El Consejo de Ministros acaba de autorizar un contrato de conservación y explotación en la autopista AP-4, entre Cádiz y Sevilla, con un valor estimado de 24,7 millones de euros, que se entiende como “un paso decisivo para la eliminación del peaje, previsto el próximo 31 de diciembre”, y que vienen prometiendo en los últimos años con más o menos ambigüedad tanto el PP como el PSOE desde el ministerio de Fomento.
El contrato entrará en funcionamiento “a partir de la reversión al Estado de la gestión de esta autopista, el próximo 1 de enero de 2020”, se deja claro, y será gratis al fin tras décadas suponiendo un lastre para el bolsillo de gaditanos y sevillanos (actualmente, unos 15 euros ida y vuelta en turismo); y prevé la subrogación del personal que realiza estas labores de conservación actualmente en la autopista (explotada por Abertis).
La AP-4, que une las provincias de Cádiz y Sevilla, ha ido prorrogando la concesión en varias ocasiones desde su apertura a principios de los años 70 del siglo pasado (inicialmente concluía en 1993). La Junta de Andalucía, por su cuenta, ya afrontó el coste de la liberación de parte del peaje, en el tramo entre Cádiz y Jerez, comprometiéndose a pagar 72 millones de euros en plazos a Abertis entre 2005 y 2019. Por su lado, el PP en el marco de las últimas elecciones andaluzas, prometió en campaña que si llegaba a gobernar eliminaría el peaje de forma inmediata, sin esperar a 2020… gracias a Ciudadanos y Vox gobierna, pero no tardó en descartar cumplir dicho compromiso aludiendo a motivos económicos.
Estos contratos de servicios que ahora se licitan para la ejecución de operaciones de conservación y explotación en la Red de Carreteras del Estado (en este caso concreto de la AP-4 entre Dos Hermanas y Puerto Real) tienen el objetivo de realizar los trabajos de servicios de comunicaciones, servicios de vigilancia, atención a accidentes, mantenimiento de los elementos de la carretera, mantenimiento sistemático de las instalaciones de suministro de energía eléctrica, alumbrado, señalización variable y semaforización.
Además, se incluyen las labores de establecimiento de inventarios y reconocimientos de estado, agenda de información de estado y funcionamiento de la carretera, programación, coordinación, seguimiento e información de la ejecución de los trabajos, actuaciones de apoyo a la explotación, estudios de accidentalidad e informes de seguridad vial. Asimismo, se realizarán los trabajos de desbroce, fresados y reposición del firme, limpieza de cunetas y, en general, todas las labores de conservación ordinaria de las vías a su cargo.
“UNA INFRAESTRUCTURA MÁS QUE AMORTIZADA”
Este contrato da respuesta a “una reivindicación histórica que lleva plateando Andalucía con argumentos sólidos, ya que se trata de una infraestructura más que amortizada, no existe una carretera alternativa de alta capacidad y estamos ante una vía de comunicación de especial importancia para la provincia de Cádiz”, ha recalcado a colación el delegado del Gobierno central en Andalucía, Lucrecio Fernández.
“El Gobierno de España deja claro que la supresión del peaje existente en el tramo entre Dos Hermanas y Jerez es imprescindible y prioritario”, ha insistido el delegado del Gobierno en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, incidiendo en que su eliminación tendrá una incidencia directa sobre el desarrollo económico de la zona, “ya que permitirá la libre circulación de vehículos por una vía de comunicación estratégica para la vertebración territorial y los flujos comerciales en la región”.
Desde el PP, por su lado, su única diputada en el Congreso por Cádiz, María José García Pelayo, ha mostrado su preocupación sobre “quién asumirá finalmente el coste”. Deja caer que Fomento ha manifestado en varias ocasiones su intención de crear una tasa para que sean los usuarios los que asuman los gastos de mantenimiento de las autovías, por lo demanda al Gobierno central que “aclare de una vez” si el coste del mantenimiento de esta autopista será con cargo a los presupuestos o si se va a quitar el peaje para crear una tasa “con lo que los gaditanos seguiríamos pagándola de nuestro bolsillo”.