En el mundo actual, puede resultar difícil dedicar tiempo a la salud y el bienestar. Pasar horas y horas frente a una pantalla, abusar de alimentos poco saludables y sentirse abrumado por el estrés pueden hacer que el cuerpo pase factura por la falta de cuidados adecuados. Para ayudarte a mantenerte en forma mental y físicamente, aquí tienes algunos consejos sencillos para seguir con tu rutina de bienestar.
1. Cultivar el pensamiento positivo
Aunque es más fácil decirlo que hacerlo, cultivar el pensamiento positivo es increíblemente beneficioso para el bienestar mental y físico. Cuando se tienen pensamientos negativos sobre uno mismo o sobre situaciones que suceden a lo largo de la vida, puede ser útil practicar el reencuadre o la autoconversación. La autoconversación consiste en dar un paso atrás en nuestros pensamientos y empezar a hablarnos a nosotros mismos como si estuviéramos hablando con otra persona que está pasando por los mismos problemas.
Esto nos ayuda a darnos cuenta de que, aunque la situación pueda parecer dura al principio, todavía hay formas positivas de verla que pueden ayudarnos a seguir adelante y a afrontar mejor las emociones difíciles. Practicar este tipo de autorreflexión constantemente ayuda a crear patrones de pensamiento más saludables que tienen un impacto directo en el bienestar general.
2. Sea físicamente activo
La actividad física no sólo beneficia la salud física, sino que se ha demostrado que reduce los niveles de estrés al liberar en el torrente sanguíneo hormonas del bienestar como la dopamina y la serotonina. Participar en actividades como correr o incluso hacer un poco de yoga son formas sencillas de hacer que fluyan las endorfinas, que ayudarán a mejorar el estado de ánimo de forma significativa.
Y para un buen seguimiento, puedes contratar a los mejores especialistas en plataformas dedicadas. Para aquellos a quienes no les gustan los deportes de equipo, las actividades al aire libre como la natación o el ciclismo permiten hacer ejercicio mientras se respira aire fresco, lo que puede ser especialmente útil cuando quedarse en casa empieza a resultar aburrido debido a las escasas opciones de interacción social disponibles a causa de las restricciones actuales en el mundo…
3. Cocine usted mismo
Comer sano va más allá de la salud física: también ayuda a mantener la claridad mental. Cocinar sus propias comidas le asegura saber exactamente lo que hay en ellas; esto también permite un mayor control sobre los ingredientes que podrían desencadenar sensibilidades alimentarias o alergias y, en última instancia, conducir a problemas digestivos o inflamación.
Además, las comidas nutritivas son importantes para aportar nutrientes esenciales, como vitaminas y minerales, que contribuyen al funcionamiento óptimo del cerebro y a los niveles de energía a lo largo del día. Incluir la preparación de comidas en su rutina semanal es una forma sencilla de garantizar una nutrición adecuada y ahorrar tiempo durante las semanas ajetreadas.
4. Hacer viajes
Alejarse del ajetreo de la vida cotidiana puede ser una forma estupenda de cuidar la salud física y mental. Hacer viajes, aunque sean cortos, te permite desconectar de los factores estresantes y relajarte de verdad. Esto puede ayudarle a reducir la fatiga, mejorar su estado de ánimo y darle más energía para el resto del día. Además, explorar nuevos lugares o volver a visitar los conocidos puede ser estimulante tanto para el cuerpo como para la mente. No olvides llevar calzado cómodo para poder explorar sin hacerte daño en los pies.
5. Cuida tu cuerpo
Al igual que la cirugía plástica puede darte un cuerpo de ensueño, hay formas naturales de cuidar tu cuerpo. Seguir una dieta sana, hacer ejercicio con regularidad, someterse a tratamientos de belleza, etc.
La idea es darle a tu cuerpo lo que necesita protegiéndolo de todo tipo de agresiones. Crea tu propia rutina y establece una disciplina para cumplirla
6. Dormir lo suficiente
Dormir lo suficiente es esencial para mantenerse en forma. Tu cuerpo necesita tiempo para descansar y recuperarse de las actividades diarias para mantenerse sano. Asegúrate de dormir entre siete y nueve horas cada noche para tener suficiente energía durante el día. Esto también ayudará a mantener su rendimiento cognitivo agudo y mejorar el bienestar general.
7. Practica la meditación
La meditación es una de las mejores formas de reducir el estrés y relajar la mente. Ayuda a aclarar los pensamientos y a mejorar la concentración. Dedicar tiempo a meditar con regularidad te ayudará a mantenerte equilibrado y fresco. Puedes practicar la meditación en cualquier lugar: en casa, en el trabajo o incluso al aire libre. Existen muchos tipos de meditación, como la meditación guiada, la meditación con mantras, la meditación de atención plena, etc.
8. Tómese su tiempo para descansar
El descanso es esencial para mantenerse sano. Dormir lo suficiente da a tu cuerpo tiempo para recargarse y repararse después de un largo día. Es una de las mejores formas de combatir el dolor de espalda. Intente dormir entre 7 y 8 horas cada noche y cree una rutina nocturna que favorezca un sueño reparador, como apagar los dispositivos electrónicos una hora antes de acostarse, leer un libro en lugar de ver la televisión o darse un baño caliente antes de apagar las luces.
9. Ordene su casa
Vivir en un espacio organizado no sólo aumenta tu productividad, sino que también mejora tu estado de ánimo general. Si desordena y ordena su casa con regularidad, podrá encontrar objetos rápidamente cuando los necesite y eliminar distracciones innecesarias que pueden provocarle estrés y ansiedad. Asegúrese de que todos los objetos ocupan el lugar que les corresponde para poder encontrarlos fácilmente cuando los necesite sin crear desorden en su hogar.
10. Limite las pantallas
Es importante limitar el tiempo frente a las pantallas, ya que una exposición excesiva a las mismas puede dañar la vista y plantear otros riesgos para la salud, como problemas de salud mental, como depresión y ansiedad, debido a la falta de interacción social o de actividad física en lugar de estar pegado a las pantallas todo el día. Reserva 30 minutos al día para realizar actividades físicas, como hacer ejercicio o salir al aire libre, en lugar de desplazarte por las redes sociales en teléfonos o tabletas durante este periodo de tiempo. Esto ayudará a aumentar los niveles de energía durante todo el día, al tiempo que permite una mejor calidad del sueño durante la noche.