Todo el mundo quiere tener bienestar y estar saludable. Para lograr este estado, se pueden hacer muchas cosas: comer bien, dormir lo suficiente y necesario, hacer ejercicio, etc. Es fundamental mantener este estado de salud y revisar nuestro cuerpo con regularidad, así como acudir a profesionales de la salud. Sin embargo, hay situaciones de auxilio en las que cualquiera de nosotros puede encontrarse en un momento dado. Desmayos, caídas, ahogamientos y muchas otras cosas que pueden ocurrir.
Estudiar socorrismo
En esta sección hablaremos sobre el socorrismo, que, si bien la definición de la palabra incluye la acción generalizada de prestar auxilio en un caso de accidente, suele pensarse en el socorrismo acuático. Los profesionales de esta disciplina (‘socorristas’, mejor conocidos como ‘salvavidas’) se encargan de vigilar a las personas en una playa o en una piscina y estar listos para ayudar a una persona que sufra algún percance, como por ejemplo: un ahogamiento. También prevén los accidentes mediante indicaciones, como llamadas de advertencia debido a un peligro inminente.
Estudiar socorrismo es tan útil como rentable. Saber cuáles son las maniobras básicas y qué hacer en caso de auxilio es muy importante. También hay muchas oportunidades laborales para los profesionales del socorrismo; es un trabajo muy demandado, ya que playas, piscinas privadas y parques acuáticos están en busca de estos perfiles.
Un socorrista debe saber hacer muchas cosas:
- Reconocer los riesgos del agua. Dependiendo del lugar en el que se esté (una playa, una piscina, un parque acuático) es imprescindible reconocer los peligros. En este punto se incluyen las rocas en el mar, las olas muy grandes, los saltos desde un sitio prohibido, etc.
- Reconocer a las víctimas. La víctima puede estar ahogada por agua o por un elemento externo, puede estar desmayada debido a un golpe en la cabeza o con una herida provocada por una roca. Los socorristas identifican el daño y actúan en consecuencia.
- Saber nadar perfectamente. Este punto es más que obvio, pero es igualmente importante mencionarlo. Un socorrista debe conocer los distintos tipos de natación.
- Saber cómo remolcar a la víctima. Hay distintas maniobras para remolcar a una persona, como remolcar a la víctima por las axilas o por el pecho.
- Brindar los auxilios requeridos. En esta labor se cuenta con elementos de primeros auxilios los cuales pueden ser usados para tratar a la víctima.
En ciudades costeras como Cádiz y Málaga, los cursos de socorrismo son muy populares. Además, muchos sitios, como mencionamos anteriormente, están en busca de socorristas. Para aprender todo lo expuesto más arriba, ¿qué mejor que hacer un curso de socorrismo? En uno de estos serás guiado por profesionales que te brindarán los conocimientos necesarios y te enseñarán a practicar el socorrismo. Por suerte, puedes encontrar un curso de socorrismo en Málaga de un centro de estudio oficial y prepararte para esta demandada disciplina.
Fisioterapia
La fisioterapia está relacionada con el socorrismo, ya que ambas disciplinas velan por la salud y el bienestar de las personas. La fisioterapia es una disciplina no farmacológica que se encarga de diagnosticar, prevenir y tratar síntomas de varias dolencias mediante el uso de elementos físicos, como la electricidad, el ultrasonido, el láser, el calor, el frío, el agua y técnicas que no requieren de estos elementos, como los estiramientos. Los expertos en fisioterapia gestionan muchas cosas: la examinación del paciente, la decisión de si el paciente debe ser referido a otro profesional de la salud o si pueden tratarlo en su centro de salud, la implementación de un programa de tratamientos y las recomendaciones para el autocuidado de la persona.
Entre algunos de los beneficios de someterse a la fisioterapia, están:
- Ayuda a combatir los síntomas de algunas patologías. Entre estas patologías podemos encontrar a las infecciones de piel (como el acné) y a los dolores en los músculos y articulaciones, ya sea debido a una inflamación.
- Ayuda a frenar los efectos de enfermedades degenerativas. Como la esclerosis, el Párkinson u otras que afectan el sistema nervioso.
- Fortalece el organismo. Las técnicas de fisioterapia refuerzan las estructuras musculares y óseas y prepara mejor el ejercicio, pues los músculos están en un mejor estado y la resistencia aumenta, ya que se usan también técnicas de fisioterapia respiratoria.
Lo mejor que puedes hacer es buscar establecimientos profesionales que ofrecen servicios de fisioterapia. Puedes encontrar estos servicios en distintas ciudades del país, como Fisioterapia en Málaga y Fisioterapia en Fuengirola. Estos servicios son otorgados por centros profesionales de cuidado y de salud.
Tanto para el socorrismo como para la fisioterapia, es bueno leer libros recomendados por profesionales aparte de practicar estas disciplinas. Puedes encontrar muchos conceptos y técnicas en libros especializados. Si estás interesado en aprender alguna de estas disciplinas (o si ya lo estás haciendo), céntrate en los cursos principales y apóyate en buenos libros que te darán más conocimiento, que nunca viene mal.