Hay veces que ni la Bahía de Cádiz es capaz de llevarse nuestras preocupaciones ni el estrés al que estamos sometidos diariamente. Aunque un paseo al lado de las marismas puede ser un comienzo para adentrarse en el mundo de la relajación, la práctica de esta disciplina requiere cierto entrenamiento.
Veamos cuáles son las mejores formas de relajarnos y los beneficios que conlleva la práctica de esta.
5 formas de practicar la relajación
La respiración
El control y la consciencia de nuestro propio cuerpo son fundamentales como un primer paso hacia la relajación. Podemos conseguirlo y practicarlo a través de la respiración. Aprender a respirar o, mejor dicho, desaprender a respirar para encontrar la manera más consciente y profunda de hacerlo nos ayudará a relajarnos. Habitualmente respiramos de manera acelerada y superficialmente. Para acercarnos a la relajación deberemos practicar la respiración profunda, utilizando el diafragma para incorporar a nuestro cuerpo la mayor cantidad de oxígeno posible.
La andulación
Hay personas que pueden estresarse o agobiarse al ser conscientes de su respiración. En esos casos se puede echar mano de ayuda externa a nuestro cuerpo. La andulación, por ejemplo, desarrollada por HHP, es una nueva generación de métodos de tratamientos que están basados en principios biofísicos. Además de ayudar a fomentar la relajación, gracias a la vibraciones controladas y al calor por infrarrojos, esta tecnología contribuye a aumentar el rendimiento y el bienestar físico y a eliminar el dolor de cabeza y otros tipos de dolores.
La práctica de mindfulness
Puede que la palabra en inglés nos diga poco y nos genere más estrés. La traducción al español sería algo así como “conciencia plena” y se define como una facultad espiritual o psicológica necesaria en el camino hacia la iluminación. Aunque sus raíces están en el budismo, en Occidente se practica desprovista de cualquier componente religioso.
El mindfulness consiste en ser consciente de la realidad que nos rodea, “vivir el momento”. Prestar atención a pensamientos, sensaciones corporales, emociones y al ambiente sin juzgarlos ni clasificarlos en positivos o negativos, simplemente aceptarlos.
Para empezar a practicar mindfulness se recomienda ser guiado por otra persona. Hay bastantes vídeos en Internet que pueden ayudar en las primeras sesiones. Determinadas ramas de la psicología y la psiquiatría también utilizan el mindfulness para tratar la ansiedad y el estrés al fomentar la relajación.
Escuchar música
El dicho “la música amansa las fieras” es la base fundamental de este método de relajación. Muchas veces se practica de manera inconsciente y ayuda. No obstante, hacerlo de manera consciente será mucho más beneficioso para nuestra salud al reducir los niveles de estrés y ansiedad.
¿Cuál es la mejor música para practicar la relajación? La Mind Lab Institution, especializada en experimentos de neurociencia, señaló que la canción Weightless, del grupo Marconi Union, es la canción más relajante del mundo. Los científicos señalan que este tema disminuye la frecuencia cardíaca y la presión arterial, ayudando así a combatir el estrés y la ansiedad.
Hoy en día podemos encontrar multitud listas de música relajante en Internet. La mejor forma de encontrar las canciones que contribuyen a la relajación es ir probando y anotar los temas que contribuyen a disminuir nuestra ansiedad. Así mismo, conviene adquirir el hábito diario de escuchar música si queremos optar por este método de relajación.
Caminar de manera consciente
Un paseo por la naturaleza gaditana contribuye sin duda a relajarse. Realizar cualquier actividad física ayuda a la mente a canalizar a través de nuestro cuerpo todo el estrés acumulado. Si ese ejercicio físico no es suficiente para relajarnos la caminata puede combinarse con el mindfulness.
Caminar de manera consciente no es más que caminar prestándole atención a nuestro cuerpo, los movimientos que hacemos, los músculos que se mueven, la realidad que nos rodea, los sentimientos y emociones que surgen. Simplemente somos conscientes de todo eso, no los clasificamos en positivos o negativos, solo observamos.
Los beneficios de la relajación
Varios estudios señalan que la relajación es fundamental en el afrontamiento del estrés. El doctor Amutio Kareaga de la Universidad del País Vasco señala en un artículo sobre estrategias de manejo del estrés que la relajación es la primera línea de defensa del estrés. Se recomienda utilizar varias técnicas de relajación para enfrontarse al estrés, así como diseñar guiones de entrenamiento en relajación altamente individualizados para atender a las necesidades de cada persona.
Así mismo, dedicarse tiempo a uno mismo para relajarse afectará positivamente a nuestra salud. Los dolores de cabeza causados por el estrés podrán llegar a desaparecer, el insomnio será cosa del pasado y una vez relajados no nos acordaremos de esos días en los que nuestro ritmo cardíaco estaba aceleradísimo.
Y no solo nuestro cuerpo se verá beneficiado gracias a la relajación. La mente funcionará más rápido y más eficazmente. Esa incapacidad para centrarse y analizar los retos diarios desaparecerá al tiempo que eliminamos el pesimismo y la visión negativa de nuestra vida. DIARIO Bahía de Cádiz