un ministro (vasco) como nuestro diputado por Cádiz, Fernando Grande-Marlaska, que ha restituido el orden y la seguridad ciudadana acabando con el pulso al estado de derecho que el narcotráfico había echado en la provincia”, ha apostillado quien es también presidenta de la Diputación.
Sostiene la dirigente socialista, que evita nombrar a Unidas Podemos, que ahora “España tendrá por fin el Gobierno progresista que en dos ocasiones la ciudadanía ha elegido en las urnas para dar soluciones a los problemas reales de la gente”. “Por nuestra parte, no vamos a seguir el juego del frentismo político en que están instalados otros, desde el PSOE vamos a seguir trabajando para que la recuperación de derechos laborales, la actualización de las pensiones, para ser sostén de las mujeres víctimas de violencia machista y para los jóvenes que tienen dificultades para emanciparse”, ha explicado.
Igualmente, ha incidido en la voluntad manifestada por Pedro Sánchez en su discurso de investidura de “actuar con templanza frente al insulto y al acoso, y frente a la amenaza, con respeto y voluntad de diálogo y de tender puentes con todos los grupos parlamentarios, pues ese es el mandato que nos ha dado la ciudadanía ante la representación fragmentada reflejada en el actual hemiciclo”.
“España va a tener el Gobierno que necesita, y el que también necesita Cádiz para contrarrestar las políticas de recortes e injustas de las derechas”, sentencia García, saludando que vaya a ser “un auténtico contrapeso” al Gobierno de PP y Cs, con el aliento de la ultraderecha, en Andalucía, “con el que hay más parados y un alarmante empeoramiento de la sanidad y la educación públicas y donde solo los que más tienen han mejorado su vida”.
“QUE CUMPLA SIN MEDIAS TINTAS O LA ALTERNATIVA SÓLO SERÁ LA DERECHA ULTRAMONTANA”
“Suerte y valentía. Porque vuestra suerte será la nuestra, la de la gente”, ha subrayado por su lado el alcalde de Cádiz, José María González ‘Kichi’, de Adelante Cádiz (coalición de Podemos, IU y Ganar Cádiz), ante esta investidura.
Desde su cuenta de facebook, el primer edil apunta “que el ruido de la extrema derecha (no existe otra derecha en estos momentos) no enturbie la realidad. Este nuevo Gobierno debe venir acompañado del fin de la ley mordaza, la derogación completa de las reformas laborales, el inicio de una verdadera transición ecológica, el diálogo o el derecho a la vivienda, permitiendo regular esos precios y alquileres desorbitados que expulsan a los vecinos de sus barrios. Hacen falta estas prioridades entre otras muchas medidas”.
Además, agrega, “necesitamos conquistas ambiciosas tras tanto arrebatado. Necesitamos parar a las derechas, pero manteniendo nuestro horizonte de transformación total de esta sociedad”.
“Que este nuevo Gobierno no olvide a Cádiz, tan maltratada por el bipartidismo, que ponga esta tierra en el centro y ese plan de industrialización tan necesario. Que no se prolonguen las promesas incumplidas”, remarca el alcalde morado.
Por su lado, la coordinadora de Podemos Andalucía y portavoz de Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, también a través de sus redes sociales, ha mostrado un sentimiento: “alivio. Mucho alivio. Estas derechas autorretroalimentadas, golpistas, dan mucho miedo”. Además le pone tarea al flamante bipartito de PSOE y Unidas Podemos, “hay que pedirle que trate de cumplir las muchas y buenas expectativas que genera, sin complejos, sin miedo y sin medias tintas o la alternativa sólo será la derecha ultramontana”.
UN GOBIERNO “TRITANIC” Y “DE PESADILLA” PARA LAS DERECHAS
Desde el otro lado del tablero, el derrotado en las urnas, el PP gaditano ya opinaba sobre la investidura y el nuevo Gobierno (al que originalmente llama “tritanic”) días atrás, en boca de su portavoz provincial Carmen Sánchez, para quien ahora “Cádiz que no va a existir dentro de los planes de subsistencia del PSOE en la Moncloa”.
