Todos queremos que nuestra conexión de internet inalámbrica (lo que conocemos como WIFI) de nuestra casa vaya lo más rápida posible para poder ver series de más calidad más rápido, trabajar mejor o navegar, en definitiva, a una velocidad más rápida.
Si tenemos algún problema con la conexión y queremos mejorarla, hay varias opciones. La más rápida puede ser la de instalar un repetidor para amplificar la señal de nuestro internet.
El uso del repetidor WIFI es muy sencillo, ya que se conecta a al enchufe como cualquier otro utensilio de la casa, pero debemos tener en cuenta que la conexión inalámbrica depende de los muros, el espacio y los lugares donde más frecuentemente vayamos a usar internet.
Debemos tener en cuenta que la velocidad de internet que podamos tener finalmente en casa va a depender de la distancia a la que se encuentra el router del repetidor, por lo que hay que tener un equilibrio entre amplificar la señal para que llegue a todos los lugares de la casa y que esté lo suficientemente cerca del origen, en este caso el router.
Hay un aspecto que debemos tener en cuenta pero que casi siempre obviamos a la hora de usar internet. Si usamos un cable para conectarnos al router, no habrá pérdida de velocidad y mejoraremos así de manera sencilla el internet de casa. Pero claro, esta opción no es viable si somos varios usuarios los que vamos a usar internet en casa y será mejor favorecer el uso de WIFI.
En este ámbito del mundo WIFI, los WIFI inteligentes cambiaron las reglas de juego ya que podemos conseguir que nuestro repetidor de señal se integre directamente en la misma red que el router principal. Debido al concepto EasyMesh, hay un único modelo estándar aunque no sean del mismo fabricante. Esto facilita que podamos tener un objeto (router o repetidor) de una marca y el otro de otra.
¿Qué repetidor debo comprar?
Como es normal, siempre que nos fijamos en comprar un producto que tiene plena vigencia y con el que hay una innovación constante, en las tiendas contaremos con muchas opciones para que elijamos el que más encaje con nosotros.
Quizá el punto más útil que debemos tener en cuenta es que sea fácil de conectar e instalar, porque muchas veces, por intentar conseguir un producto más avanzado al final tenemos más problemas de la cuenta. Lo normal es que esta instalación se realice presionando un botón o instalado un programa en nuestro ordenador o una app en nuestro teléfono móvil.
Como decía antes, no debemos olvidar buscar que el amplificador cuenta con puerto RJ45 para conectar un cable de red Ethernet, y así dar conexión a aparatos que no tengan WIFI.
Por último, pero también muy importante, debemos tener en cuenta la velocidad de la red. Hoy en día una velocidad normal debería ser de 300 Mbps, y así, en cualquier punto de la casa y sin pérdida de velocidad, gozaremos de un internet muy rápido. DIARIO Bahía de Cádiz
