La economía gaditana continúa en una fase de “transición” marcada por la recuperación de la pandemia del Covid-19 y a la vez por los efectos negativos provocados por un entorno de “incertidumbre persistente” debido principalmente a la inestabilidad geopolítica global (la guerra de Ucrania, el genocidio de Israel sobre Palestina, el control de la inflación…).
Aun así, al crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de la provincia de Cádiz se sitúa por encima de las previsiones para España y Andalucía, aunque con una revisión a la baja: podría crecer hasta un 3,2% en 2023 y un 1,4% en 2024, una reducción considerable en comparación con el 6,3% registrado en 2022. Además, la inflación alcanzará un 4,4% en este 2023 y un 2,6% en 2024.
Son conclusiones a las que llega la segunda edición del Barómetro Económico de Cádiz (AQUÍ, completo), elaborado de forma semestral por el Colegio Profesional de Economistas de Cádiz con el apoyo técnico del Departamento de Economía de la Universidad Loyola, y costeado por la Diputación.
Para el decano del Colegio de Economistas de Cádiz, Javier Cabeza de Vaca, este segundo informe “confirma que 2023 ha sido un buen año para la economía de nuestra provincia”, si se atiende a ese crecimiento del PIB por encima del español y del andaluz.
En cuanto al comportamiento del mercado laboral, este estudio indica que el número de ocupados en 2023 crecerá un 3,5% y un 1,9% en 2024. Sin embargo, en la provincia, la tasa de paro seguirá estando a niveles superiores al umbral del 20%, alcanzando el 23,4% en 2023 y bajando ligeramente al 22,5% en 2024.
“A pesar de que la provincia genera empleo que se confirma con la tendencia al alza de la población ocupada y las afiliaciones a la Seguridad Social, este incremento no es capaz de absorber a la población activa, manteniendo tasas de paro por encima del 20%, indicador que duplica la tasa de paro de España”, remarca Cabeza de Vaca en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
El director ejecutivo del informe, el catedrático de Economía de la Universidad Loyola, Manuel Alejandro Cardenete, expolítico de Ciudadanos, resalta a su vez que “a pesar de que 2023 arrancó en mejor posición que 2022 (para la provincia gaditana) y la batería de indicadores continúa registrando valores que los ubican por encima de niveles prepandemia como es el caso de las pernoctaciones, habría que vigilar más de cerca la evolución de las sociedades mercantiles constituidas, de las exportaciones y el índice de confianza empresarial, que podrían ser elementos protagonistas de la desaceleración de la provincia en el último trimestre de 2023 e inicios de 2024”.
A PESAR DEL CONTEXTO NACIONAL E INTERNACIONAL, LA ECONOMÍA GADITANA “GENERA EXPECTATIVAS POSITIVAS DE RECUPERACIÓN”
En el tercer trimestre de 2023, el valor del Índice BEC (indicador propio a partir de indicadores del IECA, Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía) se situó en 130,9 para Cádiz (frente al 119,9 de segundo trimestre de 2023), y en 118,2 para Andalucía (frente al 114,5 del trimestre anterior).
Estos valores, para este segundo Barómetro Económico, confirman que a pesar del contexto nacional e internacional, la economía gaditana y andaluza “generan expectativas positivas de recuperación”, mostrando por dos periodos consecutivos valores por encima del periodo de referencia, el cuarto trimestre de 2019. Sin embargo, “habría que vigilar muy de cerca el proceso de recuperación en el último trimestre del año pues no es del todo claro”.
Prácticamente todos los indicadores (a excepción de matriculación de turismos que aún registra valores por debajo de niveles prepandemia) han mostrado valores por encima del periodo de referencia, no obstante, las sociedades mercantiles constituidas y las exportaciones presentan una importante desaceleración con respecto al trimestre anterior.
Por otro lado, se resalta los “buenos comportamientos” de las pernoctaciones turísticas que parecen estar completamente recuperadas, a niveles de 2019 y destacando el incremento de viajeros provenientes del resto de países de la UE y Reino Unido; y del índice de confianza empresarial, mostrando valores por encima de los prepandémicos, tendencia percibida desde inicios de 2023, “aunque a un ritmo muy inestable, influenciado por los conflictos geopolíticos y los altos niveles de inflación”. En cuanto a los afiliados a la Seguridad Social, el indicador sintético se mantiene estable respecto al periodo anterior.
En lo relativo al sector exterior, la provincia experimentó un crecimiento a lo largo de 2022, y manteniendo su liderazgo en exportaciones en Andalucía, tras el máximo histórico alcanzado en dicho año, en el ejercicio 2023 muestra una tendencia sensiblemente decreciente. Por su parte, las importaciones registran la misma tendencia, con cierta caída en el tercer trimestre. Todo ello provoca una disminución mayor del saldo comercial, “situación que caracteriza habitualmente a la economía gaditana”.
El director de este informe termina asomándose al contexto internacional para subrayar que “la fragilidad del ciclo económico podría verse afectada por las guerras simultáneas en Oriente Medio y Europa del Este, sobre todo, a través de su impacto en los mercados energéticos”. “Todo esto y otros factores hacen que la fase de recuperación de la economía esté rodeada de incertidumbre; algunos analistas prevén un ‘aterrizaje suave’ de la economía mundial, lo cual supondría un impacto reducido sobre el PIB y el empleo, y una reducción de la tasa de inflación”, apostilla.