Debido a la crisis que sigue azotando nuestro país, cada vez se ven más trabajos que no cotizan a la Seguridad Social. Un ejemplo de ahora, y de antes, son las amas de casa, trabajan durante los 365 días del año y no reciben ningún tipo de compensación por ello, además, llegado el momento de jubilarse no recibirán ningún tipo de prestación ya que legalmente no han cotizado. Otro sector que se ve afectado son las escorts, estas personas ofrecen sus servicios de compañía sin estar dadas de alta, siendo otro de los muchos sectores que están olvidados por el sistema y que si se regularizasen supondría un incremento del PIB de entre un 1 y un 2%.
En el futuro, cuando llegue el momento de jubilarse, si no se ha cotizado un mínimo de años se da el caso de existir pensiones no contributivas, situadas en torno a los 370 euros mensuales; si quitamos la factura de la luz y del agua apenas nos dará para poder subsistir en malas condiciones el resto del mes.
No obstante, el mínimo actual para poder recurrir a esta pensión no contributiva está establecido en haber trabajado durante al menos 15 años, dos de los cuales deberán estar dentro de los 15 años anteriores antes de que la solicitemos, y puede ser adquirida por cualquier persona ya sea ciudadana española o extranjera que viva en el Estado español.
Para poder solicitarla se han de cumplir unos requisitos, que son:
– Tener al menos 65 años de edad.
– La pensión no contributiva de jubilación y la de discapacidad no son compatibles, por lo que solo podremos percibir una de ellas. Para una persona que tiene algún tipo de problema o no puede andar, necesita de alguien que la cuide, que en muchos casos es alguien externo a la familia, y con esa paga ni siquiera le llegará a pagar a una persona para que le atienda en sus necesidades más básicas.
– Si vivimos con una o más personas que también reciban esta ayuda se establecerán unos nuevos ingresos que dependerán del número de personas conviviendo en un mismo hogar.
Desde hace ya tiempo, el colectivo de jubilados lucha en España con manifestaciones, tratando de hacer ver que la subida del 0,25% de sus pensiones (la idea inicial del anterior Gobierno central del PP también para este 2018, que tuvo que modificar tras estas protestas) no es suficiente para cubrir otro tipo de gastos que cada año suben y en algunos casos llegan a superar el 10%.
Si hacemos cuentas, una ayuda de 370 euros al mes la multiplicamos por el número de meses y nos da un total de 4.440 euros para una persona en todo un año: una cantidad insuficiente para aquellos que por el motivo que sean no han podido trabajar durante el tiempo que está establecido legalmente, o que lo han hecho, pero sin un contrato de trabajo digno.
No contentos con ello, hace escasos años se elevó la edad para poder jubilarse de los 65 a los 67 años, lo que complica todavía más la situación del mercado laboral. DIARIO Bahía de Cádiz