El Colegio Oficial de Médicos de Cádiz dice verse en la “obligación ética y legal” de rebatir a los negacionistas del coronavirus, y más ante las recomendaciones efectuadas por algunos médicos (ya no solo por personajes mediáticos y pintorescos como Miguel Bosé) que niegan la existencia del Covid-19 y de la validez de los test PCR, que se oponen a las medidas adoptadas por las autoridades sanitarias como el uso de mascarillas, la cuarentena, el aislamiento y confinamiento y la distancia física, y que rechazan el desarrollo de las vacunas para combatir la pandemia.
Sólo en la provincia de Cádiz, desde que explotara esta crisis sanitaria, el Servicio Andaluz de Salud (SAS) tiene registrados 2.213 positivos confirmados por PCR (en total, a fecha de 22 de agosto son cerca de 2.600 contagiados contabilizados), de ellos 696 en los últimos 14 días (y 429 en la última semana); y ha habido que lamentar ya 175 fallecidos relacionados con el coronavirus.
“La actitud de estos médicos negacionistas constituye una grave irresponsabilidad y supone un grave peligro para la salud pública”, subrayan desde el Colegio en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz.
Y se agrega que la difusión de estos mensajes, contrarios a la buena práctica médica y a la evidencia científica, “crea una intolerable alarma social, en un contexto agravado por la situación de emergencia y excepcionalidad en la que nos encontramos”. Además, estas conductas “violan las normas deontológicas de la profesión médica y, por tanto, son merecedoras de la correspondiente sanción”.
Al respecto, se puntualiza que los colegios profesionales son corporaciones de derecho público, amparadas por la ley y reconocidas por el Estado, con personalidad jurídica propia y plena capacidad para el cumplimiento de sus fines: por ello, al amparo de diferentes leyes, el Colegio Oficial de Médicos de Cádiz advierte que va a proceder a la apertura de información previa “contra aquellos colegiados que pudieran incurrir en tales acciones, y en su caso, a la posterior incoación de expediente disciplinario por presuntas infracciones del código de deontología médica”.
“Todo ello, sin perjuicio de las posibles responsabilidades penales en que pudieran incurrir dichos colegiados con tales actuaciones, que se pondrían, en su caso, en conocimiento de la Fiscalía para que valorase la presunta comisión de delitos contra la salud pública o cualesquiera otros”, se sentencia.
Oportunismo del selecto y restringido Club para salir en la prensa ante algo que resulta una obviedad. No es Cádiz precisamente donde está el núcleo de negacionistas. Esta cuestión debe ser vehiculizada a través del Consejo General de Colegios de Médicos.