La Universidad de Cádiz ha puesto al servicio de las autoridades sanitarias todas las capacidades de su equipamiento científico-tecnológico relacionado con la impresión 3D que hay disponible en sus centros, institutos y grupos de investigación para la fabricación de aquellos componentes que sean necesarios en las labores del personal sanitario (tan necesitado de equipos de autoprotección frente al coronavirus), así como su potencial para la producción de gel hidroalcohólico y el diseño de prototipos funcionales para la apertura automática de puertas de centros sanitarios.
De esta forma, se han iniciado ya varios trabajos gracias al equipamiento de impresoras 3D que existen en la UCA. En colaboración con Navantia (que ya anunciaba su disposición al respecto días atrás), se está llevando a cabo la producción de material ‘protectivo’ por parte del grupo de investigación INNANOMAT y de la División de Fabricación Aditiva, utilizando para ello hasta ocho impresoras 3D que usan distintas tecnologías de fabricación aditiva.
Asimismo, y de forma paralela, un grupo de profesorado de la Escuela Superior de Ingeniería y de la Facultad de Ciencias del Mar y Ambientales está trabajando de forma conjunta en dos iniciativas, utilizando tanto los medios de la ESI de Puerto Real como los medios de los que disponen en sus domicilios particulares.
Por una parte, estos investigadores están colaborando con distintos movimientos surgidos de forma espontánea para la fabricación de viseras mediante tecnología FDM (Fused Deposition Modeling, de sus siglas en inglés). El grupo de trabajo se organizó durante el pasado fin de semana y hasta el momento llevan fabricadas algo más de 100 viseras, que serán entregadas en los próximos días para su distribución entre los centros sanitarios de la provincia de Cádiz. En esta iniciativa, también se cuenta con la colaboración de la empresa gaditana Titania, spin off de la propia UCA, que ha puesto a disposición sus recursos y personal en fabricación 3D.
Asimismo, según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, este grupo de científicos lleva varios días colaborando con profesionales del Hospital Puerta del Mar de Cádiz en el diseño y fabricación de dispositivos que permitan la apertura de las puertas del centro sin necesidad de utilizar las manos, minimizando así el riesgo de contagio del personal sanitario y de los pacientes. En estos momentos, se han diseñado y fabricado prototipos funcionales adaptados a las puertas de residencia. Cuando la dirección del centro apruebe su instalación, el fichero diseñado será distribuido libremente para que sea fabricado por los makers que deseen colaborar en el proyecto.
Pero la colaboración de la Universidad gaditana en la lucha del coronavirus no acaba aquí: desde el departamento de Biomedicina, Biotecnología y Salud Pública de la Facultad de Medicina se ha trasladado igualmente a las autoridades sanitarias la puesta a disposición de toda su capacidad para la producción de gel hidroalcóholico.
“Desde la UCA vamos a sumar todos nuestros esfuerzos, recursos y conocimientos para contribuir, entre todos, a contener el avance del Covid-19”, subraya el rector de la UCA, Francisco Piniella. En sentido, ha querido resaltar “la responsabilidad y el ofrecimiento de la comunidad UCA para poner al servicio de las autoridades sanitarias todas nuestras capacidades para seguir colaborando en todo lo que haga falta”.
ENTREGA DEL MATERIAL PREVENTIVO
Ya días atrás, al inicio del vigente estado de alarma decretado en el país, la Universidad de Cádiz entregaba a las autoridades sanitarias material preventivo de uso común por su personal que desarrolla actividad en laboratorios, institutos, servicios centrales y demás infraestructuras científicas (una comunidad compuesta por más de 1.800 investigadores que desarrollan su actividad en los casi 200 grupos de investigación activos y el personal de administración que presta sus servicios en los mismos).
En concreto, la UCA ha facilitado un total de 345 cajas de guantes de distintas tallas y modelos (34.500 unidades), seis cajas con mascarillas de diferentes formatos (300 unidades), 30 gafas de protección especial, 60 unidades de vestuario desechable compuesto de monos integrables-batas, 20 unidades de suero fisiológico y 80 litros de gel desinfectante.