Ante la situación en la que se encuentra el proyecto del problemático aparcamiento de Pozos Dulces, en pleno centro histórico de El Puerto, Unión Portuense plantea una “propuesta constructiva” para “acabar de una vez con la bochornosa imagen que presenta la entrada de la ciudad”: que sea el Ayuntamiento quien asuma los 7 millones de euros que se dicen que faltan “y finalice el parking, de una vez por todas”.
Y es que meses atrás el alcalde, Germán Beardo, admitía que si en agosto no hay avances por parte de la promotora de las obras, estancadas desde hace tiempo, se pasará a descartar el proyecto que tanto ansiaba la derecha, y se procederá a urbanizar la superficie. La obra en sí, a la que se oponía toda la oposición en el Ayuntamiento junto a un importante movimiento vecinal (y que dejó atada y bien atada el PP, junto al ya extinto PA antes de quedarse sin el gobierno local en 2015), se iniciaba sobre el terreno a mediados de noviembre de 2016, con un plazo de ejecución de unos 14 meses. Hoy día tras numerosos parones no ha superado el ecuador de los trabajos totales.
El Ayuntamiento anunciaba en otoño de 2019 la reanudación de la construcción. En ese momento Beardo afirmaba que se había logrado una solución a la parte administrativa, pero todavía quedaba por resolver la parte económica para darle viabilidad al proyecto. Más de dos años después, el mismo primer edil conservador reconocía sin admitirlo su fracaso, otra promesa incumplida, avanzando que si este verano no hay avances se pasará a descartar este parking subterráneo, y se procederá a urbanizar la superficie empleando, en principio, el dinero del aval de la actuación, unos 500.000 euros. Hoy día sigue sin aparecer un socio inversor que ponga los alrededor de 6 millones de euros que restan para poder concluir los trabajos, adjudicados a Gyocivil.
“El alcalde propone que cerremos la cubierta y dejemos el parking sin construir. Una solución aberrante a un proyecto aberrante. Eso sí, al mismo tiempo que el parking de Pozos Dulces no se termina, la presidenta de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz, la popular Teófila Martínez, construirá otro parking subterráneo, esta vez en la Bajamar”, denuncia el concejal de Unión Portuense, Javier Botella. Hace unas semanas el Gobierno local de PP y Cs ha aprobado dicha licencia “urgente y extraordinaria” a favor de la APBC, sin apenas darle publicidad.
En este punto, en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, este partido de la oposición aclara “una cuestión muy importante que Beardo omite deliberadamente”. Y es que en caso de que no se finalice el aparcamiento de Pozos Dulces, “el Ayuntamiento tarde o temprano tendrá que devolver el préstamo de 10 millones concedido por Europa, así como hacer frente a posibles penalizaciones y demandas por incumplimientos de contrato”.
“Si se necesitan 7 millones para finalizar el parking, o de lo contrario quedarnos sin él y, además, pagar mucho más de 10 millones de euros…”, ante esta disyuntiva, Botella aboga por terminar la obras. “Recientemente, se aprobó la liquidación del presupuesto municipal de 2019 con un superávit de 25 millones. Y la de 2020, con la parálisis por la pandemia, se prevé mayor, por lo que no tienen excusa de liquidez”, apostilla.
Sobre el “boquete” de Pozos Dulces, el portavoz de Unión Portuense ha recurrido a redes sociales para plantear su solución en un video, en el que se realiza además un repaso histórico de forma “didáctica y dinámica” del eternizado asunto: desde los primeros trámites administrativos en 2009 y 2011 con la cesión de los subsuelos; la creación de la empresa Impulsa Aparca, encargada de elaborar y gestionar los dos parkings subterráneos, todo ello en época del exalcalde del PP Enrique Moresco; la inacción de su sucesor Alfonso Candón o el mandato de David de la Encina, con la auditoria del proyecto, la cancelación del parking de plaza de toros o los retrasos acumulados; “un resumen de las claves de esta historia” que “termina con las infructuosas soluciones que Germán Beardo prometió y que finalmente no han llegado tras dos años de mandato”.
No me puedo creer que no haya una sola empresa en la Bahía de Cádiz, en Jerez o en Andalucía que no se quisiera hacer cargo de esa obra con una concesión administrativa de, no se… digamos 75 años de explotación??? al cabo de los cuales la instalación revertiera de nuevo al Ayuntamiento para proceder a una nueva puja para una nueva concesión administrativa en concurso público. Incluso algunas plazas de aparcamiento se podrían dedicar a residentes que imagino que en esa zona habría muchos ciudadanos interesados en adquirir.
En fin, que veo intereses muy oscuros en el empeño de no acabar una obra tan necesaria para el Puerto. Primero por la localización ya que por interés ecológico se evitaría la entrada de vehículos más allá de la Rivera del Marisco y segundo por el económico ya que esa zona está cercana a todas las actividades comerciales y turísticas del Centro Comercial Abierto tan cacareado por las administraciones.
Independientemente de esto, veo con buenos ojos el aparcamiento de la Baja Mar siempre y cuando se concluya este de Pozos Dulces y además, el de la zona de la Plaza de Toros, también muy necesario, sobre todo en días de corrida y por la proximidad de la Zona Comercial de La Plaza de la Noria y Avda. del Ejército.
Movilización vecinal es lo que hace falta. A ponerse las pilas!!!