La elaboración de la Estrategia Provincial y el Plan de Adaptación al Cambio Climático (PACCA) promovidos por la Diputación de Cádiz, comienza a arrojar “resultados interesantes”, producto de los análisis previos de los riesgos climáticos a los que se enfrenta la provincia y el proceso participativo mediante el que se están recabando los datos. Desde hace semanas se ha solicitado la colaboración de ayuntamientos y agentes sociales y económicos.
Entre las principales preocupaciones reveladas hasta el momento se encuentra la escasez de agua motivada por la disminución de lluvias y su posible efecto en sectores económicos como la agricultura o la ganadería. También inquietan la subida del nivel del mar y sus repercusiones en el litoral gaditano, en especial, las asociadas al turismo costero. Además, la posibilidad de que se sufran inundaciones o el aumento de la pobreza energética son otras de las preocupaciones que se han puesto sobre la mesa.
Los estudios preliminares realizados en el marco de la elaboración de este PACCA y en el que se analiza el periodo 2040-2070 resaltan que la provincia gaditana se verá afectada por fenómenos climáticos como: incremento generalizado de la temperatura de entre 3 y 4 grados para valores máximos, y de entre 2 y 3 grados para mínimos; aumento de noches tropicales (sobre todo en el área con influencia mediterránea); mayor intensidad y frecuencia de olas de calor; y una disminución de las precipitaciones (sobre todo en la zona oriental).
La Agencia Provincial de la Energía, encargada de coordinar esta iniciativa, está informando de estos resultados preliminares en un ciclo de encuentros territoriales con representantes municipales y agentes sociales, que se extienden durante la primera quincena de marzo. Se trata de reuniones virtuales en las que se dan a conocer los datos revelados por la evaluación de las amenazas, vulnerabilidades, capacidades de adaptación y riesgos climáticos de cada municipio. El objetivo es que los participantes puedan identificar e incorporar peculiaridades locales y detectar asuntos clave para cada municipio.
El proceso de participación del documento se completará durante el mes de abril, con una serie de talleres, esta vez presenciales, en los que los grupos de trabajo revisarán las medidas de adaptación propuestas para cada unidad territorial (la provincia se ha dividido estratégicamente en nueve, sobre la base de sus circunstancias climáticas y los distintos impactos) y realizarán una valoración en función de criterios institucionales y socioeconómicos. Del mismo modo, se priorizarán las medidas seleccionadas en base a criterios de urgencia e importancia.
En la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz se recuerda que la Diputación aprobó en octubre de 2019 la adhesión a la Declaración de Emergencia Climática, así como impulsar y coordinar, en colaboración con los ayuntamientos de la provincia, iniciativas encaminadas a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Fruto de ello es la elaboración de esta Estrategia y Plan Provincial de Adaptación al Cambio Climático en la Provincia de Cádiz. En la teoría, el documento servirá de referencia a los municipios a la hora de elaborar sus propios Planes de Acción para el Clima y la Energía Sostenibles (PACES) y cumplir los requerimientos del Plan Andaluz de Acción por el Clima.