CSIF demanda a las administraciones que forman parte del Consorcio de Bomberos de la provincia de Cádiz un “mayor esfuerzo” en sus aportaciones para aumentar la plantilla. Hasta ahora “todas las promesas de aumentar la plantilla de años anteriores y recogidas en acuerdos firmados con los agentes sociales han sido obviadas”, se queja este sindicato. A finales de 2016 se convocaron nueve plazas, “habiendo aproximadamente unas 100 vacantes”.
CSIF ha solicitado públicamente a las administraciones que forman parte del Consorcio de Bomberos de la provincia de Cádiz –que recientemente aprobaba sus cuentas para 2017– un “mayor esfuerzo” en sus aportaciones para aumentar la plantilla. Hasta ahora “todas las promesas de aumentar la plantilla de años anteriores y recogidas en acuerdos firmados con los agentes sociales han sido obviadas”, se queja este sindicato.
Desde el sector de Administración Local del sindicato, se recuerda que la Unión Europea recomienda que haya un bombero por cada 1.000 habitantes, cuando en la provincia gaditana, con más de 1,3 millones de personas censadas, apenas se llega a los 450 bomberos operativos en todo el territorio, “suponiendo un tercio de lo recomendado”.
CSIF Cádiz señala que, por ejemplo, el Ayuntamiento de Jerez se comprometió a aumentar la plantilla existente en el parque local en unos 30 bomberos, sin que hasta el momento haya cumplido dicho compromiso. Y hace una comparacióm: en la ciudad de Granada, con una población parecida, disponen de más de 180 bomberos en total, mientras que en esta gran ciudad gaditana apenas se llegan a los 55.
Asimismo, poblaciones como Medina, Conil, Tarifa, Villamartin, Olvera, Benalup o Jimena “gran parte del año” cuentan con solo dos bomberos de guardia, “siendo totalmente imposible asistir a siniestros con plenas garantías y poniendo en grave riesgo tanto a las personas como a los propios profesionales de bomberos”, afirma este sindicato en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz.
El responsable del sector de Administración Local de CSIF Cádiz, Francisco Silvestre, hace hincapié en que “la falta de personal es una constante en toda la provincia, debido principalmente a la dejadez de los políticos miembros del Consorcio de Bomberos, y que representan a todas las poblaciones consorciadas, además de la dirección del Consorcio, que se limita a seguir directrices políticas sin exigir con el rigor preciso el aumento de plantilla y sin convocar ninguna oferta de empleo pública desde el año 2008”. Ante esta situación, esta plantilla “se ha visto mermada deliberadamente de personal funcionario fijo, sufre una precarización constante y, además, se hace uso de una lista de trabajadores que obtuvieron plaza en una oposición declarada nula por sentencia judicial”.
En 2016, obligado por dicha sentencia, se abrían las negociaciones de la Oferta Pública de Empleo de (OPE), negociación que finalizó en marzo y, por causas que CSIF no entiende por parte de la dirección del Consorcio, se ha tardado casi nueve meses en convocar las “exiguas” nueve plazas que han salido, “habiendo aproximadamente unas 100 vacantes de las cuales unas 67 están cubiertas por personal interino”.
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