La Subdelegación del Gobierno central en Cádiz ha promovido este jueves, antesala del puente festivo de la Constitución, una ceremonia conmemorativa alrededor del aniversario precisamente de la Carta Magna vigente, la de 1978. El acto se ha desarrollado en el Parador Hotel Atlántico, de la capital, presidido por el subdelegado José Pacheco, quien ha subrayado que, además, “celebramos el consenso de una sociedad que quiso avanzar, para dejar a las futuras generaciones un país mejor que el que tenían”. El Ayuntamiento de Cádiz, como cada año, llevará a cabo su homenaje el mismo viernes día 6 en la plaza de la Constitución, frente a las Puertas de Tierra (en el ‘pájaro-jaula’), e izando la bandera en el mástil de la plaza de Sevilla.
La ceremonia de la Subdelegación ha consistido en intervenciones institucionales y en la entrega a personas y entidades de diplomas. En este 41 aniversario de la Constitución todas las distinciones, 11 en total, se han querido relacionar con algún artículo de la misma.
Según se ha trasladado a DIARIO Bahía de Cádiz, la relación de reconocimientos ha sido la siguiente: a UGT, que cumple 130 años (Art. 7: Sindicatos y asociaciones empresariales); a la Dirección General de Tráfico, DGT (Art. 15: Derecho a la vida); al periodista jubilado Manuel M. Fossati (Art. 20: Libertad de expresión); al IES Trafalgar de Barbate en sus bodas de plata (Art. 27: Libertad de enseñanza / Derecho a la educación); al Club Cádiz Fútbol Sala Femenino (Art. 43.3: Fomento del deporte); a la pareja artística Costus, a título póstumo (Art. 44: Acceso a la cultura); a la Asociación de Apicultura de Andalucía (Art. 45: Medio Ambiente y calidad de vida); a la Asociación Pro-Personas con Necesidades Socio-Educativas Especiales y/o Dependientes del Campo de Gibraltar, Asansull (Art. 49: Atención a la discapacidad); el Aula de Mayores de la UCA (Art. 50: Tercera Edad); las comandancias de la Guardia Civil de Cádiz y de Algeciras y las Unidades de Prevención y Reacción (UPR, los antidisturbios) de la Policía Nacional (Art. 104: Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado); y los trabajadores de la Subdelegación del Gobierno en Cádiz jubilados este año “por una labor callada, a veces poco conocida y, en ocasiones, denostada” (Art. 35: El trabajo, derecho y deber).
Antes de la concesión de estas distinciones, se ha hecho entrega a los alumnos ganadores de los premios correspondientes a la sexta edición de los concursos de dibujo y de redacción (el tema común propuesto era el de la xenofobia) del Plan director para la convivencia y mejora de la seguridad en los centros educativos y sus entornos. E igualmente se ha entregado la medalla al Mérito de la Seguridad Vial, concedida por la DGT al guardia civil Luis Fernando Gutiérrez Holgado; y se ha distinguido a Pedro de los Santos, jubilado en este año tras una larga carrera en el Servicio Público de Empleo Estatal, en el que ejerció de director provincial.
“LA ACTUAL CONSTITUCIÓN NOS HA TRAÍDO SIN DUDA LOS MEJORES 41 AÑOS DE LA HISTORIA DE ESPAÑA”
En su discurso, el subdelegado ha incidido en que “conmemoramos la fecha en la que el pueblo español ratificó mediante referéndum su Constitución. Celebramos que la nación española, deseando establecer la justicia, la libertad y la seguridad, y promover el bien de cuantos la integran, en uso de su soberanía, proclamó su voluntad de: garantizar la convivencia democrática; consolidar un estado de derecho; proteger a todos los españoles y pueblos en el ejercicio de los derechos humanos, sus culturas y tradiciones, lenguas e instituciones; promover el progreso de la cultura y de la economía para asegurar a todos una digna calidad de vida; establecer una sociedad democrática avanzada; y colaborar en el fortalecimiento de unas relaciones pacíficas y de eficaz cooperación entre todos los pueblos de la Tierra”.
