Podemos ha recibido nuevas muestras de apoyo: si hace unos días eran exmilitantes del PSOE gaditano quienes abiertamente pedían el voto para Teresa Rodríguez en las elecciones andaluzas; ahora este respaldo proviene desde el ámbito universitario. El colectivo Albertino, formado por profesores de la UCA y la Fueca, en un comunicado remarcan que este 22 de marzo “tenemos la primera oportunidad en este año electoral para demostrar en las urnas las ansias de cambio de la ciudadanía”.
Podemos ha recibido nuevas muestras de apoyo: si hace unos días eran exmilitantes del PSOE gaditano quienes abiertamente pedían el voto para Teresa Rodríguez, la candidata a la presidencia de la Junta del nuevo partido; ahora este respaldo proviene desde el ámbito universitario. El colectivo Albertino, formado por profesores de la Universidad de Cádiz y la Fundación Universidad Empresa de la provincia de Cádiz (Fueca), que en un comunicado remarcan que este 22 de marzo “tenemos la primera oportunidad en este año electoral para demostrar en las urnas las ansias de cambio de la ciudadanía”.
“Nosotros, profesores de la UCA y la Fueca, somos un colectivo más que ha sufrido estos años la mercantilización de la universidad, los recortes presupuestarios, la precarización de nuestras condiciones laborales y un largo etcétera que nos hace dar un paso al frente. Como dijo Celaya, a veces hay que tomar partido hasta mancharse. Queremos hacerlo animando a votar a Podemos y a su candidata en las próximas elecciones al Parlamento de Andalucía”, señala este escrito remitido a DIARIO Bahía de Cádiz secundado por Leonor Acosta Bustamante, Jorge Costa Delgado, Arkaitz Errazkin, María del Carmen Fernández Molero, Raúl Márquez Fernández, José Luis Moreno Pestaña, Francisco Vázquez García y Francisco Zayas Martínez.
“Kant interpretaba el acontecimiento de la Revolución Francesa como signo de la aspiración de la humanidad al progreso moral, no tanto por el desarrollo mismo del suceso, sino por el entusiasmo colectivo que suscitó. Salvando las distancias –señala este comunicado-, puede decirse que lo que justifica votar a Podemos es, por encima de propuestas y programas más o menos perfilados o de la confianza en la capacidad del partido para cumplirlos, el entusiasmo general que ha provocado su irrupción en las pasadas elecciones al Parlamento Europeo. Entusiasmo análogo al del filósofo, inspirado en la pasión por la justicia social y por lo público, esto es, por lo que a todos interesa”.
Para estos profesores universitarios, desgranando así la intención de este entusiasmo, “pueden encontrarse diez buenas razones” para votar al partido liderado por Pablo Iglesia, que transcribimos literalmente:
– ha actuado decisivamente para reintroducir en grandes sectores de la población, y especialmente entre los jóvenes, la ilusión por la política. En este aspecto, constituye una escuela de civismo a pie de calle, siendo una vacuna contra la apatía o la gestación de grupúsculos xenófobos o profascistas.
– ha propiciado una cultura de la trasparencia y la rendición de cuentas que, hasta su llegada, apenas había cuajado en la arena política inspirándose en el 15M y desencadenando, incluso, un proceso de autocrítica en otras formaciones políticas.
– predica la democracia participativa y comienza aplicándola a su propia organización. Frente a los que profetizaban el rápido colapso de este partido, dada su condición asamblearia, se ha puesto de manifiesto la posibilidad de compatibilizar la unidad de acción con el pluralismo, desplegando, no sólo elecciones primarias, sino listas y programas abiertos. Las aplicaciones informáticas se han utilizado creativamente, a favor de la participación y el ejercicio de la libertad.
– es la organización con más capacidad de generar ilusión colectiva. Las apelaciones del presidente del Gobierno al “realismo” y al “sentido común” son mandatos para acatar la “realidad” fabricada por las élites políticas y financieras. Se renuncia así al esfuerzo, al trabajo para cambiar el orden de las cosas, a la resistencia frente a la ocupación del mundo y de los cerebros por el dogma neoliberal. Podemos afirma la primacía del valor sobre el hecho, pero sin caer en idealismos ilusorios. Aquí se inscribe la labor realizada por esta formación convocando a un gran número de prestigiosos investigadores sociales (economistas, sociólogos, expertos en urbanismo y medio ambiente, etc.) con objeto de convertir su capital científico en propuestas de cambio político. La unión de activistas experimentados con la competencia de cuadros profesionales e intelectuales, sumada a la incorporación a la vida política de personas hasta ahora desconectadas de ella, ajenas a los juegos de esas élites políticas y financieras pero sufriendo sus terribles consecuencias, compone el mejor cóctel posible para cambiar las cosas.
– ha sido sin duda el grupo más lúcido a la hora de detectar y explicar el funcionamiento de esas redes clientelares (políticos y altos cargos de la administración, directivos del Ibex 35 y de compañías energéticas, capitanes de empresas del sector inmobiliario y de la comunicación, mundo financiero) que fomentan la usurpación de la democracia.
– desde Podemos se recalca una y otra vez la importancia de la cultura de la excelencia y el esfuerzo, aunque tampoco se olvida que esta requiere condiciones sociales. Pensando que el argumento de la excelencia ha servido demasiado a menudo para legitimar medidas que servían a los intereses de unos pocos, creemos que la aparición de Podemos ha permitido reformular el debate sobre el lugar de los expertos en una política democrática. Y también para denunciar la hipocresía de quienes dicen apostar por la excelencia y no hacen nada para evitar la sangría de jóvenes cualificados que deben emigrar porque no encuentran trabajo en su tierra. Mientras tanto los mediocres, los arribistas, que han hecho fortuna con el medro y la especulación, campan a sus anchas.
– ofrece un modelo de otra Europa posible y ha colocado a España en un eje alternativo (Syriza, Podemos, Tempo de Avançar) a la violencia de los mercados y el austericidio predicado por Merkel. Un buen resultado de Podemos en España daría fuerzas en todo el continente a quienes creen que otra Unión es posible.
– defiende la derogación de la reforma laboral y propone un nuevo pacto social basado en una fiscalidad justa, donde se persiga el fraude a la seguridad social y el empleo sumergido.
– defiende la enseñanza y la sanidad pública, se opone a las reformas regresivas que están desmantelando dos pilares fundamentales del Estado social, sin cuya protección los individuos no gozan de las mínimas condiciones para desarrollar una vida digna y una libertad real.
– y defiende un modelo de cultura libre del mangoneo de los partidos, que escuche a los creadores y que los inserte críticamente en el tejido social. Rompe así con el modelo de cultura museística y elitista que tan en boga se puso durante la época del pelotazo.
“La ilusión y el entusiasmo por la política, recobrados para la ciudadanía gracias a la presencia de Podemos, se advierte en la alegría de los que participan en la elaboración de sus propuestas, haciéndose responsables de las mismas. Más allá de su éxito o de su fracaso, esa alegría es lo que favorece hoy, por decirlo con Spinoza, nuestra ‘potencia para actuar’”, sentencian estos profesores de la UCA y la Fueca en ese escrito de apoyo bajo el título ‘Tomar partido desde el mundo de la universidad para ganar Andalucía’.