El sector de la construcción y las reformas se está recuperando en zonas especialmente afectadas por los efectos negativos del Covid-19 y el confinamiento. Tras el impacto producido por la paralización del sector durante el pasado año, un informe elaborado por el Consejo General de Arquitectura Técnica de España (CGATE) asegura una recuperación de 14 puntos en el último trimestre del año.
De hecho, se prevé un segundo semestre plenamente operativo con el que conseguir un crecimiento del 5,5% según el informe de Euroconstruct, donde se predice el avance del sector de cara al 2022 con un crecimiento superior al 6%. La evolución es lenta, pero se mantiene constante según los expertos.
Prueba de ello es que cada día nacen o se rehacen más empresas en Andalucía, desde empresas de impermeabilizaciones en Granada, a empresas dedicadas a materiales en auge como las láminas de control solar en Cádiz, o empresas de estructuras en Córdoba, o incluso alquileres de camión grúa en Málaga. Todos ellos claros indicadores de la recuperación de este sector tan afectado por la crisis sanitaria.
Previsiones para Andalucía
Según la Cámara de Comercio de Sevilla, el sector de la construcción espera un aumento de entre 2,3% y un 5% con 15.000 nuevos puestos de trabajo. En este contexto, Sevilla y Málaga lideran las cifras de contratación, pero en conjunto, la comunidad autónoma andaluza ha liderado en abril el volumen de contratación del sector. De hecho, representa un 33,7% del total de contratos firmados en todo el territorio nacional.
Un sector donde la mayoría de los trabajadores son varones, representado el 91,3% de los contratos, frente a un 8,7% de las mujeres. En cuanto a la edad, la empresa Randstad detecta que el 50,5% tiene una edad situada entre los 25 y los 45 años, y el 40,6% restante es mayor de 45 años. Los menores de 25 solo suponen el 8,9%, prueba de que prefieren otro tipo de sector para acceder al mercado laboral.
La demanda de obra nueva va en aumento, mientras que la rehabilitación y las reformas dependen de los estímulos directos del Plan de Recuperación y los fondos europeos. Ahora bien, dadas las circunstancias actuales respecto al cambio climático, cabe preguntarse si una construcción sostenible es posible.
La sostenibilidad en el sector de la construcción
Responder a las necesidades de construcción en un mundo donde se agotan los recursos no es tarea fácil. Por este motivo crece la demanda de edificios y construcciones ecológicas, algo que para los constructores más innovadores se convierte en un auténtico desafío, pero también en una gran oportunidad.
Teniendo en cuenta que este sector es responsable de más del 30% de la extracción de recursos naturales a nivel mundial, y de una cuarta parte de los residuos sólidos que se generan, la tarea no es fácil. Más aún cuando se sabe que la construcción y el funcionamiento de los edificios es responsable de casi un 40% del consumo de energía y de las emisiones a la atmósfera.
Partiendo de esta realidad, se hace urgente y necesario un nuevo modelo de construir donde los procesos sean respetuosos con el medio ambiente, al mismo tiempo que eficiente en términos de recursos a lo largo de la vida útil de la construcción. Desde la elección del emplazamiento, pasando por la construcción en sí misma, el funcionamiento y el mantenimiento, hasta contemplar posibles renovaciones y derribos, todo debería obedecer a criterios de sostenibilidad y eficiencia.
Por otro lado, la salud comunitaria, la distribución de la riqueza y la equidad social también forman parte de la ecuación. Pero al margen de estos principios, a nivel práctico, es fundamental explorar los distintos métodos de construcción que hacen posible una vía menos contaminante.
En primer lugar, un enfoque colaborativo y una construcción ajustada optimizando el proyecto y minimizando los residuos puede ser un primer paso. En segundo lugar, se puede dar más protagonismo a la construcción prefabricada, modular e industrializada. De esta forma se usan menos recursos naturales al tiempo que se reduce la contaminación y se optimiza la utilización de los materiales.
El siguiente paso a seguir es utilizar materiales de construcción más sostenibles, ya sea hormigón sostenible moldeado, madera masiva o pilares de bambú. También los materiales reciclados y reciclables pueden cobrar protagonismo dentro de este tipo de construcción cero emisiones.
Por último, lo que se denomina construcción circular, da respuesta a muchos interrogantes a la hora de enfocar un modelo sostenible. Se trata de un modelo pensado para reducir, reutilizar y reciclar tantos recursos como sea posible. No solo se compran materiales usados y reciclados, sino que también se tienen en cuenta los materiales ya existentes en una construcción para reutilizarlos cuando sea posible.
Además, siguiendo estos métodos, las condiciones de trabajo se vuelven más seguras y se reduce el gasto energético durante el funcionamiento de las obras, con lo que todos los implicados salen ganando.