El Palacio de Congresos de Cádiz se ha llenado este miércoles con unas 900 mujeres pertenecientes a un centenar de colectivos y entidades de la provincia, que han respondido al ‘Encuentro de asociaciones de mujeres de la provincia de Cádiz’, una iniciativa del servicio de Igualdad de la Diputación.
La cita ha contado con la asistencia de las diputadas de área de Igualdad y Bienestar Social, Isabel Armario e Isabel María Moya, así como otros miembros de la Corporación provincial. Y, por su puesto, con la presidenta, Irene García, que daba la bienvenida a los presentes con dos mensajes claros: “ni un paso atrás en materia de igualdad” y “unidad de las mujeres en la defensa de sus derechos y de una sociedad justa y equitativa”.
Según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, el encuentro se ha articulado en torno a las aportaciones de referentes internacionales del feminismo, como Amelia Valcárcel, Catedrática de Filosofía Moral y Política de la UNED y doctora Honoris Causa por las universidades de Veracruz y Valencia, que ha abierto los contenidos con una ponencia titulada ‘Feminismo y Democracia’.
El programa ha seguido desarrollándose con la intervención de Yolanda Rodríguez, artista y activista, con su ponencia-acción ‘Mujeres mayores en el imaginario’. A continuación el turno ha sido para una mesa redonda sobre el tejido asociativo.
Un espectáculo y la lectura de un comunicado elaborado con las aportaciones de las asociaciones de mujeres como resumen de esta jornada, han puesto el broche final a esta muestra de activismo feminista gaditano.
“DEBATIR, REFLEXIONAR Y EMPODERARNOS”
En la inauguración, la presidenta de la Diputación, Irene García, se confesaba “muy emocionada” por la multitudinaria respuesta a esta convocatoria diseñada para “debatir, reflexionar y sobre todo empoderarnos; y seguir tejiendo una red imprescindible, ahora más que nunca, que debe ser tan tupida que no se nos escape ninguna mujer”.
La socialista ha puesto de manifiesto el valor del movimiento de asociaciones de mujeres, que ha calificado como “las verdaderas protagonistas en la obtención de los mejores avances de nuestra sociedad”. Si bien, ha reseñado que este trabajo asociativo debe ir acompañado del compromiso por la igualdad de las personas que ostentan cargos de responsabilidad.
A este respecto, García ha hecho un llamamiento a la unidad de las mujeres, ante las amenazas que se ciernen sobre los avances conseguidos en 40 años de democracia postfranquista en un momento trascendente para el feminismo. Cuando el debate político alberga ideas que amenazan con hacer retroceder la conquista de derechos logrados, ante el resurgimiento de la ultraderecha, ha defendido la necesidad de iniciativas como este encuentro, y ha ejemplificado en dos aspectos especialmente relevantes la desigualdades que aún presenta nuestra sociedad: el desempleo femenino y, especialmente, la violencia de género, como expresión máxima de un sistema no equitativo que debe ser combatido, por una cuestión de justicia social.