Cada vez más, los usuarios prefieren buscar y contratar servicios desde la web, y las empresas de limpieza no son una excepción. Según los datos publicados por Forbes, en 2025 la fuerza laboral estará compuesta por un 75% de millennials, quienes acostumbran a buscar y contratar servicios desde Internet.
Por ello, tener una buena reputación digital es fundamental para cualquier empresa o profesional. Debemos hacernos ver y ganar reconocimiento para que los usuarios nos valoren.
Una de las herramientas que las empresas de limpieza pueden utilizar para conseguirlo son las redes sociales. Vivimos en una sociedad en la que la inmediatez prima. Muchas veces, necesitamos contactar con alguien de forma inmediata y las redes sociales son una forma de comunicación muy eficiente que supone, a la vez, un escaparate de nuestros servicios.
Además de mantener una buena comunicación con nuestros clientes y una excelente reputación en redes, los resultados que aparecen en la primera página de Google son la base de la imagen de cualquier negocio. En el caso de las empresas de limpieza, uno de los objetivos iniciales es transmitir confianza a quienes necesitan de sus servicios. Si un futuro cliente busca en Google y lo que encuentra en las primeras páginas son opiniones negativas o noticias que critican los servicios o la forma de ejecutarlos, ese cliente descartaría de inmediato la posibilidad de contacto con la empresa. Por ello, la reputación digital es una piedra angular.
Para conocer la opinión que tienen sobre nuestra empresa de limpieza, podemos realizar una serie de consultas en los buscadores y fijarnos en los primeros diez resultados. Se pueden realizar búsquedas con el nombre de la marca, el nombre del producto o servicio que ofrecemos, el nombre de la marca y el término “opinión” o palabras vinculadas a nuestro sector. Así podremos tener una idea general de cómo nos perciben en el mundo online.
Para conseguir una buena reputación en Internet, mantener contento a los clientes que han contratado los servicios de limpieza es esencial. Podemos animarles a que dejen reseñas en portales de opinión donde figure nuestra empresa o en las fichas de Google My Business. Interactuar con ellos en redes, agradecer comentarios positivos y escuchar los negativos para intentar solucionar sus problemas son también pilares de la estrategia que debemos seguir.
Si la empresa no tiene departamento de marketing, es recomendable que contrate los servicios de profesionales del sector, como las consultoras de marketing digital, que se encargarán de gestionar dicha reputación y conseguir mejorar la imagen y el posicionamiento en Internet. Sabrán cuál es la forma más acertada de comunicar lo que ofrecemos, nuestros proyectos, nuestros logros y las valoraciones que los demás tienen sobre nosotros. Con mucha probabilidad, aumentarán nuestras ventas. DIARIO Bahía de Cádiz