La “indiferencia” de Hacienda y Fomento y la Sepi hacia Correos, la mayor empresa pública de este país, está provocando, según CCOO, el “ajuste más severo de su historia”, con 8.000 puestos de trabajo afectados en tres años en España y 160 en la provincia, lo que a medio plazo y si se continúa sin adoptar “las medidas pertinentes”, podría derivar en una reducción de 20.000 trabajadores. En Cádiz supondría 275 carteros menos, un total de 450 empleados de todas las especialidades y las zonas rurales y poblaciones pequeñas podrían ver desaparecer su servicio. El sindicato advierte de un “gran conflicto” en otoño si la situación no varía.
La “indiferencia” de los ministerios de Hacienda y Fomento y la Sepi hacia la mayor empresa pública de este país está provocando, según CCOO, el “ajuste más severo de la historia de Correos”, con 8.000 puestos de trabajo afectados en tres años en España y 160 en la provincia de Cádiz, lo que a medio plazo y si se continúa sin adoptar las medidas pertinentes, podría derivar en una reducción de plantilla de 20.000 trabajadores, “dejar a más de 20.000 familias en todo el Estado sin sustento y a cientos de miles de ciudadanos sin servicio público”. En la provincia supondría 275 carteros menos, un total de 450 empleados de todas las especialidades (un 40% de la plantilla) y las zonas rurales y poblaciones pequeñas podrían ver desaparecer su servicio.
Según lamentan desde este sindicato, mientras los responsables políticos “continúan inmersos en su apatía hacia Correos” (en tanto que Francia inyecta a su operador 1.500 millones de euros y otros gobiernos europeos apoyan a sus operadores), las multinacionales de logística y paquetería y los fondos ‘buitres’ de inversión, “en una campaña orquestada y organizada, pretenden dar un pelotazo económico que les reporte pingües beneficios a costa de hundir Correos, dinamitar un servicio público postal de los mejor valorados por los ciudadanos y provocar la quiebra del operador público”.
En consecuencia, Correos, que se está quedando sin márgenes, está sufriendo el “mayor ajuste de su historia” con la amortización de 8.000 puestos desde 2011 en todo el Estado, un recorte de la contratación “sin precedentes” e “inabarcables zonas de reparto” que están perjudicando a miles de ciudadanos que no pueden recibir su correspondencia en tiempo y forma. La traducción en la provincia gaditana es de 160 puestos amortizados, reducción del 20% de contratación, aumento de los kilómetros que tienen que recorrer diariamente los carteros para cubrir sus zonas de reparto y las de los compañeros que no sustituyen por enfermedad, vacaciones… además de numerosos ciudadanos de la mayoría de las poblaciones están dejando de recibir su correo diariamente.
CCOO, en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, avisa de que no va a permitir “despistes de tal calado” cuando lo que está en juego es la viabilidad de la empresa y el empleo de 55.000 trabajadores; por ello, exige al Gobierno (al regulador, Fomento; propietario, Hacienda; y a la propia Sepi) que “dé herramientas a Correos para competir en un mercado abierto, en igualdad de condiciones con el resto de operadores postales europeos”. Medidas que pasan por mantener y asegurar la aportación del Estado para prestar el servicio público que tiene encomendado en zonas rurales y deficitarias (como ha ocurrido con la reciente partida aprobada en Bruselas para La Poste de 1.500 millones de euros); hacer de Correos un operador fuerte en paquetería para generar ingresos alternativos a la carta, como lo son Deutsche Post a través de DHL o la paquetera Mediapost que opera en España de La Poste.
Este sindicato advierte al Gobierno de Rajoy de que “si no da señal clara, y pronto, se puede ver envuelto en el mayor conflicto laboral y social de la historia en Correos a partir de otoño y a lo largo de 2015 con movilizaciones, encierros y huelgas sin precedentes”. A estas alturas, la paz social en esta empresa “está cogida de un hilo” puesto que este escenario impide cerrar un convenio colectivo y acuerdo que ya lleva medio año de bloqueo.