“Se trata de un gobierno desalentador que nace con vocación de dar un hachazo a la unidad de España, abriendo la puerta a demoler el modelo territorial y pactando un referéndum encubierto con Catalunya”. Pero hay más: “tendrá consecuencias muy negativas en la economía ya que van a subir de forma masiva los impuestos a los ciudadanos y se quiere acabar con la reforma laboral que permitió frenar la caída libre del desempleo de Zapatero y crear más de 1,2 millones de empleos”. Lo que no dice esta política del PP es que lo pactado por PSOE y Unidas Podemos implica una subida del IRPF a los ricos (los que ganan más de 130.000 euros al año, apenas un 1% de los contribuyentes españoles); y que las últimas reformas laborales han contribuido a precarizar, en sueldo y condiciones, todavía más el trabajo en este país.
Sánchez está convencida de que Cádiz, precisamente Cádiz, “va a estar castigada por un Ejecutivo que ya lleva un año de desgobierno con todas las inversiones e infraestructuras paralizadas en nuestra provincia” y “para colmo ahora también lastrado porque los compromisos que ha adquirido con sus futuros socios de gobierno apuntan a que Cádiz será la gran olvidada”.
Mientras, desde la otra derecha, Ciudadanos, el partido que lleva años haciendo obsesivamente política contra media Catalunya, llega a decir que “dividiendo a los españoles no se puede gobernar un país, y ahora más que nunca necesitamos moderación y centro”.
Siguiendo el argumentario de la franquicia, la única diputada de Ciudadanos por Cádiz, María del Carmen Martínez, repite que “Cs ha sido el único partido capaz de ofrecer una alternativa y vamos a seguir defiendo la igualdad, la unión y la convivencia”.
Para esta jerezana, según señala en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, ahora empieza una etapa “de concesiones a los nacionalistas como las que ya hemos conocido, de trocear aún más la igualdad entre españoles, pero la democracia española es mucho más fuerte que Pedro Sánchez y sus socios”. Entiende que “ningún español ha votado a Sánchez para ver cómo presiona a los jueces, cómo regala a ERC una consulta solo en Catalunya, cómo incorpora en el gobierno a aquellos con los que no dormiría tranquilo, o para ver cómo se calla ante quienes hoy han humillado a nuestra democracia”.
De este modo, esta política de derechas, una de las diez que le quedan a los naranjas en el Congreso (tras perder 47 escaños en las últimas elecciones) tacha el nuevo Ejecutivo de PSOE y Unidas Podemos como “un gobierno de pesadilla” que “preocupa a millones de españoles porque ha salido hacia adelante con los votos de populistas, nacionalistas y la ayuda de ERC y los herederos políticos de ETA, de Bildu”. “Pactar con Bildu, PNV, ERC y trocear la igualdad no es progresismo ni socialdemocracia, es sanchismo”, insiste Martínez.
“¿DÓNDE QUEDA ANDALUCÍA?”
En el caso de Andalucía por Sí (AxSí), el partido heredero en gran medida del extinto PA y sin representación ni en el Congreso ni en el Parlamento andaluz, su líder, el portuense Joaquín Bellido, considera que los 61 diputados andaluces “han vuelto a traicionar a su tierra plegándose a los intereses de sus partidos sin defender el peso de nuestra tierra, cosas que sí han sabido hacer otros diputados de territorios como Galicia, Canarias, Teruel o el País Vasco”.
Según estos andalucistas, “se han firmado acuerdos reconociendo a Euskadi, Catalunya y Galicia como nacionalidades de primer rango, olvidando de nuevo de forma intencionada que Andalucía es una nacionalidad histórica de primera magnitud”. “Este hecho no lo decimos nosotros sino por que está consolidado en la historia democrática y lo recoge nuestro Estatuto de Autonomía”, subraya el coordinador nacional de AxSí, rememorando que en 1981 Andalucía se constituyó en comunidad autónoma, al amparo de lo dispuesto en el artículo segundo de la Constitución de 1978, que reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones españolas.
Bellido afirma que “ante los cambios en el modelo de Estado que se vislumbran en los próximos años”, su formación pondrá en marcha de una campaña encaminada “a defender el peso histórico y presente de nuestra Andalucía”, una campaña que arrancará con la presentación de mociones plenarias en aquellos foros municipales y provinciales donde tiene representación política.