El Consejo de Ministros ha equiparado, a través de un Real Decreto-ley, las condiciones de las empleadas del hogar (la gran mayoría, mujeres) a las del resto de trabajadores, una reivindicación histórica de las plataformas de ese colectivo. El texto acaba con la discriminación que sufrían y asegura una adecuada valoración de su trabajo.
Las empleadas del hogar (en su inmensa mayoría mujeres, y un 44% son extranjeras) podrán tener acceso en España a las prestaciones por desempleo, una medida histórica que acaba de ser aprobada por el Consejo de Ministros. Según números de agosto, en la provincia de Cádiz hay 4.018 personas afiliadas a este régimen especial de la Seguridad Social.
Esta medida equipara los derechos de las trabajadoras del hogar con el resto de los asalariados. Además de este más conocido como paro, también mejorará para este colectivo el acceso a la prevención de riesgos laborales (se crea una comisión de estudio con enfoque de género para abordar las enfermedades profesionales) o a la protección ante el despido.
De este modo, se acaba con los despidos arbitrarios e intempestivos, sin ningún tipo de indemnización, y se elimina la figura del desestimiento, que permitía el despido sin causa y, por tanto, sin las garantías del despido para tales situaciones, al permitir prescindir de las trabajadoras sin justificar causa alguna.
La nueva norma hace efectiva la ratificación del Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que regula la igualdad de trato con el resto de los trabajadores.
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, el subdelegado del Gobierno en Cádiz, José Pacheco, subraya que “una vez más” este Gobierno de coalición PSOE y Unidas Podemos “demuestra para quién gobierna, para la clase media y trabajadora de este país”.
“Las empleadas del hogar dejan de ser el único colectivo laboral que carecía de protección en situación de desempleo, algo que -en este contexto de especial de vulnerabilidad- constituye, desde la perspectiva de la justicia social, una necesidad ineludible”, asevera Pacheco.
PRINCIPALES NOVEDADES
La principal novedad del decreto es que las trabajadoras del hogar tendrán derecho a la prestación contributiva de desempleo y a todas las prestaciones asistenciales vigentes en el ordenamiento jurídico laboral. Será obligatorio cotizar por desempleo y al Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) a partir del 1 de octubre, y se garantiza la cobertura indemnizatoria en caso de insolvencia del empleador.
Otra gran novedad es que, además de la reducción a las cotizaciones que existe en la actualidad, los empleadores tendrán derecho a una bonificación del 80% en las aportaciones a la cotización por desempleo y al Fogasa. De esta forma, se protege a las trabajadoras vulnerables y, al mismo tiempo, a las familias que necesitan sus servicios.