Delegados sindicales de UGT y CCOO han celebrado este lunes en las ocho capitales andaluzas concentraciones para exigir a los empresarios el estricto cumplimiento de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales y a las administraciones públicas una respuesta contundente que reduzca drásticamente la siniestralidad laboral.
Movilización que en Cádiz se ha llevado a cabo frente a la sede de la Confederación de Empresarios de Cádiz (CEC) precedida de un minuto de silencio por un nuevo accidente laboral mortal durante la misma mañana. Un transportista de 45 años de edad ha fallecido en Chiclana, en el polígono Pelagatos, tras quedar atrapado bajo varias vigas que le habían caído encima mientras llevaba a cabo labores de descarga. Ya se ha informado a la Inspección de Trabajo y al Centro de Prevención de Riesgos Laborales.
En lo que va de año, y sumando este último y el de un funcionario de Vigilancia Aduanera este fin de semana en Algeciras tras caer su helicóptero al mar, se han registrado ya 14 personas fallecidas en la provincia gaditana en accidentes de trabajo.
“EL TRABAJO NO PUEDE COSTARNOS LA VIDA”
Durante la concentración ante la sede de la patronal, los sindicatos mayoritarios han leído un comunicado en el que reflejan que la vuelta a la normalidad tras meses de pandemia y restricciones “está dejando una cifra de siniestralidad alarmante”. Así, tras la fuerte bajada de la actividad económica que se tradujo en un descenso de los accidentes in itínere, “el escenario actual está demostrando que las empresas continúan relegando la salud y la seguridad de los trabajadores y las trabajadoras a un segundo plano”. Las cifras “así lo demuestran: 59 personas trabajadoras fallecidas en los primeros seis meses del año en Andalucía, uno cada tres días”.
En este texto al que ha tenido acceso DIARIO Bahía de Cádiz, se subraya que entre los años 2017 a 2020 han fallecido en la comunidad autónoma 452 trabajadores: “personas que fueron al trabajo a buscarse el sustento y encontraron la muerte. Que no tuvieron la oportunidad de volver a sus hogares. Familiares de los fallecidos que tampoco pudieron ver más a sus seres queridos. Noticias que siempre pasan desapercibidas en medios de comunicación y que son también una pandemia en pleno siglo XXI”.
Para CCOO y UGT, “el constante aumento de las muertes en el trabajo debe ser abordado de forma urgente”. “La escasa implicación y cultura preventiva en el tejido empresarial, los incumplimientos de la normativa en prevención de riesgos laborales por parte de los empresarios, la organización del trabajo basada en un modelo de competitividad empresarial en el que las personas están relegadas a un segundo plano de la actividad, la no existencia de políticas adecuadas en materia preventiva y la falta de inversión en prevención en muchas empresas de Andalucía, la poca voluntad empresarial de mejoras en el lugar de trabajo unida a la escasa sensibilización y concienciación de la seguridad y salud laboral; la precariedad en el empleo, la falta de formación e información en materia preventiva en las empresas… son algunas de las causas que nos están llevando a una cifra de accidentes laborales insostenible”, se advierte.
“No vamos tolerar que la salida de una nueva crisis se haga pagando el mismo peaje en las empresas: a costa de reducir costes en medidas de prevención”, insisten UGT y CCOO; remarcando que esta situación tiene “su versión más dura” en las pequeñas empresas donde no hay representación de las personas trabajadoras, “por lo que es fundamental la creación de la figura del delegado sectorial o territorial de Prevención”.
Y a ello se une la falta de Inspectores de Trabajo que permitan aumentar la vigilancia de las empresas que incumplen la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, “dejando a los trabajadores en una situación de vulnerabilidad ante los riesgos de su puesto de trabajo, sin que se adopten medida realmente efectivas para frenar este aumento de la siniestralidad”.
Con este contexto, ambos sindicatos coinciden en demandar el “reforzamiento” de la Inspección de Trabajo dotándola de mayores recursos; así como también el aumento de los técnicos habilitados de la Junta y la puesta en marcha por parte de ésta, de una fuerte campaña de sensibilización en todos los medios de comunicación “en la que se plasme, de forma contundente, la realidad que existe detrás de cada accidente laboral”.
Además, se reivindica que en cualquier accidente laboral grave o mortal donde la actuación del empresario haya sido negligente, “se depuren todas las responsabilidades administrativas, civiles y penales” y, en este sentido, se insta a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social y a la Fiscalía de Siniestralidad Laboral “que actúen con la máxima contundencia”.
“La seguridad y la salud de los trabajadores ha de ser una prioridad cueste lo que cueste. La sociedad debe ser consciente, ahora más que nunca, que el trabajo no puede costarnos la salud ni la vida”, sentencian ambos sindicatos en el manifiesto leído en las concentraciones celebradas por toda Andalucía.