Para este político del PSOE, “celebramos todo eso, y algo más. Celebramos el consenso de una sociedad que quiso avanzar, para dejar a las futuras generaciones un país mejor que el que tenían. En circunstancias muy difíciles, personas de muy diferentes ideologías y en muchos casos con importantes y trágicas vivencias personales de enfrentamiento, lograron elevarse, apartando las cuestiones personales y las cortas miras, para conseguir un marco donde toda la sociedad se viera reconocida y fueran posibles sus anhelos de progreso. Esta idea de país y la cultura del consenso estaban muy por encima de cualquier otro tipo de interés particular o partidista”.
“Frente a quienes desde el adanismo y el desconocimiento, hablan despectivamente del ‘régimen del 78’, yo hablaría del ‘milagro del 78’, ya que la actual Constitución nos ha traído sin duda y en relación a los países con los cuales debemos compararnos, los mejores 41 años de la historia de España, en avances, bienestar social y amplitud de derechos y libertades”, considera José Pacheco.
Ese “milagro del 78” le evoca tres imágenes al máximo representante del Gobierno central en funciones en la provincia: la imagen de un puente, “sirve para cruzar, pasar de un lado a otro. A nosotros nos sirvió para cruzar desde la dictadura hasta la democracia” y además acerca dos orillas, “nuestra Constitución fue y debe seguir siendo ese espacio de diálogo y convivencia en el que todos nos sintamos representados”. La segunda imagen es la de un ascensor, “porque nos ha elevado como nación al selecto club de las democracias plenas. Porque nos ha elevado como sociedad a ser un referente en derechos y libertades. Y porque nos ha permitido elevarnos como personas, para que cada cual pueda ser aquello que su esfuerzo y capacidad le permita, que tanto tiene que ver con el acceso a la educación”. Y en tercer lugar, le evoca la imagen de un cuadro, una pintura: “inacabada, que se va dibujando poco a poco, día a día, año a año. En la que participamos todos los españoles. Y a color, donde encontramos el rojo y amarillo de nuestra bandera, y muchos colores más, porque España es diversa, alegre y dejó atrás la tristeza y los temores del blanco y negro. Un lienzo del que nos sentimos orgullosos por lo que representa: los esfuerzos y los logros de lo que hoy somos y hemos conseguido entre todos”.
“Nuestra Constitución, como este lienzo inacabado, ha de ser un documento tan vivo como la sociedad a la que se debe y con capacidad para adaptarse a las evoluciones que ésta le demande”, ha dejado caer, ¿proponiendo indirectamente una necesaria reforma?
“Es cierto que la mayoría de la población no ha votado la Constitución, ya que la pudieron votar los nacidos antes de 1957, es decir, aproximadamente el 25% de la actual población”, y en este punto ha dicho que, con todo, en la Carta Magna “se establecen mecanismos de reforma que la norma incluye y que han sido pocas veces puestos en práctica”; como aquella reforma exprés con nocturnidad y alevosía del artículo 135 por parte de PSOE y PP para fijar que el abono de la deuda pública (a los bancos) fuese lo primero a pagar frente a cualquier otro gasto del Estado…
“No por estar satisfechos y orgullosos de lo conseguido –ha remarcado-, debemos caer en el inmovilismo. Por el contrario, debemos mantener la ambición de hacer un país mejor cada día, superando las dificultades que las circunstancias y los tiempos nos vayan presentando”.
En la reflexión de Pacheco, la cuestión territorial (o sea, el tema Catalunya), “es fruto de la necesidad de completar el desarrollo constitucional del Estado de las autonomías”, y “no necesitamos mártires ni violentos, sino personas sosegadas y cabezas pensantes que busquen la concordia y el bienestar de todos, sin exclusiones ni barreras, en todos los ámbitos”.
Pero más allá de esa manida cuestión territorial, el subdelegado en Cádiz aprecia como país otros grandes retos: las relaciones internacionales, en general, y en Europa, en particular; el cambio climático, los Objetivos para el Desarrollo, la España vaciada, o el desarrollo tecnológico, la investigación, y la innovación, entre otros. Sin olvidar la lucha por la igualdad de género y por la diversidad.