Ignacio García, parlamentario andaluz de IU por Cádiz, ha defendido la necesidad de que se realice un “análisis exhaustivo” de la industria gaditana en el que se involucren todas las fuerzas sociales, que lleve “al reflotamiento” de la que está llamada a ser el principal motor de la Bahía y la provincia. Evidencia que este sector “tiene que ir más allá, tiene que aspirar a una diversificación económica mayor y no aspirar a la dependencia excesiva de una empresa concreta como es Navantia y de un mercado concreto como el sector naval”.
El parlamentario andaluz de IU por Cádiz, Ignacio García, ha defendido la necesidad de que se realice un “análisis exhaustivo” de la industria gaditana en el que se involucren todas las fuerzas sociales, “empezando por la universidad, un análisis sobre el terreno” que lleve “al reflotamiento” de la que está llamada a ser el principal motor de la Bahía y del resto de la provincia.
García ha considerado que no se puede caer en “un optimismo injustificado por las “evidentes y buenas noticias” de contratos para los astilleros de un Buque de Acción Marítima (BAM) o del conocido como quinto gasero “aún pendiente de confirmar” y ha señalado que la industria de Cádiz “tiene que ir más allá, tiene que aspirar a una diversificación económica mayor y no aspirar a la dependencia excesiva de una empresa concreta como es Navantia y de un mercado concreto como el sector naval”.
En este sentido, el diputado portuense, en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, apunta que esta diversificación, como verdadero revulsivo del desarrollo industrial para Cádiz, debe venir, aparte del sector naval, “de la mano de la industria aeronáutica, de las energías renovables o de la industria agroalimentaria”. En este cambio de modelo productivo, ha señalado como apuesta importante por la provincia la que podría venir a través de la recuperación del sector de la automoción, que podría articularse, según apunta, sobre la base de la industria auxiliar naval, que podría “servir de proveedor para alguna industria matriz como en su momento fue Visteon en la Bahía”.
El parlamentario izquierdista considera “necesario hacer un diagnostico de por qué una zona con tradición industrial, con potencial evidente, con infraestructuras que pueden ser mejorables pero que están ahí ya, es incapaz de obtener todas las posibilidades de financiación que se brindan”, desde programas como los fondos Reindus.
“ALGO ESTA PASANDO” CON EL REINDUS
A este respecto, entiende que “algo esta pasando” con los fondos, “o su convocatoria es excesivamente severa y exige condiciones que se alejan de la realidad de las industrias o nuestro tejido industrial es tan débil que no puede acometer proyectos en grado suficiente y nos inclinamos por la primera, por pensar que las convocatorias de fondos Reindus son un paripé que no responde a la realidad”. Así, recordó que de las partidas para 2013 con cargo a esta ayuda, en el Campo de Gibraltar, de los 26 millones de euros disponibles sólo se concedieran dos y en la Bahía de Cádiz, de los 62 millones disponibles, únicamente se consignaron nueve, lo que califica de “lamentable”.
A juicio de Ignacio García, esta situación lleva a la necesidad de “un análisis en profundidad” y cree que sería “interesante” retomar la iniciativa de Mesa por la Industrialización de la Bahía.
Ha lanzado además una propuesta dirigida al Gobierno central para que se considere a Cádiz como “zona piloto para el cambio de modelo productivo, porque tenemos los mimbres, partimos de infraestructuras, partimos de tradición industrial, partimos de gente formada y somos el laboratorio ideal para promover el cambio de modelo productivo que el Gobierno central no está promoviendo”. Según critica, “ya perdió la oportunidad de la bonanza económica, perdió la oportunidad que supone la crisis y seguimos con un modelo económico que no ha cambiado desde entonces”.
AYUDAS PÚBLICAS SECTOR NAVAL, ¿POR QUÉ NO?
García aprovecha la ocasión para criticar el reciente rechazo del PP en el Parlamento andaluz a la enmienda de IU para pedir a Europa la eliminación de la prohibición de que haya ayudas públicas para los astilleros. A su entender, es “injusto e irracional”, cuando se están concediendo ayudas a sectores como la automoción, a través del plan PIVE, al sector del transporte o al agroalimentario, mientras que “a sectores como el naval, con gran impacto en el empleo” no se autorizan.
Asimismo, el diputado andaluz califica de “hipocresía” que la derecha haya llevado al Parlamento el rechazo al límite impuesto por la UE para la construcción naval “cuando se sabe que esta prohibición del 20% termina el 31 de diciembre”. García afirma que “lo importante para Navantia es la eliminación de las restricciones, porque lo que se pueda meter en los astilleros tiene unos retornos muy superiores a los gastos de cualquier tipo de prestaciones”.